Hazte premium Hazte premium

Las comunidades energéticas avanzan a tientas en la maraña legislativa

Un galimatías reglamentario frena el despegue de un modelo que pretende convertir al consumidor en un protagonista activo del mercado

El Grupo Enercoop ha instalado las primera placas solares sobre una marquesina para suministrar a una pedanía de Crevillente, que quiere convertirse en una comunidad energética municipal
María José Pérez-Barco

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Todavía son como un cuadro sin pintar. Aunque los primeros esbozos han llegado desde la Unión Europea y el Gobierno de España ha dado alguna pincelada. Lo suficiente para que comiencen a dibujarse las primeras comunidades energéticas en nuestro país. Empiezan a aparecer en municipios, ... pueblos, polígonos industriales, en barrios residenciales, en comunidades de vecinos... Aún son pocas y la mayoría se encuentran en fase piloto, pero están sembrando el germen de lo que será un nuevo actor en el sector energético que desempeñará un importante papel para lograr la transición a una economía descarbonizada. A través de las comunidades energéticas el ciudadano dejará de ser un consumidor pasivo que enciende un interruptor y paga su factura a ser un participante activo en este mercado. Eso significa que podrá producir, consumir, gestionar, almacenar y vender la energía que genere.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación