El pequeño gran negocio del alquiler de material para bebés

En la era de la economía compartida y la sostenibilidad, una nueva tendencia está afianzándose entre los padres preocupados por el medio ambiente y su bolsillo: el alquiler de material para bebés. Cada vez más familias optan por alquilar en lugar de comprar estos artículos que, si bien son esenciales, a menudo tienen un uso demasiado limitado en el tiempo.

Según datos de CEACU (Confederación Española de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios), sólo durante el primer año de vida del bebé la media del gasto que han de afrontar los padres asciende a 8.254 euros repartidos entre alimentación, higiene, sanidad, ropa, juguetes, cuna, carrito de paseo, silla de coche, trona… Los últimos cuatro ítems de la lista son los que concentran la inversión económica más elevada, con una media de 2.900 euros.

Sorprendidos por esta cascada de gastos, Rodrigo Cardona e Ignacio Hidalgo –que se convirtieron en padres hace un año–, decidieron emprender y lanzar la plataforma de alquiler de material para bebés KidFlit (www.kidflit.com). «No sólo es el gran desembolso, que muchas personas no se pueden permitir, sino que además muchos de estos productos se usan tan sólo durante unos meses –explica Rodrigo Cardona–. Hoy en día las familias vivimos en pisos pequeños y no podemos almacenar todos estos productos, por lo que vimos en el alquiler la solución perfecta para los padres. Además, en el camino podemos poner nuestro granito de arena para reducir el desperdicio en esta industria».

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De momento, KidFlit está enfocada al alquiler de productos que suponen grandes desembolsos: carritos y sillas de paseo, minicunas, bañeras, sillas de coche, entre otros. Esta plataforma trabaja directamente con las principales firmas del sector y los productos que pone en alquiler proceden directamente de fábrica. «Esto nos permite entender muy bien el estado inicial y final después de cada uso para ponerlo de nuevo en un estado óptimo para que la siguiente familia lo reciba como nuevo –explica Cardona–. Al trabajar directamente con las marcas conocemos la vida útil que tiene cada uno de los productos, por lo que sólo los alquilamos durante el tiempo recomendado por las marcas. Esto es una práctica que muchas familias no conocen y almacenan años un producto infantil antes de pasarlo a su primo o amigo, pero muchos de ellos están fabricados con materiales que por el propio paso del tiempo se deterioran. Nuestra manera de trabajar hace que el producto siempre esté en perfecto estado. No obstante, para las personas que prefieren estrenar, también ofrecemos la posibilidad de alquilar los productos de primera mano».

Otro importante nicho de negocio es el del alquiler de productos de bebé enfocado a momentos muy puntuales, como los viajes. De hecho, suele ocurrir que el nacimiento de los niños limita el número de traslados de las familias tanto por una cuestión económica como por la complicada logística que supone desplazar todos los utensilios que un bebé necesita el día a día y durante sus primeros años de vida.

Una de las empresas más veteranas en este ámbito es Back Pack Baby (www.backpackbaby.com), con sede en Barcelona. «Como madre de tres niños, cualquier pequeño viaje suponía un esfuerzo logístico enorme... y de ahí surgió la idea de crear un negocio donde se pudiera alquilar todo lo necesario para los peques de la casa, tanto para familias que vienen a Barcelona como para las que ya viven aquí y tienen una necesidad puntual», explica su fundadora, Laura Iglesias. En estos diez años, Iglesias explica que la demanda ha ido creciendo exponencialmente en el tiempo, y sobre todo en el ámbito de la clientela nacional, «ya que cuando empezamos apenas teníamos clientes españoles, la mayoría eran turistas de visita en la ciudad».

La experiencia y eficiencia de Back Pack Baby ha llevado a esta empresa a ser la única proveedora oficial de este tipo de servicio para Barcelona Turisme, la entidad oficial de promoción y dinamización de la oferta turística, cultural y comercial de Barcelona y su entorno. En la plataforma se puede encontrar desde lo más esencial cuando se viaja con peques –cochecitos, sillas de coche, cunas de viaje, tronas– hasta artículos de menor relevancia a priori pero muy demandados también: packs de juguetes, bañeras, calientabiberones, artículos de playa... «Tenemos también, por si las familias lo requieren, un servicio de venta de artículos de primera necesidad como pañales, leche o alimentación infantil –explica Laura Iglesias–. Al inicio elaboramos un inventario general basándonos en nuestra propia experiencia como padres, pero este ha ido aumentando y modificándose en el tiempo, y hemos añadido artículos o servicios según la demanda de las familias».

La higiene y la seguridad son dos grandes capítulos en este tipo de negocio. «Es absolutamente fundamental –dice Laura Iglesias–. En nuestro caso, todos los productos cumplen con la normativa europea de seguridad y están debidamente homologados, además de contar con un seguro de responsabilidad civil. Asimismo, todo nuestro inventario se limpia y se higieniza después de cada uso con productos adecuados según cada material, hipoalergénicos y libres de sustancias químicas».

Desde KidFlit explican que, por ejemplo, respecto a las sillas de coche piden a sus clientes que reporten cualquier mínimo incidente que hayan sufrido: «Inmediatamente cambiaremos la silla y trabajaremos con el fabricante para que nos confirme si esa silla puede seguir en uso o si hay que sacarla de circulación. A la más mínima duda, la quitamos de nuestro catálogo. Somos padres y no vamos a ofrecer ningún producto que no usaríamos para nuestras hijas».

Si la experiencia de cliente es importante en cualquier servicio, en esta materia lo es más aún. Evidentemente, los padres quieren lo mejor para sus hijos y las exigencias son elevadas. «Es un ámbito en el que las necesidades son muy cambiantes –indica Rodrigo Cardona–. Eso nos exige ser muy flexibles. Por ejemplo, ofrecemos la opción de cambiar de producto en cualquier momento del alquiler: si tenías una silla de paseo, pero vas a tener otro bebé y lo que realmente te viene bien es una silla doble, no hay problema, te la cambiamos sin ningún tipo de penalización».

A la exigencia de los padres, se une –en el caso de Back Pack Baby–, las expectativas depositadas en un periodo vacacional donde todo el proceso ha de fluir perfectamente. «Eso se traduce en asegurarnos de que nuestros productos cumplen al 100% las necesidades de los clientes, fluidez en las entregas y en las devoluciones (en nuestra oficina, en el hotel, en el aeropuerto justo antes de la salida de los vuelos….). Nuestro whatssapp está operativo 24/24 para cualquier duda o necesidad. Viajar con niños implica muchas veces necesidades o cambios de última hora, y asumir esos cambios forma parte de nuestro trabajo», subraya Laura Iglesias.