Andrés Iniesta anuncia su retirada: «Habría jugado hasta los 90 años; algún día volveré al Barça»

El acto comenzó con un emotivo vídeo con las mejores imágenes de Iniesta como futbolista, con goles míticos y clave, entre los que estaban el de Stamford Bridge o el de Sudáfrica y combinadas con imágenes de cuando era pequeño. Fue una cuenta atrás, desde la actualidad a sus inicios. Visiblemente emocionado subió al estrado. «Quiero agradeceros a todos los que estáis aquí acompañándome y los que no han podido también. Supongo que me permitiréis que me emocione hoy...», empezó diciendo. Los aplausos le dieron un respiro para coger aire. «Nunca pensaba que llegaría este día, nunca lo imaginé. Estas lágrimas de estos días son lágrimas de emoción, de orgullo. No son de tristeza. Son lágrimas de un niño de Fuentealbilla que tenía el sueño de ser futbolista y lo conseguimos después de mucho esfuerzo y nunca rendirse. Esos valores han sido imprescindibles en mi vida. Me siento muy orgulloso de todo ese camino. Me siento muy feliz de haber conseguido el sueño, el premio. Mi carrera deportiva ha sido como un cuento, he vivido lo mejor y me gustaría hacer un recorrido por ese cuento que empieza en Fuentealbilla».

Iniesta fue alternando imágenes con comentarios para realizar un repaso de su vida y de su trayectoria. Así apareció Víctor Manuel Hernández, que fue el primer entrenador que tuvo cuando benjamín, o de su padre. «La familia siempre ha sido mi motor, mi fortaleza. Hoy puedo tener la suerte de contar con muchas generaciones de esa gran familia y eso es muy bonito. Mi hermana y mis padres lo han sido todo para mí por lo que me han enseñado y transmitido. Hoy tengo mi maravillosa familia, con Ana y nuestros cinco peques. Es nuestro motor y lo que da sentido a todo lo que hacemos. Mi padres han sido mi inspiración y siempre hemos tenido una conexión desde que tenía dos o tres años, empezando con los balones de plástico. Mi pasión por el fútbol se lo debo a él. Muchas gracias por los consejos y los silencio, por todo lo que has significado para mí en la vida y en el fútbol».

«El viaje de mi vida es Fuentealbilla-Barcelona. Hoy tengo la suerte de estar con esas cuatro personas que hicimos ese viaje. Este viaje comporta todo, todo el trabajo, sacrificio, humildad, esfuerzo… La Masía me cambió para siempre. Es el lugar en el que mejor podía estar para potenciar los valores que tenía que tener en la vida. Es una etapa que marcó nuestras vidas. Venir al Barça era un sueño en el que me focalicé para cumplirlo. Llegué al mejor lugar posible para cumplir todos los sueños que tenía por delante», explica el manchego, recordando a Serra Ferrer.

También hubo un recuerdo para Luis Enrique y Van Gaal: «No puedo olvidar el momento en el que Carlos Naval llamó a la Masía y preguntó por mí. Tenía 16 años y no sabía dónde meterme. Me temblaba todo. Siempre quedará marcado en mi cabeza. A partir de ahí, ver tantos días el Camp Nou desde La Masía… Cuando entre en el vestuario no sé cuántos días estuve sin abrir la boca. Luis Enrique me recogió con el coche y me llevó al vestuario».

La selección española tuvo una incidencia muy grande en Iniesta, que quiso tener palabras para Luis Aragonés y Vicente del Bosque: «Mi otra piel es la selección. Seguramente nos remontamos a los últimos logros, pero para mí empieza con 15 años. Todas esas tarde de entrenamiento, compañeros con los que he crecido. Igual... mi camino es un agradecimiento a todas las personas que me he ido encontrando. He tenido el privilegio de estar en la mejor época de la selección. Una mención especial a Luis Aragonés, Del Bosque y Lopetegui por ese respeto que me han tenido. Todo se resume con una foto, ese gol del Mundial. Pero ese gol lo marcamos todos. Los que luchamos, los aficionados, todos los jugadores. La magia de todos lo hizo posible. Y la magia de Jarque, que nos ayudó desde donde esté. Un honor de haber estado en esta etapa», apuntó, con los padres del fallecido futbolista del Espanyol en el auditorio.

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Hubo palabras para el Barcelona y vídeo de Guardiola, con el que se ganó todos los títulos a nivel de club. «No tendría sentido esta etapa sin haber vivido la mejor época para mi club, el Barça. Años en los que lo pasamos muy bien. No sólo era jugar, sino cómo lo hacíamos. Fue mágico y único. Lo que me llevo es lo que disfrutamos, los de dentro y nuestra afición. Es una época que simboliza todo para mí. Poder estar en el club de mi vida, estar en las categorías inferiores, llegar al primer equipo, representar al Barça... es algo único y con el mejor recuerdo del mundo. El Braça me cambió mi vida y lo ha sido todo para mí. No puedo olvidarme del grupo de jugadores y entrenadores de esos años que lo hicieron único», comentó Iniesta.

También ahondó sobre su retirada y su etapa en el Vissel Kobe. «En el 2018 tomamos una de las decisiones más difíciles. Con un cierto riesgo. Dejar el Barça para irnos a Japón. Después de esos cinco años fue una experiencia maravillosa. Una bonita historia con un club humilde, sus dos primeros títulos y hacer crecer el club. Pero a nivel familiar ha sido la historia más bonita que hemos tenido. Kobe y Japón nos acogió de una maner increíble. Se acabó luego esa etapa de Japón y con una mirada en el siguiente paso, con ganas de acercarnos a España. Fuimos a Emiratos Árabes y jugar un año más e ir pensando en el siguiente paso», recordó.

Iniesta, que atesora 35 títulos, seguirá ligado al fútbol, desde los banquillos, según ha ido deslizando el manchego. Su intención es comenzar en el fútbol base e irse formando al tiempo que va aprobando los carnets de entrenador. En este acto también dejó entrever hacia dónde se dirige su futuro: «El fútbol se acaba en esta etapa. El juego continúa... no puedo estar muy lejos del fútbol, ha sido mi vida y lo seguirá siendo. Estamos trabajando en diferentes proyectos. En este siguiente paso tenga esa motivación para seguir formándome fuera del fútbol pero de la misma manera. Necesito aprender, equivocarme, formarme, en el proyecto de los clubes que tenemos, las academias... que es un legado que quiero seguir manteniendo. Y desde ya estoy empezando con el curso de entrenador. Los que me conocéis sabéis que soy bastante cabezón. Espero hacer un gran trabajo no corriendo detrás del balón, sino desde el otro lado. Pero con muchas ganas. Si hay una palabra que puede resumir esta etapa es 'orgullo'. Orgullo de haber peleado hasta el último día como futbolista. El resto es historia: títulos, derrotas , momentos malo... pero el orgullo y no rendirme nunca es lo que me hace ser feliz. Con pena porque habría jugado hasta los 90 años pero feliz de haber convertido el sueño de ser futbolista». El acto acabó con una foto de familia bajo los acordes de 'Viva la vida' de Coldplay y dio comienzo la rueda de prensa.

«Mis dos días más felices en el Barça son el día que debuté en Brujas y el que debuté en nuestro estadio contra el Recreativo de Huelva. Y luego vino lo que vino», recordó, al tiempo que se mostró prudente sobre la posibilidad de entrenar al Barcelona: «Espero que el míster Flick pueda estar muchos años, sería una gran señal. No tengo ninguna duda que su trabajo será fantástico. Aún no he ido ni a la primera clase pero la intención es poder tener el título». El manchego desveló que hubiera podido seguir algún año más en el Barcelona tras a exhibición que dio en su último partido, en la final de Copa ante el Sevilla: «Sí, aquella final de Copa contra el Sevilla iba volando, de los mejores partidos que he hecho. Claro que me hice preguntas. Mi idea siempre fue retirarme en el Barça, pero las situaciones hacen que tengamos que tomar decisiones, con todas las consecuencias. El Barça necesita que des el 300% y sentía que eso no podía ser».

De todas formas, Iniesta reconoció que le gustaría regresar al Barça en algún momento: «Volver al Barça me gustaría. Los que han marcado este club tiene que estar, pero hay que estar con las condiciones. Cada uno es único en su persona. Mi perfil será el perfil Iniesta». El ya exfutbolista recordó la etapa azulgrana entre 2008 y 2014: «Esa etapa se me antoja difícil que se vuelva a repetir en cuanto a títulos porque fue una salvajada, pero nada es imposible en el fútbol y en la vida». Y descartó que, como dijo Rakitic, a partir del 2015 los jugadores se dejaron ir: «Al final las cosas salieron diferentes y cada uno puede ponerle los calificativos que crea. Yo lo llevo a una cuestión de fútbol, no de actitudes».

También se le preguntó por el gol del Mundial, el que le anotó a Holanda en la final: «Pasarán los años y nos seguiremos emocionando. No hay palabras para describir ese momento. Ese gol lo marcamos todos, lo siento así. Es como celestial, es más que lo físico, sentí esa fuerza de todos. Fue el momento». Y valoró el hecho de retirarse sin un Balón de Oro: «Hoy me siento aquí y habéis visto que imágenes con títulos han salido brevemente. Lo importante es el cariño y amor de la gente. El Balón de Oro es muy bonito pero para mí no es... la palabra orgullo no es por los títulos, sino por el suelo de ser futbolista y el cariño de la gente». Iniesta fue incapaz de escoger entre el gol de Stamford Bridge y el de Sudáfrica: : «No puedo quedarme con uno. No se pueden elegir. Cada uno en su contexto y en su magnitud. Son dos puntos que simbolizan mis dos vidas: la selección y el Barça».