Un 37,5% de los andaluces está en riesgo de pobreza y exclusión social, once puntos más que la media nacional
La pobreza vuelve a subir en el último año, según la encuesta de condiciones de vida publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE)
![Un hombre echado en un banco en el barrio sevillano de Los Pajaritos](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/espana/2024/02/26/pobreza-RxyA9IKoeBbqP8DvY7H5GFM-1200x840@diario_abc.jpg)
El 37,5% de los andaluces se encuentra en riesgo de pobreza y exclusión exclusión social, sin recursos con los que pagar las necesidades básicas, según la encuesta de condiciones de vida publicada este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Está once puntos por encima de la media de España, donde la denominada tasa Arope, que mide el riesgo de pobreza o exclusión social, creció medio punto en el último año hasta situarse en el 26,5%, mientras que la población con «carencia material y social severa» escaló hasta el 9 %, la tasa más alta desde 2014.
Según datos de la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondientes a 2023, por grupo de edad, Andalucía fue la comunidad con la tasa Arope más elevada (que mide la tasa de riesgo de pobreza relativa, el porcentaje de población con baja intensidad en el empleo y la carencia material y social severa), sólo por detrás de Ceuta (41,8%). A Andalucía les siguen Melilla (36,7%), Canarias (33,8%) y Extremadura (32,8%), Catilla-La Mancha (31,7%), Murcia (30,5%), Comunidad Valencia (29,6%), Galicia (25,5%), Asturias (25%), Castilla y León (22,4%), Cantabria (22%), La Rioja (21,8%), Cataluña (21,2%), Aragón (20,4%) y Baleares (20%).
Por sectores de población, la encuesta --realizada entre febrero y mayo de 2023-- detalla que subió 2,1 puntos entre los menores de 16 años y 0,4 en el grupo de 16 a 64 años. Por el contrario, bajó 0,4 puntos entre los de 65 y más años.
En el lado contrario, País Vasco (15,5%) y Comunidad Foral de Navarra (17,2%) presentaron las tasas de riesgo de pobreza o exclusión social más bajas.
Respecto a las tasas de riesgo de pobreza, las más elevadas se dieron en Andalucía (30,5%), Extremadura (27,6%) y Canarias (26,1%). País Vasco (10,2%), Comunidad de Madrid (12,9%) y Comunidad Foral de Navarra (13,8%) presentaron las tasas de riesgo de pobreza más bajas.
En cuanto a la tasa Arope por nivel de formación alcanzado, la encuesta revela que la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social por nivel de formación alcanzado, en el caso de personas con educación superior fue del 13,3%; del 25,7 entre personas con estudios de secundaria de segunda etapa; del un 33,5% entre personas con estudios de secundaria de primera etapa y del 36,7% entre personas con educación primaria o un nivel de estudios inferior.
Sobre la tasa Arope por situación laboral, entre los ocupados fue del 16,6%; entre los jubilados, del 17,2%; otros inactivos, del 38,0% y entre los parados, del 56,7%.
Gastos imprevistos
Además, la encuesta revela que el 37,1% de los hogares españoles no tenía capacidad para afrontar gastos imprevistos el año pasado, porcentaje casi dos puntos superior al de 2022 y el más elevado desde el ejercicio 2016 (38,7%).
El organismo considera que los hogares tienen capacidad para hacer frente a gastos imprevistos cuando disponen de recursos propios para ello, es decir, sin recurrir a préstamos o compras a plazos para pagar gastos habituales que antes se liquidaban al contado.
La encuesta muestra que el 9,3% de los hogares llegaba a final de mes con «mucha dificultad» en 2023, porcentaje seis décimas superior al de 2022 y el más alto desde 2020, cuando éste alcanzó el 10%.
El INE apunta además que el número de hogares que no se ha podido permitir ir de vacaciones al menos una semana al año se situó en 2023 en el 33,1%, porcentaje cuatro décimas inferior al de 2022 y el más bajo desde 2021 (32,7%).
El 10% de los hogares admite que se retrasa en los pagos a la hora de abonar gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca, alquiler, comunidad, etc.). Este porcentaje no ha variado respecto a 2022.
Asimismo, el 21% de las familias, una de cada cinco, asegura que no puede mantener la vivienda a una temperatura adecuada, porcentaje que se ha disparado más de tres puntos respecto a 2022 (17,7%) y que es el más elevado desde 2004, inicio de la serie.
Al mismo tiempo, el 6,4% de los hogares declara que no puede permitirse una comida de pollo, carne o pescado al menos cada dos días, porcentaje un punto superior al de 2022 y también el más alto desde el inicio de la serie.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete