Un mes del caso Kike Salas: el central del Sevilla continúa su carrera a la espera de la investigación
Pimienta lo situó de central contra el Barcelona tras unas últimas actuaciones como lateral y en esta segunda vuelta debe ser un hombre importante

El Sevilla anda tan justo de efectivos que García Pimienta deberá recomponer su once inicial y convocatoria antes de viajar a Valladolid para disputar uno de esos encuentros donde necesitará la mejor versión de sus hombres, sobre todo de aquellos con marcado ... acento titular. No son tres puntos cualquiera. Olisquear una posible tragedia llena de nauseas un vestuario que se había olvidado por unos meses de sufrir. No es la primera vez en la temporada que debe recurrir al escaso fondo de plantilla o a jugadores que habitualmente entrenan con el filial. La última vez, contra el Celta en la despedida de Jesús Navas del Sánchez-Pizjuán, esos hombres dieron el nivel necesario para sumar la última victoria como local hasta la fecha. Jóvenes criados en la Carretera de Utrera, algunos ya con ficha del primer equipo, que deben seguir dando pasos adelante por el bien de su equipo. Entre ellos se encuentra Kike Salas. Justamente hoy hace un mes de que saltara a la luz pública su caso por presunto delito de estafa en apuestas deportivas. Se sigue investigando el caso, mientras el jugador se centra en su día a día con el Sevilla.
No lo ha pasado bien en este tiempo, aunque en el vestuario sevillista no han notado nada distinto en el defensor de Morón. Todo lo contrario. Sigue como si nada hubiese pasado. Entrena igual y no hace menciones, comentarios o referencias a lo que le ha sucedido, que comenzó con una fuerte presencia policial en la Ciudad deportiva para llevarse a Kike a su pueblo para prestar declaración en un juzgado. Se acogió a su derecho a no declarar mientras la investigación sigue su curso, dejando su móvil en las dependencias policiales para que se investigase si existe alguna comunicación entre el futbolista del Sevilla y los otros dos investigados, cercanos al jugador, que pudiese relacionar a las partes en esa ganancia de 6.000 euros en las que estaba directamente relacionado Kike Salas, puesto que eran apuestas a cartulinas amarillas que él mismo veía. Liga y RFEF están a la espera de ver cómo se resuelve el caso y si deben imponerle al jugador del Sevilla una sanción deportiva, que iría de los dos a los cinco años sin jugar sus competiciones.
Mientras ese espinoso asunto se resuelve en el Sevilla, con los abogados del club asesorando al profesional, la competición no se detiene y Kike Salas debe seguir entrenando y compitiendo para la entidad que le paga su salario, mayor desde su ampliación de contrato reciente. De hecho, fue uno de los primeros nombres que se movió en el mercado del conjunto de Nervión, con la Lazio preguntando por su situación. Sin embargo, la aparición de su caso evaporó cualquier interés. Ningún club comprador invertiría por un deportista que puede ser sancionado sin competir. Descartada esa posibilidad, en el Sevilla sabían que sólo con el paso de las semanas el propio Kike recobraría la calma y podría competir sin nada más en la cabeza que el Sevilla.
Ha llegado su momento. Tras una temporada donde no ha conseguido convencer a Pimienta de que debe actuar como central izquierdo titular, prefiriendo el técnico primero a Nianzou y últimamente a Nemanja Gudelj, las ausencias tanto en el centro de la defensa como en el centro del campo le abrieron las puertas de la titularidad como defensor central. No actuaba de inicio en esa demarcación desde inicios de diciembre contra Osasuna y fue de los mejores en la zaga nervionense, con la complicación que tiene siempre proteger tu portería contra la banda de Lamine Yamal. Cierto que saldría en la foto del segundo gol, pero estuvo siempre atento a los cortes de balón filtrados a sus espaldas, como bien en la salida buscando balones diagonales hacia Lukebakio. Se ve que ha estado ensayando en los entrenamientos. Su porcentaje de acierto fue alto.
Su momento lateral
Por los problemas que suelen aparecerle a Pedrosa en el pubis, además de que Valentín Barco había dejado de contar para Pimienta meses atrás, el canterano del Sevilla se ha tenido que amoldar a la petición de su técnico de moverse como lateral. De hecho, ese recurso lo sigue utilizando aunque no sea de inicio. Kike Salas, pese a la falta de velocidad punta, sin estar tampoco familiarizado con esa posición en fase ofensiva, no ha puesto un pero y se ha fajado en la tarea de evolucionar. Ha ofrecido pases de gol y soluciones a sus compañeros, colocándose como tercer defensor cuando así lo exigía el guion. Ha desempañado un rol que no es el suyo. Y todavía deberá seguir desempeñándolo.
La falta de un fichaje para el lateral izquierdo ha provocado una de las grandes discusiones dentro del Sevilla esta temporada. García Pimienta ha levantado la voz, provocando un tremendo enfado por parte de los que toman las decisiones. Esa polivalencia de Kike Salas ha servido como excusa para no acudir al mercado. Ahora se central titular y lateral los días necesarios. La ausencia de Badé en Valladolid provocarán que se deba juntar en principio con Gudelj, a quien también se le necesita en el centro del campo. El entrenador se queda casi sin opciones. Kike Salas ha dado un paso al frente. En su momento más complicado en lo personal, el Sevilla depende de este canterano en los profesional.
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