«Las plantas españolas han conseguido la asignación de once nuevos modelos gracias a su productividad y eficiencia»
El presidente de Mercedes Benz-España, José Luis López-Schümmer, pide al Gobierno «un plan similar al 2000E» en el que tengan cabida turismos y vehículos industriales
Hace dos años que José Luis López-Schümmer accedió a la presidencia de Mercedes-Benz España. Un periodo en el que el sector ha reflejado con precisión los efectos de unas turbulencias económicas que se han cebado con España y que parecen haber hecho del automóvil un objeto de lujo. Sin embargo, si algo ha demostrado esta crisis, es que el verdadero lujo, el lujo al alcance de unos pocos, el lujo por antonomasia, se mantiene indemne, caiga lo que caiga. Daimler, la empresa matriz afincada en Alemania, presentó el pasado ejercicio resultados récord, con un beneficio neto de más de 6.000 millones de euros. Y la evolución de las ventas de Mercedes dan lugar a llamativas paradojas dentro de un mercado laboral español atrapado en la monotonía del desempleo y la destrucción de empresas: la planta de Vitoria, nos dice López-Schümmer, cuenta con su futuro garantizado hasta 2024.
¿Qué representa el mercado español para Mercedes?
Mercedes-Benz España tiene gran importancia dentro del grupo Daimler no solo desde un punto de vista comercial, sino también industrial, al tratarse de la única filial europea del grupo que alberga centros industriales Mercedes-Benz fuera de Alemania.
En el ámbito comercial, España se encuentra entre los cinco principales países europeos tanto en venta de turismos, furgonetas como camiones. En el plano industrial, el grupo Daimler en España tiene dos centros de producción: uno en Sámano (Cantabria), dedicado a la fabricación de autobuses, y una segunda fábrica en Vitoria para la producción de furgonetas.
¿Es un mal momento el actual, dada la grave crisis, para vender modelos de coche lujo?
Mercedes-Benz se considera en la actualidad una marca «premium». Y, al igual que el resto del mercado, el comportamiento de las ventas se ha visto afectado. Mercedes-Benz no ha sido ajena a la crisis, aunque sus ventas se han resentido en algunos modelos más que en otros. En estos últimos años la demanda se ha ido desplazando hacia modelos con motorizaciones más eficientes. Conscientes de ello, hemos ido adaptando la oferta a esta nuevas tendencias.
Es previsible que el mercado español cierre el presente ejercicio en 800.000 unidades. ¿Considera este nivel sostenible?
Si la Administración no lleva a cabo una reforma estructural para impulsar el consumo privado, todo hace presagiar que las matriculaciones de turismos no superarán en 2012 los niveles próximos a los alcanzados en 1993, las 800.000 unidades. Si esta situación perdurara un par de años más, la industria española de automoción sufriría un duro revés que previsiblemente obligaría a cerrar centros industriales y gran parte de las concesiones existentes en la actualidad.
Pero esta situación no se corresponde a un país con una población y niveles de «renta per capita» como el español. España debería situarse en un entorno de 1.200.000 matriculaciones, por lo que existen motivos estructurales suficientes para un aumento de las ventas a medio plazo. Existen también otros motivos que nos hacen augurar que la demanda evolucionará de forma positiva. La seguridad y el medio ambiente son los grandes aliados: el cada vez mayor respeto hacia el medio ambiente y el instinto primario por la seguridad ayudarán a reactivar la demanda.
Y los datos relativos al medio ambiente son aún más elocuentes: 100 vehículos actuales contaminan menos que 1 vehículo de los años 70, los filtros de partículas han reducido las emisiones de partículas un 99% en los vehículos diésel, un vehículos actual consume de media un 25% menos que uno del año 1995 y emite un 20% menos de dióxido de carbono por kilómetro.
¿Qué reformas cree que son necesarias para mejorar la situación del sector en España? ¿Ayudas directas a la compra, como el Plan 2000E?
Sería necesario acometer cambios y reformas que permitieran consolidar a medio plazo un mercado de turismos de entre 1,2 y 1,3 millones. Para ello, es clave que éstas vayan encaminadas a adelantar la renovación del parque, consiguiendo que los vehículos tengan una vida media de entre 7 y 8 años en línea con el resto de países europeos.
Tras la experiencia en la aplicación del Plan 2000E con el que se obtuvo un claro efecto dinamizador de la renovación del parque en circulación y de la demanda, no cabe ninguna duda que este tipo de medidas son las de mayor efectividad para conseguir un impacto importante e inmediato. Es por ello, q ue debería plantearse la aplicación de un plan de incentivos similar al del Plan 2000E en el cual debería tener cabida no solo los turismos, sino también los vehículos industriales .
Otras reformas que ayudarían a reactivar el mercado se podrían encontrar por ejemplo en la eliminación o reducción del impuesto de matriculación, en crear una política de incentivos a la compra de vehículos con sistemas eléctricos de propulsión (híbridos o híbridos enchufables, por ejemplo), en adecuar el impuesto de circulación con las normativas Euro y emisiones de dióxido de carbono por kilómetro o incluso endurecer las sanciones a los conductores por no cumplir su vehículo con la inspección técnica (ITV).
¿Cómo le suena el mensaje del nuevo Gobierno y, en concreto, del ministro que le atañe, José Manuel Soria?
Desde su llegada al ministerio las distintas asociaciones vinculadas al sector han hecho especial énfasis en transmitir al señor Soria la importancia de la automoción dentro del entramado industrial español. La industria del automóvil es el principal sector industrial del país y actúa de locomotora para otros sectores. El sector fabricante de vehículos, es en cualquier caso, un sector de gran relevancia para la economía española: aporta el 6% del PIB, genera cerca del 25% de las exportaciones del país y da empleo al 10% de la población activa.
Todo hace suponer que el mensaje ha llegado correctamente, tal y como ha quedado patente en diferentes intervenciones públicas del señor Soria. Confiamos plenamente en que se actúe desde el Ministerio de Industria consecuentemente y se dé mayor importancia al sector del automóvil dentro del marco de las políticas estructurales e industriales que la Administración planea reformar.
A pesar de la crisis económica por la que está atravesando el país los fabricantes españoles han conseguido en los dos últimos años la asignación de once nuevos modelos en sus plantas. Esto ha sido posible gracias al buen posicionamiento de la industria en cuanto a productividad y eficiencia, no solo de los propios centros industriales, sino también de industria auxiliar ubicada en España . Es por ello que cualquier medida estructural, que se adopte por parte de la Administración, garantice la competitividad del sector y así la importancia del mismo a nivel nacional e internacional.
¿Prevén incrementar sus inversiones o el lanzamiento de algún nuevo modelo de producción española?
En octubre del ejercicio pasado Mercedes-Benz confirmó a la planta de Vitoria de manera oficial la adjudicación del nuevo vehículo sucesor de los actuales Vito y Viano a Mercedes-Benz España. El Grupo Daimler invertirá en este proyecto 1.000 millones de euros. Esta inyección de dinero vendrá acompañada de la creación de 300 nuevos puestos de trabajo en Vitoria tanto en cuanto los volúmenes de producción se consoliden por encima de las 100.000 unidades anuales durante 2 años. Mercedes-Benz en Vitoria tiene su futuro asegurado hasta el año 2024 y seguirá siendo el motor de la economía vasca y alavesa.
¿Creen que la adaptación de Mercedes al mercado y la industria española ya es plena? ¿Cuáles han sido las principales dificultades y retos, en este sentido?
La llegada de un ejecutivo español a la cúpula directiva de la filial española de Mercedes-Benz fue, sin lugar a dudas, un revulsivo para la empresa. Los conocimientos socioculturales, empresariales e industriales que un nativo tiene de su propio país permiten que la interpretación de acciones internacionales sea más fácil de adaptarse a la idiosincrasia local. En otras palabras, desde entonces nos regimos por el lema «think global, act local» (piensa de forma global, pero actúa de forma local). Y el resultado está a la vista: Mercedes-Benz España es la filial europea con mayor facturación y empleados del grupo y la única con un presidente local.
No ha sido un camino fácil, y no lo será tampoco en el futuro; aunque las diferencias culturales entre España y Alemania existen, tanto mi antecesor como yo, tuvimos experiencias laborales fuera de España que nos han permitido tener una visión más internacional de la gestión de una multinacional como Mercedes-Benz.
Fuera de España parece existir una cierta recuperación, sobre todo en los países emergentes. ¿Cómo se están comportando el resto de mercados?
Hace unas pocas semanas Daimler AG, empresa a la que pertenecen las marcas Mercedes-Benz y Smart, dio a conocer sus los resultados. A pesar de las enormes turbulencias vividas en gran parte de las economías mundiales, en especial en los países del sur de Europa, Daimler presentó al cierre del ejercicio una facturación y un volumen de ventas con máximos históricos , lo que permitió alcanzar nuevamente un beneficio neto positivo de más de 6.000 millones de euros. El buen comportamiento de las economías de países emergentes como China y Brasil, ha permitido reforzar la presencia de la marca en dichos mercados y beneficiarse de su evolución positiva.
Mientras que EE.UU. y Japón mantienen una ligera senda de crecimiento, los mercados europeos muestran síntomas de estabilidad, lo que hace presagiar que no mostrarán cambios relevantes a corto y medio plazo .
¿ Cuáles son su objetivos para los próximos ejercicios ?
Mercedes-Benz se ha marcado como objetivo alcanzar en 2020 el liderazgo en ventas dentro del segmento «premium». Para ello tiene previsto lanzar hasta 2015 nueve modelos nuevos, de los cuales cinco entran en nuevos nichos de mercado. Con la llegada de estos modelos, Mercedes-Benz reforzará su senda de crecimiento gracias a la incorporación de nuevos clientes.
¿Qué futuro augura, a corto plazo, al coche eléctrico?
Existen a fecha de hoy incontables dificultades estructurales para su implantación, pero los vehículos eléctricos son ya técnicamente viables. Y van a suponer grandes cambios de hábitos de la sociedad. En la actualidad, y si nos ceñimos a los vehículos 100% eléctricos, la gran diferencia entre estos y sus homólogos a combustible, radica en su autonomía, y no en la potencia, ni volumen de carga ni confort: los primeros, a fecha de hoy, no ofrecen autonomías superiores a los 130 kilómetros. Y esto implica, evidentemente nuevos hábitos en la conducción y de organización de trabajo, aunque siempre adecuándolo al entorno urbano.
Pero el futuro está en la propulsión eléctrica mediante el uso de hidrógeno como combustible para generar electricidad. Con el empleo de hidrógeno obtenido de forma ecológica para impulsar vehículos de pila de combustible se hace realidad la visión del vehículo de cero emisiones, con una autonomía en torno a los 400 kilómetros y tiempos de repostaje de apenas un unos minutos.
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