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Ya hay sucesor para «Txeroki»: Aitzol Iriondo

Aitzol Iriondo Yarza, alias «Gurbitz», lugarteniente de «Txeroki», es un duro entre los duros, otro etarra de la nueva hornada con amplio historial terrorista

Donostiarra de 31 años, Aitzol Iriondo comenzó su carrera terrorista en 1994, cuando fue detenido por los sucesos ocurridos en San Sebastián en protesta por la muerte del etarra José María Igerategi, que perdió la vida al estallarle la bomba que transportaba. En 2002 fue nuevamente detenido, esta vez por la Ertzaintza, durante una operación contra el terrorismo callejero. Sólo unos meses después, en octubre, el pistolero huyó a Francia tras la desarticulación de un «talde» llamado «K-Zelatun», de apoyo al «comando Donosti». Desde entonces se encuadró en la estructura de la banda en Francia.

En ese país está condenado en rebeldía en dos ocasiones, en 2007 y este año. Se le considera un tipo frío, que encarna la línea más dura de la banda, si bien no está demostrada hasta el momento su participación directa en asesinato alguno.

No obstante, algunas fuentes de la lucha antiterrorista consideran, dado su perfil criminal, que podría estar relacionado con tres asesinatos aún sin resolver: el cometido en 2001 en un bar de Lasarte del que fue víctima el concejal socialista Froilán Elespe; el del sargento de la Policía Municipal de Andoain Joseba Pagazaurtundúa, perpetrado en febrero de 2003, y el del presidente del PP de Aragón, Manuel Giménez Abad. Incluso, hace algunos meses se le consideraba autor de los asesinatos en Capbreton de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero, si bien posteriormente se ha sabido que «Txeroki» asegura que es él el asesino de los agentes del Instituto Armado.

Iriondo, que trasladaba las órdenes de «Txeroki» al «comando Vizcaya», ha dejado su rastro en algunos de los atentados más recientes. El 9 de septiembre del pasado año, la Policía desactivó en Logroño un coche bomba colocado por el «Vizcaya» frente a la delegación de Defensa. En el vehículo aparecieron las huellas del etarra.

En febrero del pasado año se añadió la fotografía de Aitzol Iriondo al cartel de los terroristas más buscados, colocados incluso en Francia. Ayer cayó «Txeroki», su jefe directo; más tarde o más temprano él correrá esa misma suerte.

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