Doce de las catorce ciudades de más de 50.000 habitantes sin conexión ferroviaria están en Andalucía
El de Marbella es el único núcleo urbano con más de 150.000 habitantes que sigue sin comunicaciones por tren
El Gobierno de Sánchez obvia una treintena de actuaciones ferroviarias en Andalucía

Atasco en la A-7 a la altura de Marbella
El servicio ferroviario en España lleva meses evidenciando una profunda crisis estructural en la que las averías, los retrasos y los cortes de línea son la constante. Andalucía no sólo no es la excepción, sino que además concentra con una frecuencia poco deseable un ... gran número de incidencias. Por si esto fuera poco, la región lidera un agraviante ránking nacional, el de las ciudades de tamaño medio que todavía no están conectadas por tren.
De esta forma, de los catorce municipios españoles de más de 50.000 habitantes que aún no cuentan con esta solución de transporte, una docena radica en Andalucía.
Cinco casos en Málaga
Las localidades se reparten entre cinco provincias, si bien Málaga es la que ofrece un mayor número de ejemplos de carencia ferroviaria. Son los casos de Estepona, Mijas, Rincón de la Victoria y Vélez-Málaga, pero especialmente el de Marbella. Entre otras cuestiones porque se trata de la única urbe de más de 150.000 habitantes de todo el país por la que no pasa el tren.
Y eso que se lleva intentando que sea una realidad desde hace casi medio siglo: el primer proyecto se trazó en 1979. La vez que estuvo más cerca fue 2009, cuando el entonces presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, adjudicó dos tramos de la obra. Se terminó por cancelar.
Alcaldes y empresarios tanto de Marbella como de la Costa del Sol en general han clamado al Gobierno por el tren en incontables ocasiones. A nadie se le escapa el valor turístico de la zona y la pujanza económica que aportan al conjunto andaluz, al igual que trasciende la recurrente congestión de la A-7, cuya única alternativa es una autopista de peaje que ha vuelto a encarecer su tarifa de paso con la llegada de 2025.
Pese a todo, el ministro de Transportes Óscar Puente aseguraba hace casi un año que un tren en el entorno de Marbella era «complicado», entre otras cuestiones porque no había «un solo papel» que agilizase el proyecto. En diciembre parecía recapacitar y se comprometía a abordar el tren litoral. Pero los plazos son bastante dilatados.
El resto de municipios andaluces de envergadura desatendidos por Adif son El Ejido y Roquetas de Mar -éste con 109.204 habitantes en 2024-, en Almería; Chiclana de la Frontera, La Línea de la Concepción y Sanlúcar de Barrameda, en Cádiz; el sevillano Alcalá de Guadaíra y el granadino Motril.
En cambio, la veintena de ciudades medias de Cataluña y Madrid al completo sí que cuenta con conexión ferroviaria. De hecho, los únicos casos no andaluces habría que buscarlos en Alicante y Murcia, concretamente en Torrevieja y Molina de Segura.
Al margen quedarían los dos archipiélagos. Tanto en Canarias como en Baleares hay núcleos de más de 50.000 habitantes, pero la configuración de las islas y la imposibilidad de conectarlas a media o larga distancia por tren con el resto de la península, les dejan fuera de esta lista oficiosa. Pese a ello, 2025 podría ser el inicio de un proyecto ferroviario que recorrería la costa occidental de Gran Canaria con parada, por ejemplo, en Telde -102 867 habitantes el pasado año-.
Jaén, la única 'salvedad' andaluza
Por otra parte, cabe destacar que, más allá de sus capitales, ni Córdoba ni Huelva cuentan entre los límites de sus provincias con algún municipio que tenga una demografía por encima de este simbólico umbral, de lo contrario es bastante probable que la lista estuviera aún más engrosada por tierras andaluzas. Las localidades que más se acercan son, respectivamente, Lucena -con 43.040 habitantes en 2024-, y Lepe -con 29 241 ciudadanos en el mismo censo-.
El caso de Jaén es diferente -capital aparte- pues la movilidad de los más de 55.000 linarenses sí que está garantizada por una estación de tren, la de Linares-Baeza, que les brinda conexiones diarias con el grueso de Andalucía y con Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana y Castilla La Mancha, amén de transporte de mercancías y servicio logístico. En la provincia no hay más municipios con tanta demografía como para aspirar a un servicio que ni siquiera logran tener las que rondan los 100.000 habitantes. Así pasen los años.