entrevista

Nerea Llanos: «ETA ha dejado de matar, pero aún nos falta ganar la convivencia»

La secretaria general del PP vasco: «No es una quimera volver a los 300.000 votos que se consiguieron en 2001»

Nerea Llanos: «ETA ha dejado de matar, pero aún nos falta ganar la convivencia» ignacio pérez

itziar reyero

Nerea Llanos (Bilbao, 1967) es el «revulsivo» que buscaba Arantza Quiroga para organizar un PP vasco más pegado a la calle y recuperar el pulso electoral. «Tenemos que dejar el despacho y salir a la calle», asegura la nueva número dos de un partido roto tras la salida de Iñaki Oyarzábal, muy contestada por la militancia.

-Tres mujeres ocupan la presidencia, secretaría general y portavocía del PP vasco. ¿Es solo casualidad?

-Arantza (Quiroga) buscaba unos perfiles y le encajábamos (habla también por Laura Garrido, la nueva portavoz). Ha coincidido. Y demuestra que las mujeres no necesitamos cuotas.

-Dicen que el nuevo PP vasco de Quiroga-Llanos será más conservador que el de Basagoiti-Oyarzábal.

-Se equivocan. No. Es el mismo PP de siempre. El autor de la ponencia política de Quiroga es el mismo, Borja Sémper, que quien la hizo con Basagoiti.

-Se habla de PP renovador... ¿Qué es?

-Un PP que se sitúa en Euskadi en un momento diferente porque ETA ya no mata. Aunque hay que seguir siendo exigente para que se disuelva incondicionalmente, sin premio. Es, sobre todo, un PP muy exigente con el relato, con cómo y quién lo contará. Y no va a ser quien más daño hizo. También es un PP imprescindible en la regeneración política. Los del PP vasco somos lo más alejado a los privilegios o prebendas. Hemos estado en la oposición, viviendo situaciones muy difíciles. Somos una fuerza imprescindible para recuperar esa confianza de los ciudadanos en la política... Somos imprescindibles en la recuperación económica de Euskadi. Somos exigentes con el Gobierno vasco. No puede ser que esté de brazos cruzados viendo cómo España se recupera por las medidas del Gobierno de Mariano Rajoy para salir de la crisis y se apunte a la ola sin tomar ellos decisiones. Y como alternativa al nacionalismo, somos la fuerza más exigente. Por encima de las identidades están las personas y sus necesidades. No se pueden aplicar recetas del siglo XIX para problemas del siglo XXI.

-Sin embargo, insisten en pactar con un PNV que no renuncia a romper.

-Porque somos un partido que, en la medida en que los acuerdos sean buenos para los vascos, va a estar en esos acuerdos, como el fiscal y presupuestario. Pero hay otros aspectos en los que el lendakari lo tiene muy claro. No sé con otros partidos, pero con el PP, ni nuevo estatus, ni concesiones a ETA ni al mundo de Bildu.

-¿Es una quimera volver a 300.000 votos como con Jaime Mayor en 2001?

-No. Hay que mantener el voto, recuperar a quien ha dejado de votarnos y conseguir nuevos nichos de votantes.

-La gran pregunta es ¿cómo?

-Haciendo algo que hasta ahora al PP vasco le costaba mucho: salir a la calle. Cuando uno tiene que ir a un pueblo a explicar y hablar con los vecinos y comerciantes, pero parece que llega Obama, es complicado. Pero ahora no. Tenemos más fácil bajar a la calle.

-¿Siguen teniendo difícil encontrar candidatos en según qué pueblos?

-Sí. No es igual en algunos pueblos de Guipúzcoa que en Álava.

-¿Por la presión de ETA?

-ETA ha dejado de matar, pero todavía nos falta ganar la convivencia. Nos falta ganar el pluralismo, que mucha gente vea que somos tan vascos como los de cualquier otro partido. Y que tenemos tanto derecho a hacer política, exactamente igual, que cualquier otro partido.

-¿Cuántos afiliados tienen?

-Cinco mil y pico.

-¿Es la organización del PP con menos militancia?

-No le puedo decir, no sé.

-¿Cree que aún hoy tener carné del PP es tabú en el País Vasco?

-En algunos municipios sí, porque la intolerancia sigue siendo total y absoluta. En las grandes ciudades no, tampoco en San Sebastián.

-¿Qué tiene Nerea Llanos que no tenía Oyarzábal?

-No creo que se trate de cualidades personales. La presidenta ha tenido en su cabeza un organigrama, unas determinadas características, unas formas o un proyecto, y le han encajado determinadas personas. Creo que yo le encajaba mejor que Iñaki, sin más.

-¿Por cofianza, afinidad personal?

-No sabría decirle. Es cierto que me llevo muy bien con Arantza. Para trabajar codo con codo, la afinidad personal es importante.

-El voto de castigo de las bases a Quiroga lo fue también para usted, ¿no?

-Probablemente era un voto que recelaba de las decisiones tomadas por Arantza. Y dentro de eso estoy yo, evidentemente. Lo que hay que hacer es trabajar para que esas personas compartan la decisión en un futuro.

-¿Qué va a hacer para volver a coser las heridas abiertas en el partido tras haber apartado a Oyarzábal?

-Iñaki sigue estando en el PP vasco. La gente se mueve. El camino se suele hacer andando. Cuando se vaya viendo que lo que perseguimos todos es pelear por el PP vasco, por los tres territorios, estoy convencida de que esos recelos se van a vencer.

-¿La baja del alcalde Iñaki Azkuna, muy enfermo, es una ventaja para la oposición? El PP ha caído mucho.

-Políticamente cambia mucho porque ese tirón es difícil que lo tenga otro candidato. Iñaki Azkuna es mucho más que el PNV, una figura contra la que es muy difícil competir. Tenemos que recuperar el voto en Bilbao. Y eso pasa por patearse los barrios, estar en la calle, y no por estar en los despachos.

-¿Habla usted euskera? ¿Ve necesaria la «euskaldunización» del PP?

-Ojalá. Me he puesto a aprenderlo cuarenta millones de veces, pero hablo poco. Y eso que con mis hijos sí. Es uno de nuestros dos idiomas y hay que usarlo. No como arma política.

-Quiroga pide a Rajoy un «liderazgo» ante el fin de ETA con Urkullu y PSOE. ¿Le frustra que el único mensaje del presidente sea «disolución»?

-No. Es que es la previa. Además, el liderazgo lo tiene. Pero es muy complicado exigirle al presidente un compromiso cuando el lendakari da credibilidad al sainete de los verificadores.

-¿Veremos pronto acercamientos de presos de ETA a las cárceles?

-El balón de la política penitenciaria y sus presos está en el tejado de ETA. La política penitenciaria nació porque ETA existía. Si ETA desaparece, esa política penitenciaria desaparece. Y los presos de ETA, si dejan de estar vinculados a la banda, un apéndice más, y se acogen a la ley, evidentemente su situación cambiaría.

-¿Va el País Vasco detrás de Cataluña? ¿Se convocará una consulta?

-No. Mientras esté Mariano Rajoy en el Gobierno de España, igual que no va a haber consulta en Cataluña, no la va a haber aquí. Estoy absolutamente convencida.

-¿El PP cree necesario reformar el Estatuto vasco?

-No nos negamos a ir a la ponencia (del Parlamento vasco) y estudiar (su reforma) si es necesario. No creemos que sea inmutable, pero hay unas reglas. Nada de saltarse la ley. Y primero hay que saber qué y para qué modificar. El PNV no lo dice, porque por debajo subyace otra idea.

Nerea Llanos: «ETA ha dejado de matar, pero aún nos falta ganar la convivencia»

Artículo solo para suscriptores

Accede sin límites al mejor periodismo

Tres meses 1 Al mes Sin permanencia Suscribirme ahora
Opción recomendada Un año al 50% Ahorra 60€ Descuento anual Suscribirme ahora

Ver comentarios