Una patología causada por la falta de riego sanguíneo en el cerebro
Esta lesión es producida por una falta de riego sanguíneo en el cerebro. En función del tiempo que transcurra sin que llegue sangre a este órgano el infarto cerebral puede dar lugar a una hemiplejia o parálisis de un lado del cuerpo. Los primeros síntomas suelen ser mareos, vértigos, parálisis de algunos grupos musculares y pérdida del habla.
![El equipo médico que atiende a Don Jaime de Marichalar, esta madrugada. E. Agudo](https://s3.abcstatics.com/media/200112/23/Mari.jpg)
El origen de este tipo de lesiones suele ser una isquemia debida a la reducción del flujo sanguíneo hasta niveles que son insuficientes para mantener el metabolismo necesario para la normal función y estructura del cerebro.
Esta disminución del riego se produce por una estenosis u obstrucción aterosclerótica de la luz arterial, por espasmos arteriales, embolismo o compresión arterial extrínseca. La carencia de oxígeno determina enfriamiento, palidez, pérdida de volumen y disfunción del órgano. Cuando la hipoxia (falta de oxígeno debida a la falta de riego sanguíneo) es importante o prolongada puede dar lugar al infarto de dicho órgano.
Para determinar la parte del cerebro afectada, se pueden realizar tanto una tomografía axial computarizada (TAC) como una resonancia magnética nuclear (RNM). El tratamiento del iinfarto cerebral suele pasar por la administración de antiagregantes plaquetarios como la aspirina o la ticlopidina que ayudan tanto a restablecer el riego sanguíneo como a prevenir nuevos episodios.
Si la causa de la falta de riego fuese una obstrucción coronaria debido a un trombo, se podría plantear una intervención quirúrgica para eliminarlo, aunque este tipo de operaciones son siempre muy complicadas e implican un grave riesgo.
Los principales síntomas de la isquemia son una gran palidez, respiración dificultosa, pulso breve y frecuente, vértigos, zumbidos, vista nublada, pérdida de la conciencia e incluso breves accesos convulsivos.
El infarto cerebral a consecuencia de la falta de riego prolongada, puede dar lugar a una llamativa sintomatología con hemiplejia completa (o sea, una parálisis de los músculos de una mitad completa del cuerpo), contralateral (porque los centros cerebrales mandan a los músculos del lado opuesto, a causa del entrecruzamiento de las fibras nerviosas descendentes en la médula oblonga y en la médula espinal), por la oclusión de la arteria cerebral media que irriga la zona cortical motora y la cápsula interna, o bien parálisis localizadas (monoplejias) de uno o más grupos musculares, o alteraciones de la sensibilidad dolorosa y tactil, del lenguaje (en las lesiones corticales del lado izquierdo), del equilibrio, de cualquier percepción sensorial y de funciones psíquicas.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete