FÚTBOL
El Mundial de Qatar, bajo sospecha
Un alto cargo de la FIFA envió un correo a su vicepresidente, donde sugería que el emirato compró la votación
Las elecciones a la presidencia de la FIFA han degenerado en un culebrón de presunta compra de votos que ahora salpica a la designación de Qatar como sede del Mundial de 2022 . Mohamed Bin Hamman amenazaba con poner fin a once años de mandato de Joseph Blatter, pero los acontecimientos se han sucedido a velocidad de vértigo al ser apartado de la carrera electoral por incumplir el código ético con un presunto soborno . El qatarí se defiende: «Me han tendido una trampa».
La consecuencia de este escándalo ha sido inesperada. Suspendido por el mismo motivo que Bin Hamman, Jack Warner, vicepresidente del máximo organismo del fútbol mundial, hizo público ayer un correo del secretario general, Jerome Valcke, en el que éste le insinuaba que se había «comprado» la votación celebrada en diciembre del pasado año en la que se decidió la sede del Mundial 2022.
El propio Valcke reconoció la existencia de correo, en el que también se ponía en tela de juicio que Bin Hamman aspirase a presidir la FIFA. Sucesión ya imposible porque el único rival de Blatter en la votación que se celebrará el miércoles en Zúrich renunció el domingo minutos antes de que el Comité Ético le suspendiera por su presunta relación en un soborno a 25 miembros de la Concacaf, en el que también habría participado Warner.
«Promoción, no compra»
«Bin Hammam pensó que es posible comprar a la FIFA como ellos compraron el Mundial», se podía leer en el correo de Valcke, que no tardó en matizar sus palabras a través de un comunicado. «Lo que quería decir es que la candidatura ganadora utilizó su fortaleza financiera para hacer lobby y conseguir apoyos . Era una candidatura con un presupuesto muy importante y lo utilizaron para promocionarse», explicó. Aunque dejó claro que en «ningún momento» se refería a la «compra de votos» o a cualquier otro tipo de «comportamiento poco ético», sus explicaciones no convencieron en Australia, rival de Qatar en la carrera por el Mundial 2022, al igual que Japón y Corea del Sur. Así, un senador exigió a su Gobierno que reclame a FIFA la devolución de los más de 46 millones de dólares que se invirtieron para promocionar la candidatura.
«Quiero aclarar que no hay ninguna investigación abierta en la FIFA en relación a la elección de Qatar como sede del Mundial de 2022», agregó Valcke en su comunicado, en el que también rechazó haber influido para que se suspendiera provisionalmente a Warner y Bin Hamman por incumplir el código ético en el proceso electoral en el que el segundo era rival de Blatter. Al parecer, habrían ofrecido 28.000 euros a 25 de los 35 delegados de la Concacaf para que votaran en contra del actual presidente , aunque cuatro de ellos se negaron y denunciaron los hechos a la FIFA.
Mohamed bin Hammam, presidente de la Confederación Asiática, se mostró indignado por su suspensión y anunció que recurrirá la decisión de forma urgente antes del Congreso que comenzará hoy y continuará mañana en Zúrich. «La forma en que se ha dirigido este procedimiento no cumple ninguno de los principios de justicia. Se me castiga antes de demostrar que soy culpable . Tengo la impresión de que el resultado del procedimiento ha sido definido desde muy al principio como se hizo evidente en la conferencia de prensa del domingo, en la que Valcke demostró sus preferencias claramente», afirmó.
Una trampa de Blatter
En su defensa ante la FIFA, el qatarí acusó a Blatter de haberle tendido una trampa al afirmar que el suizo conocía esas prácticas irregulares, aunque no las denunció, por lo que también habría incumplido el código ético. La resolución del máximo organismo del fútbol desestimó la acusación, por lo que el presidente será reelegido mañana al no haber ya ningún otro candidato.
A pesar de su absolución, Blatter reconoció ayer que las denuncias de corrupción han hecho mucho daño al organismo, aunque dejó claro que «los Mundiales de 2018 y 2022 no se verán afectados ». Patrocinadores importantes del Mundial, como Cola-Cola y Adidas, ya han mostrado su preocupación por la polémica y ayer pidieron aclaraciones.
La supuesta compra de votos no es la única polémica en la que se ha visto envuelto Qatar 2022. El calor podría obligar a adelantar el Mundial a enero . Blatter admitió esa posibilidad porque en junio las temperaturas llegan a los 50 grados, lo que había generado preocupación en Europa.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete