El Príncipe preside el funeral por los dos militares muertos en Afganistán
Zapatero y Rajoy no han estado presentes por coincidir el acto con el debate sobre el Estado de la Nación
Los dos militares fallecidos el pasado domingo en un atentado en Afganistán, el sargento Manuel Perrino y de la soldado Niyireth Pineda , fueron despedidos este martes por sus familiares y compañeros en una emotiva ceremonia presidida por el Príncipe de Asturias y celebrada en la base militar general Alemán Ramírez de Las Palmas de Gran Canaria , en la que ambos fueron distinguidos con la máxima distinción militar para fallecidos en actos violentos.
Con puntualidad castrense, la ceremonia comenzó a las diez de la mañana, cuando los féretros de los dos militares, cubiertos con la bandera española, entraron en el patio de armas del acuartelamiento del Regimiento Canarias 50, a hombros de sus compañeros del Regimiento de Infantería Soria 9 , con sede en Fuerteventura.
El funeral fue oficiado por el arzobispo castrense, Juan del Río, que estuvo acompañado por el obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases. Durante su breve homilía, Del Río destacó el papel de las Fuerzas Armadas españolas en sus misiones de paz en el extranjero y se preguntó «¿qué precio tiene la libertad?» antes de ofrecer «el bálsamo del consuelo humano» a los familiares de los dos fallecidos, ya que «no tenemos fórmulas mágicas» para devolverlos a la vida.
El arzobispo castrense recordó que los militares «son entrenados para entregar su vida» y reconoció que «si es humano llorar su partida, es más alentador saber que ellos entendieron que su muerte no era el final del camino».
Tras la ceremonia religiosa, y antes del homenaje a los caídos en defensa de España, Don Felipe depositó sobre los féretros de Argudín y Pineda la Cruz del Mérito Militar con distintivo rojo , máxima condecoración que puede otorgarse a un militar fallecido en acto violento.
Los momentos más emotivos
Sin embargo, los momentos más emotivos de la ceremonia, a la que asistieron también la ministra de Defensa, Carme Chacón, el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, el general José Julio Rodríguez, el presidente del Gobierno de Canarias en funciones, Paulino Rivero, o el portavoz del PP en el Senado, Pío García Escudero, entre otras autoridades civiles y militares, coincidieron con el homenaje a los caídos, en el que la banda de música del Mando Aéreo de Canarias interpretó «La muerte no es el final», instante en el que muchos de los familiares de los fallecidos fueron incapaces de contener las lágrimas.
Lágrimas y dolor que volvieron a hacer acto de presencia minutos después cuando, tras entregar las condecoraciones y las banderas que cubrían los féretros de sus compañeros a los familiares, los miembros del Regimiento de Infantería Soria 9 condujeron los restos mortales Manuel Argudín y Niyireth Pineda hasta los coches fúnebres en los que emprendieron su último viaje, hacia Palencia y Colombia , respectivamente.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete