Rafael Louzán: «Conmigo jamás volverá esa actuación sectaria del 'conmigo o contra mí'»

-¿Por qué decidió presentar su candidatura a estas elecciones en lugar de esperar al 5 de febrero y ocupar la presidencia sin añadir otra sombra de sospecha a una federación con un grave daño reputacional?

-Pedro Rocha iba a ser, con toda seguridad, el candidato de la inmensa mayoría de las federaciones territoriales. En el poco tiempo que ha estado ha logrado muchas cosas, pero sobre todo la paz y la armonía en el fútbol español. Un mes antes de que se supiese que Rocha no podría presentarse, él me llamó y me dijo que debía ser yo el que liderase el equipo. Coincide en el tiempo que, cuando se toma esa decisión, el Tribunal Supremo decidió admitir el recurso de casación que yo presenté hace algo más de dos años: una cuestión que los juristas saben que no es nada fácil, pues se admiten entre un 7 y un 10 % de ellos. Creo en mi inocencia, creo que se trata de una cuestión de interpretación de un proceso de contratación de unas obras que la primera jueza entiende se hizo por un proceso no adecuado de contratación, a pesar de que la Ley de Contratos lo permitía.

-¿No teme poner en riesgo a la propia Federación?

-Yo tengo mucha fe en la justicia y, por lo tanto, dije: ¿por qué no? Aquí habitualmente nos rasgamos mucho las vestiduras; Estados Unidos acaba de elegir a un señor que ha sido condenado por violación y, sin embargo, ha sido y es el presidente. Por eso digo que a veces aquí nos ponemos en un extremo. Nuestro ordenamiento jurídico establece que si no hay una sentencia firme, tengo legitimidad. Es lo que me trasladaron la inmensa mayoría de los presidentes territoriales y de los que me han avalado. Todos son conscientes de la situación; por tanto, tengo una doble responsabilidad: los avales, y encima que me los hayan dado en estas circunstancias.

-Tiene usted incluso el apoyo de Miguel Galán, que tras, anunciar la impugnación de su candidatura, se ha retraído.

-Hemos hablado varias horas, al igual que con otros colectivos. Yo le he entendido, y él a mí también. Entre todos podemos hacer que algunas cosas que han de cambiar cambien. Ha creído en mí, y yo se lo agradezco. Podemos dialogar con todo el mundo que quiere el bien del fútbol.

-El secretario de Estado, José Manuel Rodríguez Uribes, dejó claro la semana pasada en este periódico que no le quiere de presidente.

-Ha hablado bastante, sí… Él tiene su pensamiento, y yo lo respeto. Pero debería ser consecuente con su papel en este momento, que debería ser de neutralidad. Todo el que pueda presentarse debe poder presentarse, y ya decidirá el fútbol. Respeto, pero evidentemente no comparto sus valoraciones públicas. No tengo nada que reprocharle... Pero es un responsable público, y quizá lo que deberíamos hacer a partir de ahora es entendernos. Debo decir que Pedro Rocha le pidió en varias ocasiones verse. No fue posible. Y creo que una de las funciones de un responsable público es escuchar a quien se lo pida. Porque para eso es un responsable público. Se puede estar más o menos de acuerdo, pero creo que su obligación es escuchar a todo el mundo. Después él hará sus juicios de valor.

-¿Teme una impugnación el 17 de diciembre?

-No temo nada porque hay un reglamento electoral y hay una orden ministerial. Qué curioso, por cierto, que esa orden ministerial la ha firmado este mismo año el propio secretario de Estado. Y hay una ley del deporte que, por cierto, también promulgó el actual secretario de Estado. Donde hay documentos sobran palabras.

-¿Cómo se siente, siendo el candidato apoyado por la Liga de Javier Tebas?

-Yo agradezco el apoyo de todos y de Javier, y de manera muy especial de la inmensa mayoría de los clubes de la liga de fútbol profesional masculina y femenina. Creo que ellos sienten, quieren y necesitan paz y acuerdos. En algunas cosas podemos también discrepar, seguramente, pero estamos trabajando desde hace un año y hemos logrado grandes acuerdos. Y no hicieron falta muchísimas horas.

-Su adversario, Salvador Gomar, ha presentado un programa con 164 medidas. ¿Cuáles destacaría como los principales puntos del suyo?

-Para mí los programas los hacemos todos los que representan al fútbol. Estamos recibiendo propuestas de la Liga, de la Liga F, de los sindicatos, del colectivo de entrenadores, del colectivo de árbitros… De todos. Para después presentarles propuestas a los asambleístas y al fútbol español. Propuestas que además entiendo que son compromisos; y esos compromisos son para cumplir. Mi intención está clara. Primero consenso, diálogo y que haya paz en el fútbol; y a partir de ahí, acción, porque yo no vengo para estar. Le destaco, aparte, dos medidas concretas e importantes. Por un lado, queremos crear una OTT propia para la visualización del fútbol español no profesional y del fútbol sala. Probablemente trabajando con la Liga, que son los grandes expertos en la visualización del fútbol. Por otro lado, queremos hacer una catalogación y clasificación de los estadios españoles, a partir de una auditoría que será el punto de partida para un programa de modernización y mejora de esos estadios.

-¿Qué papel tiene Sergio Merchán en esta campaña electoral?

-Yo no tengo ningún afán personalista… Y la verdad es que en él me he encontrado una persona, con mayúsculas, excelente. Si la mayoría quiere que esté yo, estaré yo, y si la mayoría quiere que esté Sergio, pues estará Sergio. Espero estar a la altura, y puedo decirles a todos hoy y aquí que no les voy a defraudar.

-¿Qué opinión le merece el sistema de aval único, que impide la aparición de sangre nueva en el poder federativo?

-El deporte con más impacto siempre es el fútbol, pero recordemos que este mismo modelo se aplica en todas las federaciones deportivas de este país. Se pudo haber cambiado. Se ha publicado una ley del deporte nueva hace dos años. Hay una orden ministerial de este mismo año. Los que han tenido la oportunidad de cambiarlo no lo han hecho. A mí me vale cualquier proceso. Entiendo que para la inmensa mayoría de la gente sea un proceso engorroso y difícil, pues casi hay que hacer un máster para poder entenderlo. No creo que este sistema sea el mejor.

-¿Le sorprendió la presentación a última hora de Gomar?

-Yo soy una persona que si dice una palabra, la cumple. Él dijo, después de tener una reunión conmigo, cuando conocía el apoyo inmenso que recibí, que por el bien de la propia federación renunciaba a presentarse. Eso fue hace una semana. Ahora parece que ha cambiado de opinión, no sé si él solo o por la federación andaluza y las presiones del entorno de Luis Rubiales. Esa federación manifestó clara y nítidamente el domingo 1 que no iba a apoyar a nadie y que sus avales los iba a tener su vicepresidente, el señor Molina Maza. De todos es conocida su relación y proximidad con Luis Rubiales. Ahora parece que se han visto estos días en Valencia el señor Gomar y el señor Rubiales.

-El señor Gomar lo niega.

-Ese cambio tiene que obedecer a alguna circunstancia… Que bien podría ser esta. Y yo evidentemente tengo que respetarla. Es un compañero; por tanto, respeto y nada más.

-Se ha publicado que en esa reunión de tres horas usted le amenazó con revelar posibles trapos sucios, los mismos con lo que ya se le advirtió hace un año para que no se presentase.

-Ese no es mi estilo, y tengo ya 57 años. Salvador tiene estados emocionales cambiantes; lo digo con todo el cariño. Ese mismo día yo estaba en una comida con tres amigos que no tenían nada que ver con el fútbol. Le dije que se sumase. Llegó prácticamente al café. Nos quedamos él y yo solos tres horas, y después se marchó a Valencia. Fue cuando manifestó que renunciaba a ser candidato por la buena convivencia de las territoriales. La gente que me conoce ya sabe que Rafael Louzán no va por la vida amenazando a nadie. ¡Aparte, él después ha hecho lo contrario! Hay algo aquí que no encaja.

-España va a seguir sin estar representada en los comités directivos de UEFA y FIFA, que se renuevan el próximo año. ¿Le preocupa que la reputación de la federación siga bajo sospecha después de los escándalos rubialistas?

-No, no me preocupa. Como muchas personas, tenemos un proceso abierto que está pendiente de sentencia firme. Además, confío plenamente en la justicia y, por lo tanto, creo que le debemos dar margen. En segundo lugar, creo que FIFA y UEFA van a tener a España como un verdadero referente. Es cierto que hemos pasado una etapa convulsa, pero la presunción de inocencia tiene que estar por encima de cualquier otro escenario y trabajaremos para volver a estar donde nos merecemos en poco tiempo.

-¿Por qué duró tantos años el 'rubialismo', ahora tan denostado? ¿Por qué nadie hizo nada?

-Yo no le apoyé cuando llegó; yo había apoyado otra candidatura. Fue un camino muy difícil, especialmente para los que estábamos en otra línea. Después hubo una única candidatura, y bueno, pues estás allí, pero sin ninguna responsabilidad ejecutiva (excepto ahora, con Pedro Rocha, que me pidió ayuda para sacar adelante cosas). Sinceramente espero que nunca más vuelva a pasar algo así. No puede haber 'conmigo o contra mí'. Yo he estado en política y he sabido entenderme con todos los partidos políticos, además de entenderme con los míos. Conmigo jamás volverá esa actuación sectaria, que creo que lo único que ha traído es perjuicios para todo el mundo. Durante la época de Rubiales se llegó a una tensión sin límites en la federación: no hay más que ver ahora, en el ámbito laboral, la tranquilidad que hay en los trabajadores. Antes había unas tensiones tremendas. Eso nunca más va a volver. Es el momento de la paz y del buen gobierno. Y hay que dejar atrás esta etapa que nos ha desgastado a todos.