Empacho de Clásico

Con sus respectivas eliminatorias de cuartos de final de la Liga de Campeones finiquitadas , el Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona cumplieron los pronósticos que anunciaban un cuádruple enfrentamiento entre ambos en menos de veinte días. Después de eliminar a Tottenham y Shaktar Donetsk con relativa facilidad, los equipos de Mourinho y Guardiola se verán las caras el próximo 27 de abril en el coliseo blanco y sólo una semana después en el Camp Nou, con un billete para la final de Wembley en juego. Será el broche de oro a un duelo que tendrá antes otros dos episodios : en Madrid, en el marco de la Liga BBVA , y en Mestalla, ante una Copa del Rey lista para vestirse de blanco o azulgrana. No es habitual que los dos grandes del fútbol español se vean las caras en tantas ocasiones durante un espacio de tiempo tan reducido de tiempo, por lo que será interesante descubrir las estrategias de los técnicos para afrontarlas y la capacidad de los futbolistas para mantener su máximo nivel de tensión.

La guerra psicológica ya ha comenzado. Desde el entorno azulgrana ya se apunta a que Jose Mourinho podría «tirar» el primero de los cuatro choques , el correspondiente a la Liga, debido al colchón de ocho puntos que los catalanes tienen en la clasificación y que, a falta de ocho partidos, les hace máximos aspirantes a ese título. Al mismo tiempo, desde Madrid responden asegurando que serán los azulgranas los que salgan «relajados» al coliseo blanco. Sin embargo, cuesta creer que ninguno de los entrenadores pueda dar por perdido un encuentro que podría marcar el devenir de los tres siguientes . Lo cierto es que el duelo clave podría ser la final de Mestalla , pues de su desenlace dependerá que el Real Madrid afronte la aliminatoria europea con el saldo de títulos igualado con los de Guardiola (en caso de que éstos aprovechen su buena posición liguera) y por tanto con menos urgencias de las que podría tener en caso de perder Liga y Copa.