Chacón niega «rotundamente» que detrás de su abstención haya un deseo de liderar el PSOE

Ni sí, ni no. En tierra de nadie quedó ayer Carme Chacón al abstenerse ante la consulta soberanista de CiU y ERC que fracturó al socialismo. «No quise apoyar las resoluciones de partidos políticos que han puesto en marcha en Cataluña un proceso de secesión, no quiero contribuir a ese proceso», ha señalado esta mañana la exministra socialista en la Cadena Ser.

Chacón ha defendido que su decisión estuvo basada en su compromiso electoral y en sus convicciones personales. «Creo firmemente en el entendimiento de Cataluña con el resto de España», ha destacado.

No ha explicado, sin embargo, por qué no votó en contra alineándose con los diputados del PSOE. «Simplemente no les apoyé», se ha limitado a decir porque a su juicio «hay un antes y un después de la declaración de soberanía del Parlamento de Cataluña».

Chacón ha puesto su escaño a disposición del primer secretario del PSC, Pere Navarro, quien le ha instado a dejarlo por las razones de conciencia que ha esgrimido para no votar en el Congreso como el resto de los otros 13 diputados del PSC. La diputada ha negado sin embargo que vaya a dimitir. «Soy militante del PSC», ha subrayado antes de añadir que PSC y PSOE «deben seguir caminando juntos» como en los últimos 30 años.

Ha rechazado asimismo que detrás de su abstención esté su deseo de liderar en un futuro el PSOE. «Rotundamente, no» ha insistido Chacón. «Lo que estuvo ayer en mi decisión fueron mis convicciones y mi compromiso firme con el electorado y con esa Cataluña respetada en una España diversa por la que voy a seguir trabajando».

En cuanto a si creía que el partido debía adoptar sanciones por saltarse la disciplina de voto, se limitó a admitir que «las normas están para cumplirse».