Eto'o embiste a lo Zidane

Ocurrente y temperamental por naturaleza, volcánico siempre, Samuel Eto'o protagonizó un dejà vu en un arranque de incontinencia. La imagen del día en las ligas internacionales. El camerunés le sacudió un cabezazo en el pecho al defensa esloveno del Chievo Bostjan Cesar al viejo estilo conocido: el derrote de Zidane a Materazzi que dio la vuelta al mundo en la final del Mundial 2006 en Alemania. Un derrote sin sanción —no lo vio el árbitro— que acompañó a otra derrota del insípido Inter (2-1). El equipo milanés recula hasta el sexto puesto en el Calcio y ya está a nueve puntos del Milán.

Genial para unos, insufrible para otros, era cuestión de tiempo que Samuel Eto'o reeditase viejos pasajes de la Liga española. Hace cuatro años, en un Barcelona-Athletic en el Camp Nou, escupió en la cara al jugador rojiblanco Unai Expósito. Salivazo repugnante que ocasionó un duro cruce de declaraciones frente a otro personaje habitualmente en calma, Javier Clemente. «Normalmente escupen los que bajan del árbol», contestó el técnico de Barakaldo a propósito de la procedencia africana de Eto'o.

Después del partido de ayer, el ex delantero del Barcelona recibió la reprobación general y el calor de su entrenador, Rafa Benítez. «A Samuel le habían dado antes un fuerte golpe. Eso es una provocación, ¿no?», le justificó Benítez recordando el codazo que le había propinado Cesar unos minutos antes.

«Está claro que Samuel ha perdido el control —dijo el técnico español—. Es la reacción de un jugador en un equipo en dificultades. Pero hay que decir que tenemos cuatro árbitros sobre el campo. Y si ninguno de ellos piensa que ha hecho nada, ¿qué vamos a decir nosotros?».

Equipo en declive claramente, el Inter ha encadenado una serie de tres empates y dos derrotas y en Milán ya fluye el archiconocido «Benítez se tambalea» trece jornadas después de haber sustituido a Mourinho. Esta semana, el equipo tiene la oportunidad de enderezar el rumbo decadente en una nueva jornada de la Liga de Campeones, ante el Twente holandés.