Rajoy buscará el «ok» de Merkel a la compra de deuda

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la canciller alemana, Angela Merkel, abordarán hoy la delicada situación financiera de España y la Eurozona durante el almuerzo de trabajo que ambos mantendrán a partir de las 13:00 horas en el Palacio de La Moncloa. El mismo día en que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, podría anunciar la compra de deuda pública, el jefe del Ejecutivo intentará convencer a la canciller de que esta operación es la mejor solución para la crisis del euro a corto plazo. La voz de Alemania es decisiva para que las medidas que adopte Mario Draghi se mantengan mientras sea necesario, y el presidente busca una solución estable que destierre posibles sobresaltos, hasta que una mayor integración europea sea una realidad. La comparecencia de Draghi se producirá, de hecho, durante el almuerzo de trabajo que mantendrán ambos líderes a partir de las 13:00 horas, y antes de su comparecencia conjunta prevista para las 14:30 horas. Quiera Merkel o no, están obligados a analizar el tema.

Rajoy también ofrecerá. El presidente del Gobierno pondrá en valor las reformas y sacrificios llevados a cabo hasta ahora, y explicará a la canciller los ajustes comprometidos hasta 2014 insistiendo en que España cumplirá sus compromisos y su agenda reformista es imparable. Al jefe del Ejecutivo analizará los problemas de España como parte de la crisis del euro, y ambos líderes también analizarán la situación de la moneda única y la Eurozona, repasando sus fortalezas y debilidades.

La Moncloa es optimista respecto a la visita. Ante la prensa, se espera que la canciller lance un mensaje de tranquilidad y apoyo a la irreversibilidad del euro, y se da prácticamente por hecho que elogiará las reformas de España. Estará en suelo madrileño y no se espera ni que eche en cara nada al Gobierno -nunca ha dicho nada malo del presidente, resumen en La Moncloa-, ni que lance uno de sus mensajes electorales, arrojando dudas sobre la moneda única. El escenario más beneficioso para el presidente del Gobierno sería que Merkel valore positivamente las medidas de Draghi y supedite las demás decisiones europeas al Consejo Europeo del 19 de octubre.