Abanderados con todo un país detrás

«Cuando cojas la bandera, mira hacia atrás. Detrás de ti van más de 300 deportistas que han sido elegidos como los mejores de entre 46 millones de personas», le ha aconsejado Saúl Craviotto, abanderado de España en los Juegos de Tokio, a Marcus Cooper, que esta tarde noche encabezará junto a Támara Echegoyen la delegación española en el desfile de barcos por el Sena de la ceremonia inaugural. Ser abanderado es una responsabilidad y a la vez un momento único, ya que supone en casi todos los países el reconocimiento a la trayectoria de esos deportistas encargados de liderar las delegaciones.

En París, la nómina de abanderados y abanderadas de los 205 países presentes supone una larga lista de medallas de oro, grandes resultados deportivos y muchos nombres mundialmente conocidos en sus respectivos deportes. En el caso de España, Cooper y Echegoyen saben lo que es subir a lo más alto del podio olímpico y suceden a Craviotto, que también está en París, y a Mireia Belmonte, que no logró su clasificación. Junto a ellos, referentes del deporte que van desde Giannis Antetokounmpo, estrella de la NBA y que será el referente de Grecia al nadador Florent Manadou (oro en Londres'12) y la atleta Mélina Robert-Michon (plata en Río'16), que cerrarán el desfile como abanderados de Francia, el país organizador.

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Junto a ellos, una de las delegaciones que más aplausos arrancará a su paso desde las orillas del Sena y desde Trocadero será el equipo de refugiados. La boxeadora camerunesa Cindy Ngamba y el taekwondista sirio Yahya Al-Ghotany serán los encargados de recordar a los presentes que representan a poblaciones que han sido desplazadas de sus países de origen y que a pesar de todas las dificultades, estarán presentes en los Juegos de París.

Estados Unidos, con 653 participantes, será el equipo con mayor representación, por delante de Francia con 622 deportistas presentes, mientras Japón, con un total de 447, completa el podio. Como 'jefes' de la expedición más numerosa, el comité olímpico estadounidense ha nombrado a toda una estrella de la NBA como LeBron James. El veterano jugador de los Lakers, oro en los Juegos de 2008 y 2012, será el primer jugador americano de la NBA es ser abanderado. Junto a él estará Coco Gauff, tenista que es la ganadora del Abierto de Estados Unidos y segunda en el ranking WTA. Por parte japonesa, la delegación ha conferido ese honor al especialista de break-dance Shigeyuki Nakarai y a la esgrimista Misaki Emura, dos veces campeona del mundo.

En cuanto a deportes representados en este desfile, el atletismo marca diferencias. De hecho, desde Albania, con Luiza Gega, doble campeona de Europa de los 3000 metros obstáculos, hasta Sudáfrica con el velocista Akani Simbine, la lista de países con un atleta portando la bandera es notable. Entre los más destacados es el caso de Italia, que cuenta con Gianmarco Tamberi al frente, después de ganar el oro en salto de altura en los Juegos de Tokio, o Polonia, que cuenta con toda una leyenda del atletismo como es la lanzadora de martillo Anita Włodarczyk, tres veces ganadora del oro (2012, 2016 y 2020) y que en caso de ganar en París entraría en el selecto grupo de cuatro títulos consecutivos formado por seis deportistas en toda la historia.

Hay además casos llamativos como el de Kosovo, que ha elegido como abanderados a dos hermanos judocas. Nora Gjakova afronta sus terceros Juegos y es toda una referencia en su disciplina, ya que fue campeona en Tokio en 57 kilos, mientras su hermano Akil Gjakova fue campeón de Europa en 2021. O el caso de Brasil, marcado por la emotividad de sus referentes en el desfile de esta tarde. Raquel Kochhann es una jugadora de rugby seven que ha disputado dos Juegos Olímpicos y que afronta sus terceros tras haber superado un cáncer de mama detectado en 2022 mientras se recuperaba de una grave lesión de rodilla. Un ejemplo de superación que el comité brasileño ha querido premiar con este reconocimiento en el desfile de hoy.