China amenaza a España en su guerra comercial con la Unión Europea
El régimen anuncia una investigación a los productos de cerdo en respuesta a los aranceles a los vehículos eléctricos
Luis Planas: «China se toma muy en serio reequilibrar la relación comercial con España»
![Una piara de cerdos en Badajoz](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/economia/2024/06/17/cerdos-angel-RaAxJWwOPihv9VJwJapQSiP-1200x840@diario_abc.jpg)
Una guerra comercial está a punto de estallar entre la Unión Europea y China, y el primer golpe se lo va a llevar España. El gigante asiático ha anunciado este lunes la apertura de una investigación a los productos de porcino procedentes de la ... UE. Este movimiento representa una respuesta a los aranceles impuestos por las instituciones comunitarias la semana pasada a los vehículos eléctricos chinos, a causa de una política estatal de subsidios caracterizada como competencia desleal.
En 2023 China importó cerdo y derivados por valor de unos 5.600 millones de euros, la mitad procedentes de la UE, a su vez la mitad procedentes de España, de largo el principal damnificado. España, de hecho, es el primer proveedor de China a nivel global, muy por delante del segundo y el tercero, Brasil y Estados Unidos. La investigación afecta también, aunque en menor medida, a Países Bajos y Dinamarca.
El ministerio de Comercio chino ha asegurado actuar en respuesta a reclamaciones presentadas por la industria local. Las pesquisas, circunscritas de 2020 a 2023, han comenzado hoy y cuentan con un plazo de un año más una posible extensión de seis meses adicionales, perspectiva temporal que deja espacio al curso de los acontecimientos políticos.
Fuentes gubernamentales españolas han expresado a ABC su voluntad de proceder con cautela y han enfatizado que no se trata de una desavenencia bilateral. «Quiero subrayar que se trata de una apertura, en principio con una duración máxima de un año, no de la adopción de medidas con carácter inmediato», ha apuntado hoy el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas. «Mi comentario es muy sencillo. Las guerras comerciales no son buenas para nadie, especialmente en relación con productos agroalimentarios. Por tanto, espero y de deseo que haya un margen para el entendimiento y la negociación».
Impacto colosal
La amenaza pronunciada hoy supone una marcada diferencia con respecto al tono constructivo y optimista que caracterizó la visita a China del ministro hace apenas dos semanas. Entonces, Planas trasmitió que las autoridades chinas «se tomaban muy en serio reequilibrar la relación comercial con algunos países», entre ellos España, mediante la posible apertura de nuevos mercados.
El régimen, por contra, ha puesto hoy en entredicho un sector que acapara 1.200 millones de euros de los 1.900 que España vende a China, es decir, casi un 65% del total. Un colosal impacto que, según ha podido saber ABC, en ningún momento fue siquiera mencionado como posibilidad.
China, por tanto, defiende a sus vehículos eléctricos atacando, de entre todos los productos posibles, al cerdo, decisión que afecta de manera desmesurada a uno de los grandes países europeos más acomodaticios con sus postulados. «España es considerado como un país hostil en el tema de los aranceles, estamos a favor de la decisión de la Comisión Europea, como Francia y a diferencia de Alemania o Suecia. Para ellos [China] eso es ser hostiles», explica Alicia García-Herrero, economista jefe para Asia de Natixis.
«Lo que quieren es que España vote en contra en el Consejo Europeo donde se ratifican los aranceles. Pero lo que me sorprende es que nos sorprendamos. En vez de extraer la lección de atemorizarnos, podríamos extraer la lección de que con ellos no se puede hacer nada; esto va contra la Organización Mundial del Comercio y todas las prácticas comerciales», critica. El golpe, en cualquier caso, todavía está por llegar; también el escarmiento.
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