Bono mantiene la vigilancia «dinámica» y la de su chalé

José Bono, expresidente del Congreso de los Diputados y exministro de Defensa, continúa disfrutando de vigilancia personal pagada por el Estado. A pesar de que lleva alejado de la primera línea política desde hace más de seis años, el Ministerio del Interior permite que el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil todavía custodien al expresidente de Castilla-La Mancha y su chalé en una urbanización de Olías del Rey (Toledo). Este pueblo, de 8.000 habitantes, está situado a diez kilómetros del casco viejo de la capital regional.

En el caso de los policías que participan en la «protección dinámica», los tres agentes adscritos a la plantilla de Toledo hacen también las veces de conductores . La Policía Nacional ya estuvo a punto de conseguir retirar la custodia a Bono a finales de 2015, pero el expresidente del Congreso logró paralizar la orden del Ministerio del Interior, según han confirmado fuentes policiales.

La Guardia Civil también ha intentado, sin éxito, quitar la vigilancia del chalé que el exlíder socialista posee en el municipio toledano, donde varios guardias civiles se turnan para vigilar el inmueble solamente por la noche, si bien la vivienda está vacía de moradores la mayoría de los días.

El chalé tiene instalado un circuito interno de televisión, que se controla desde una garita de vigilancia integrada en la fachada principal. Esta habitación continúa sin aire acondicionado desde que fue desmontado el aparato que había para instalarlo en otro lugar de la residencia. «La garita es un horno en verano y un congelador en invierno», afirma un guardia que conoce la finca. No obstante, Bono ha introducido alguna mejora (una mesa y un televisor) después de que ABC publicase en enero las «deplorables condiciones» del cuarto.