McGregor deja entrever un nuevo retiro para enfocarse en la política: «Mi corazón sangra por mi país ahora mismo...»
La estrella irlandesa de las artes marciales mixtas, que tiene todavía dos peleas de contrato con la UFC, lleva sin pelear desde julio de 2021
Conor McGregor, de fontanero a campeón mundial y candidato a las elecciones de Irlanda
Hubo un tiempo en el que un luchador de artes marciales mixtas (MMA) cambió la percepción del deporte, trascendiendo barreras antes no imaginadas y convirtiéndose en el atleta mejor pagado del mundo gracias a sus habilidades noqueadoras dentro del octágono más famoso del planeta. Hablamos, obviamente, del irlandés Conor McGregor, el hombre que, con una personalidad controvertida y carismática, logró poner la UFC en cotas máximas de popularidad internacional.
El de Dublín, llegó, incluso, a conquistar dos títulos mundiales en dos diferentes categorías de peso, en el pluma y en el ligero, siendo uno de los peleadores favoritos para muchos aficionados a esta disciplina, y permitiendo que muchos otros se acercaran a las MMA debido a la tremenda expectación que levantaba. Pero sus mejores tiempos ya pasaron y, de hecho, han quedado muy lejos. Tanto que McGregor lleva casi cuatro años sin pelear, y podría llegar a darse el caso de que jamás lo vuelva a hacer, al menos en MMA, pese a que todavía tiene un contrato firmado con la UFC.
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Su intención de postularse como candidato a dirigir Irlanda, ha terminado de dejar claro que, ahora mismo, The Notorious (apodo de batalla) tiene otros planes lejos del octágono. «Tengo dos peleas en el contrato... Mi corazón sangra por mi país ahora mismo... Estoy feliz con lo que he hecho. Mi regreso será considerado el mejor de todos los tiempos, así que tiene que ser el indicado. Y ahora mismo pienso en Irlanda», ha expresado McGregor en la rueda de prensa de Bare Knuckle FC, la compañía de boxeo sin guantes de la que es copropietario.
Unas palabras que, si bien dejan una puerta abierta a su regreso, para cumplir con el contrato que le ata a la mayor liga de MMA del mundo, también empujan a pensar que la motivación por competir al máximo nivel hace tiempo que desapareció para el irlandés. Bien es cierto que estuvo muy cerca de volver a pelear en verano de año pasado ante Michael Chandler, pero una lesión en su pie le dejó fuera de juego. La rotura del dedo meñique tuvo la culpa. Y los aficionados quedaron muy decepcionados por perderse el regreso más esperado.
Ahora, muchos seguidores de la UFC ya empiezan a pensar que será «prácticamente imposible» volver a ver a McGregor en un alto nivel competitivo. Sus fiestas interminables, sus líos judiciales, su vida repleta de excesos, le han alejado de su mejor estado de forma y, en los próximos tiempos, veremos si de manera definitiva.
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