Los candidatos de la Premier, la liga más competida del mundo

Un torneo, muchos candidatos

Bajo el mando de Sir Alex Ferguson, el Manchester United ha dominado las dos últimas décadas del fútbol inglés. De los 21 campeonatos disputados desde 1992, los diablos rojos han ganado en 13 ocasiones (en total cuenta con 20 en sus vitrinas). Los conjuntos de Ferguson han extendido su hegemonía ante la decadencia estos años del histórico dominador del fútbol inglés: el Liverpool, que ganó la última de sus dieciocho ligas en 1990.

Pese a ello, la Premier League se ha ganado la fama de ser una competición muy disputada, con seis o siete equipos compitiendo a un alto nivel. A esa percepción ayuda también el fútbol más vistoso que se practica en Inglaterra, pero no ha sido hasta este año cuando parece que la temporada va a ser realmente reñida. Superadas las siete primeras jornadas de competición es buen momento para analizar como han arrancado los conjuntos. Pero, ¿cuáles han sido los motivos para que la Premier se haya apretado tanto?

Por un lado, hay razones meramente deportivas. Éstas tienen varias vertientes, por un lado el bajón del United, que no acaba de coger el ritmo bajo el liderazgo de David Moyes. La sombra de Ferguson sigue siendo alargada. Pero también influye que tanto Liverpool como Arsenal hayan conseguido enriquecer sus equipos con jugadores muy competitivos.

El otro motivo radica en la llegada de los «petrodólares» a la Premier. El desembarco de Roman Abramovich en el Chelsea contribuyó a crear un nuevo contendiente serio al título, de hecho ha conquistado tres de las últimas nueve ligas. Lo mismo ha sucedido con el Manchester City que, desde que en 2008 fue comprado por un grupo inversor de los Emiratos Árabes, ya se codea con los mejores, hasta el punto de lograr el título hace dos temporadas.

Y como último factor para generar una competición atractiva, uno de los temas que más debate generan en España, y al que se considera en parte responsable de la bicefalia que vive la Liga española: los derechos televisivos. La Premier League vende sus derechos televisivos de manera conjunta, y no cada club individualmente. El dinero que se obtiene se divide en tres partes: la mitad se reparte de manera equitativa entre los clubes; un cuarto se entrega en base a la posición final anual en la liga. Y el último cuarto es por un concepto que se hereda de los primeros años en los que el fútbol era televisado, que trata de compensar a los equipos que más salen por si esa situación provoca que vaya menos gente al campo de fútbol. Así, el campeón de la pasada temporada, el Manchester United, recibió la mayor cuantía de todos los equipos: 60.813.999 libras que se desglosan en: 13.803.038, 12.961.615 por ser el más televisado y 15.117.620 por sus méritos. En el final de la lista, el Queens Park Rangers, que recibió 39.752.462 (13.803.038 + 6.261.817 + 755.881). Apenas 20 millones de libras separan a los dos clubes en el reparto del dinero de la televisión.

Arsenal, líder: 17 puntos. La enésima solución de Wenger

La llegada de Mesut Özil a Londres procedente del Real Madrid ha generado en Londres tanta aceptación como desasosiego ha provocado en el Madrid. El alemán le ha dado al conjunto de Wenger lo que le faltaba desde la venta de Cesc Fábregas al Arsenal: un faro, un guía, un líder indiscutible que vertebra todo su fútbol. Özil parece sentirse también cómodo en este nuevo rol. En Madrid era uno más, en los «gunners» es la referencia.

Pese a vender cada año a sus jugadores más importantes, las salidad de Fábregas y Van Persie así lo atestiguan, el Arsenal, bajo los mandos de Arsene Wenger es una maquina capaz de renovarse año a año. Pese a ello, lleva años sin poder pelear el título con garantías, limitándose a pelear por acceder a las plazas que dan acceso a jugar la Champions League. Conquistó la Premier por última vez en 2004.

Esta temporada, guiados por Özil, y con Cazorla, Wisheare y Giroud como escuderos, el Arsenal ha empezado la temporada lanzado. Con 14 goles a favor su poder ofensivo queda más que probado. Es en defensa, con 8 goles encajados, donde tiene que pulir ciertas carencias si quiere mantener el nivel y llegar a las fechas claves con opciones de ganar el título.

Liverpool, 2º: 17 puntos. Rodgers resucita Anfield

El gran histórico del fútbol inglés ha vuelto. Brendan Rodgers ya tejió la pasada temporada un equipo vistoso, al que se le percibía un gusto por el balón y el fútbol estético. Aquel equipo padecía de falta de rigor y se venía abajo en determinados tramos del partido.

Pero con la nueva temporada se puede ver a un equipo más armado. Aunque Rodgers todavía está haciendo pruebas y cambios, la última de ellas es jugar con tres centrales y abrir los laterales hasta el centro del campo, el patrón está claro: a través de Coutinho debe circular el balón, el eterno capitán Gerrard sigue gestionando las jugadas a balón parado, y arriba, pura dinamita: Daniel Sturridge y Luis Suárez.

La sanción que pesaba sobre el uruguayo, dejó a Sturridge la responsabilidad del gol durante el primer mes y medio de competición. Y el inglés se multiplicó para colocar al Liverpool como líder en las primeras jornadas. Con 11 goles a favor y cinco en contra, en Anfield empiezan a sentir que es posible romper un maleficio que les priva del título desde 1990. Con Suarez y Sturridge, todo es posible.

Chelsea, 3º: 14 puntos. Mou busca recuperar su corona

«Welcome back José». Ni ganar la Champions League hace dos años, ni la Europa League la pasada temporada parecían colmar el apetito del Chelsea. Solo la vuelta de Mourinho parece colmar las expectativas de una afición que había visto como se desdibujaba la personalidad de un equipo que lleva tres años sin ganar el título. De las cuatro veces que el Chelsea ha sido campeón de la Premier dos fueron en la primera etapa de Mourinho en el banquillo de Stamford Bridge.

El equipo presenta no obstante importantes carencias. La más alarmante es la ausencia de un centro del campo con buen toque de balón. La falta de elaboración, puede compensarse con esa línea de tres que Mourinho ha dispuesto por detrás del delantero: William, Mata, Hazard, Oscar y Schürrle se disputan el puesto. Aunque Mourinho ha dicho que va a ser importante en el equipo, Ha causado sorpresa la poca participación de Mata, pero la realidad es que tiene competencia en el puesto. No obstante, si termina entrando en el equipo, el asturiano puede ser el adecuado para suplir la falta de juego.

En la delantera, Eto'o y Torres alternarán titularidad. Pero ámbos están lejos de su mejor nivel. Con 10 goles a favor, parece que la responsabilidad del gol la asumirán también los llegadores. En defensa, como todos los equipos de Mourinho, apenas se hace concesiones (ha encajado cuatro goles por el momento), y Cech vive un gran momento de forma. El Chelsea no tiene la mejor plantilla, tampoco es el que mejor juega, pero ¿cuando ha sido eso un problema para Mourinho? Peleará por el título.

Manchester City, 5º: 13 puntos. La mejor plantilla busca estílo

Sigue siendo el favorito al título en las casas de apuestas. En lo que llevamos de temporada el City ha ofecido lo mejor y lo peor. Todo lo que gana en ataque, lo pierde en defensa. Con un Agüero espectacular y un Negredo integradísimo el otro equipo de Manchester ha demostrado un impresionante poder ofensivo. Pese a no contar ya en plantilla con Tévez y Balotelli, el mejor rendimiento de Dzeko también está supliendo esas ausencias.

Jesús Navas ya ha demostrado que puede aportar ese plus diferenciador al equipo para desatascar defensas rivales, y David Silva, aquejado de problemas físicos en el inicio de temporada, se ha erigido como el factor diferencial que hace brillar el fútbol que pretende imponer Pellegrini.

La pareja del centro del campo, Fernandinho- Yaya Touré, se ha demostrado letal. Dos llegadores que nutren de más peligro ofensivo al equipo. Por poner una pega, en ocasiones ha parecido un «desperdicio» que Fernandinho tenga que guardar las espaldas en las subidas del marfileño. No es descartable que Pellegrini coloque un tercer hombre en el mediocampo, muy probablemente Javi García, para liberar las llegadas de ámbos. Aunque eso penalizaría a uno de los hombres de ataque. Con 17 goles a favor, es el equipo que más veces ha perforado la portería rival. Las dudas vienen en defensa donde, pese a los buenos jugadores, el equipo ha cometido errores, y su portero, Joe Hart, ha sido cuestionado. Han encajado ya ocho goles. La victoria por 4-1 en el derbi de Manchester, en la que mostró una tremenda superioridad sobre el United, son su mejor aval para presentarse como el principal favorito al título

Tottenham, 6º: 13 puntos. Aprender a vivir sin Bale

El equipo dirigido por Andre Villas-Boas ha sufrido la marcha de su jugador más determinante en los últimos años. Tal vez de toda su historia. Gareth Bale ya no está, pero a cambio, el club londinense ha sido capaz de construir un equipo que a primera vista parece más sólido. Lo demostró en esas primeras jornadas en las que solo pudo ganar por la mínima, en los que jugó mal y en las que demostró falta de acierto en el remate. Pero son esos los partidos que hay que ganar si se quiere aspirar a cosas importantes.

Ha encajado pocos goles, cinco, pero la cifra de goles a favor es raquítica, tan solo seis. Solo los últimos cinco equipos de la tabla llevan menos goles que los «Spurs». Si no mejoran en ese apartado, pelear por el título será imposible. Y en una competición tan igualada, si se descuelga de la lucha por el título el precio a pagar puede ser quedarse también fuera de Europa. Más este año, que Liverpool y Arsenal, sus «tradicionales» rivales los últimos años por la cuarta plaza, parece que han incrementado ostensiblemente su nivel.

Por plantilla está un peldaño por debajo del resto de rivales, a excepción del Everton, que se ha ganado el derecho a ser candidato, pero hay dos jugadores que han dejado muy buenas sensaciones en las primeras jornadas: Gylfi Sigurðsson y Paulinho. Del rendimiento de ámbos, y de que Soldado, Lamela y Defoe mejoren su puntería, va a depender que el Tottenham pueda olvidar a Bale y lograr lo que ni siquiera con él consiguieron: aspirar a algo más que a entrar en puestos de Champions.

Everton, 7º: 12 puntos. Batuta española para la nueva etapa

Hasta la pasada jornada el Everton era el único equipo de la competición que permanecía invicto. El City rompió la racha. El Everton vive su particular transición, de los tiempos de David Moyes a la nueva etapa de Roberto Martínez. Con Moyes también se fue a Manchester el jugador más determinante del Everton los últimos años, el belga Marouane Fellaini.

Con Martínez llega un futbol que intenta tener más la pelota, pero que sigue manteniendo las esencias del fútbol directo de la anterior etapa. El joven Barkley, que vertebra el equipo desde la mediapunta, representa bien lo que puede ser el equipo: capaz de las genialidades, pero quizás inexperto para batirse a cara de perro con los mejores en una temporada larga. Diez goles a favor no es mala cifra para siete jornadas, pero nueve en contra son demasiados para un equipo que quiere pelear con los mejores.

Además, de Barkley, los jugadores en los que hay que fijarse en este equipo son Romelu Lukaku, un belga que a sus insultantes 20 años volvió loca a la defensa del City la pasada semana. Cedido por el Chelsea, promete ser uno de los delanteros más importantes del fútbol europeo los próximos años. El otro jugadore es menos conocido por el público español: Leighton Baines, un lateral izquierdo por el que el Manchester United pujó hasta el último día de mercado. Su pierna izquierda es un verdadero guante, y es uno de los lanzadores de falta más eficaces del mundo.

Manchester United, 9º: 10 puntos. Moyes y el legado de Sir Alex

El Manchester United cierra este grupo. Por delante en la clasificación también están el recien ascendido Hull City y el Southampton de Pochettino, pero aún es pronto para saber hasta que punto estos equipos van a poder aguantar el ritmo. Tras la marcha de Alex Ferguson después de 26 años, un punto de incertidumbre se ha instalado en Old Trafford. Su relevo, David Moyes, conoce a la perfección la competición después de once años dirigiendo al Everton.

El United permaneció todo el verano sin reforzarse. Primeró tanteó a Cesc, luego a Ander Herrera, para acabar fichando finalmente a Fellaini. El belga es un gran jugador, pero no el adecuado para cubrir el déficit de juego de toque que tiene el United. Ha sorprendido que Moyes, pese a lo mucho que conoce al belga, haya colocado a Fellaini en el centro del campo, dándole la responsabilidad de organizar el juego. Ese no es su rol, pues donde es peligroso es más adelantado, en la mediapunta. El experimento naufragó con estrépito ante el Manchester City, donde los de Moyes fueron literalmente vapuleados.

Los diablos rojos presentan un balance de 10 goles a favor y 9 en contra. Las cifras, especialmente la de goles encajados no están a la altura de quienes lideran la clasificación. No obstante, en cuando Moyes sepa encontrar la tecla para acomodar al trío Fellaini-Rooney-Van Persie, el equipo tendrá que mejorar necesariamente. Pero hasta que lo logre, no puede permitirse perder más puntos, pues está ya a seis de los líderes de la tabla.