Iñaki Williams liquida a Mourinho, cada vez más cuestionado en Turquía

Iñaki Williams firmó un doblete (minutos 5 y 45) que decantó el duelo del lado vasco. La mala noticia fue que su hermano Nicotuvo que abandonar lesionado el terreno de juego en el minuto 36 por un problema en su rodilla derecha.

Los pupilos de Ernesto Valverde, ordenados e intensos, aprovecharon un regalo de Samet Akaydin a los cinco minutos, que cedió el esférico hacia atrás sin mirar.

Guruzeta se hizo con el balón y se fue sólo en un mano a mano con el guardameta, pero vio de reojo al mayor de los Williams por la derecha, a quien acabó asistiendo para subir el primer tanto en el luminoso.

El segundo gol llegó al filo del descanso tras un derechazo casi sin ángulo de Iñaki a pase de Sancet.

Tras el descanso, el ritmo fue un poco más pesado y hubo que esperar al 60 para ver la primera gran ocasión, por parte de los turcos, pero el remate de Tadic ya dentro del área golpeo en un rival y no fue a más. Mourinho intentó agitar el encuentro dando entrada al ariete Dzeko para duplicar el peligro ofensivo y ayudar a un solitario En-Nesyri, muy bien vigilado por la zaga rojblanca.

Pero, con más espacios, la presión intensa y alta del Athletic daba alas a los vascos, golpeando con fuerza a la contra gracias a un entonado Sancet que tuvo un par de ocasiones para sentenciar definitivamente el partido. Y el camino hacia la victoria se allanó aún más con la expulsión por doble amarilla tras dos faltas sobre Iñaki Williams de Müldür, que dejó a los turcos casi sin opciones de creer en remontar.

Los de José Mourinho apretaron en un final de partido con un encontronazo entre Amrabat y Sancet, pero sin crear demasiados problemas a los rojiblancos, que refuerzan su condición de favoritos, mientras que el Fenerbahçe se complica y enreda en la tabla, en la que cae al decimoquinto puesto con ocho puntos.

El Athletic se coloca líder provisional de la competición, con 16 puntos, a la espera del resultado del Lazio, segundo y con tres puntos menos, que jugará este jueves ante el Ajax de Ámsterdam.

El equipo vasco, que lleva cinco victorias consecutivas desde finales de noviembre, tiene el viento a su favor para clasificarse entre los ocho primeros, que da acceso a los octavos de final, en una competición cuya final será en mayo en San Mamés.