Alemania inicia la desconexión total de su 5G de China y abraza a Japón
En otra vuelta de tuerca a la tensión con Pekín, el país germano cierra la puerta de su red a ZTE y Huawei para proteger sus «sistemas nerviosos centrales»
El 6G da el pistoletazo de salida a la próxima carrera geopolítica
Una imagen del logo de ZTE, una de las firmas afectadas por el veto alemán, en un edificio en Shanghai
Cinco años después del lanzamiento de la primera red alemana de telefonía móvil 5G, la cobertura doméstica es casi completa y «se debería llegar a toda la población con 5G a finales de 2025», según el jefe de tecnología de O2 Telefónica, Mallik Rao. La ... red central 5G estará completa a finales de 2026 y la red de transporte y acceso a finales de 2029, prevé la ministra federal del Interior, Nancy Faeser. Si para esta fase expansiva ha sido un recurso rápido y barato la tecnología servida por la china Huawei, Alemania revertirá a partir de ahora esa asociación estratégica. Faeser ha ordenado la eliminación gradual de los componentes fabricados por las empresas chinas Huawei y ZTE de su red inalámbrica 5G en los próximos cinco años y operadores como Vodafone, Deutsche Telekom y Telefónica están de acuerdo en retirar los componentes de sus 'redes centrales' 5G, conectadas a internet y que funcionan como centros de control, antes de finales de 2026.
Para finales de 2029, estos componentes también habrán sido eliminados de las «redes de acceso y transporte», que incluyen las partes físicas de la red 5G, como las líneas de transmisión y las torres, para «proteger los sistemas nerviosos centrales de Alemania como un lugar de negocios y la comunicación de los ciudadanos, las empresas y el Estado». Según la ministra, «debemos reducir los riesgos de seguridad y, a diferencia del pasado, evitar dependencias unilaterales». Faeser tiene la vista puesta en la nueva fase tecnológica, 6G, que espera que llegue al país 2029 o 2030. Y para entonces el principal proveedor será Japón, el país que más está invirtiendo ahora en su desarrollo, tanto para la nueva red como para la existente 5G, que permanecerá activa durante mucho tiempo.
Trabajo online, servicios de streaming de películas y música, conducción autónoma, repartidores automatizados, quirófanos en remoto, aplicaciones de metaverso... el volumen y la velocidad de datos que requieren estos avances son superiores a los que la infraestructura de telecomunicaciones 5G puede proporcionar. La empresa de investigación de mercado Deloitte Tohmatsu MIC Research Institute estima las inversiones en infraestructura de los cuatro proveedores de telecomunicaciones japoneses NTT, KDDI, Softbank y Rakuten en el periodo comprendido entre los años fiscales 2022 y 2026 en aproximadamente 24.000 millones de dólares, inmersas ya en el desarrollo de la sexta generación, que se generalizará en la década de 2030 y multiplicará por diez la capacidad. NTT, el mayor proveedor de telecomunicaciones de Japón, quiere equipar el recinto ferial con una red 6G y presentar proyectos de demostración en la Exposición Universal 2025, en Osaka, basados en la innovadora red óptica e inalámbrica (IOWN).
Japón y la UE ya firmaron una asociación digital en mayo de 2022, cuyo objetivo es promover el desarrollo de 5G y tecnologías más avanzadas. La cooperación que Japón acordó con EE.UU. a principios de 2022 apunta en la misma dirección, para avanzar conjuntamente en los estándares «más allá del 5G». Con estos acuerdos, tanto EE.UU. como la UE intentan evitar que un único país domine el estándar, como hizo China en el caso de 5G.
El estándar de telecomunicaciones se basará en esta ocasión en la arquitectura Open RAN (Radio Access Network), centrada en la interoperabilidad de diversos equipos de red y soluciones de software, de manera que se impedirá la dependencia de unos pocos proveedores y se favorecerá una competencia leal. Esto abre la oportunidad para que los proveedores de la industria japonesa y europea posicionen nuevos productos. El comunicado emitido por el gobierno alemán subraya la importancia de «unas infraestructuras de telecomunicaciones seguras y resistentes», dados los «peligros de sabotaje y espionaje». «Para evitar vulnerabilidades y dependencias críticas, hay que confiar, por tanto, en fabricantes de confianza», añade.
Estrategias definidas
Ya existen colaboraciones concretas entre Japón y Europa. El proveedor alemán de telefonía móvil 1&1 Drillisch trabaja desde 2021 con el proveedor de equipos japonés Rakuten, unión con la que se ha modernizado la infraestructura de 1&1 Drillisch basada en la tecnología Open RAN. Nokia abrió un Centro de Tecnología Avanzada en Tokio en 2022 y los finlandeses quieren impulsar el desarrollo de aplicaciones 5G y 6G con socios como NTT. Sony, por su parte, apunta sobre todo al negocio de clientes privados. La empresa ya dispone de una licencia para una red 5G privada: la NURO 5G, para transmitir sus películas, música y juegos a través de redes rápidas. También trabaja con Honda desde 2022 y se está convirtiendo en un proveedor de vehículos eléctricos. Por lo tanto, la rápida expansión del 6G es clve para esta firma. La GSMCA, la asociación internacional de operadores de redes móviles, ve 2025 como el punto de inflexión: los operadores de redes de la región de Asia y el Pacífico invertirán alrededor de 227.000 millones de dólares en la expansión de red entre 2022 y 2025.