Al contragolpe
División en el Metropolitano
«Desde hace años, el juego del Atleti es impreciso, aburrido y previsible, ultradefensivo»
Una reparación a medias para los colchoneros
![Simeone, en el partido ante el Lille](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/deportes/2024/10/24/simeone-efe-R0k9pWmFk9Xso7jFAUmKFXL-1200x840@diario_abc.jpg)
El Cholo Simeone ha sido una bendición para el Atlético de Madrid. Lo catapultó desde una etapa horrorosa, en la que el Albacete lo apeaba de la Copa y el equipo sesteaba en la mitad de la tabla hasta otra en la que se ha ... clasificado siempre para la Liga de Campeones, y conseguido títulos. Mil gracias por ello.
Desde el principio manifestó Diego Pablo que su objetivo principal era mantener la puerta a cero, y que a partir de ahí podría llegar algún gol, producto sobre todo de las acciones a pelota parada. Era un sistema 'novedoso' que desconcertaba a los rivales y conseguía los objetivos propuestos, no sin sufrimientos indecibles, como los de aquellas finales europeas, perdidas en gran parte por la falta de ambición.
Desde hace años, el juego del Atleti es impreciso, aburrido y previsible, ultradefensivo. Se regala siempre el balón al equipo contrario, sea este el que sea, reconociendo así su superioridad. El delantero centro, cual Robinson Crusoe, náufrago absoluto sin un mal Viernes que le sirva balones.
Cabe preguntarse qué harían otros entrenadores, como Thomas Tuchel, Jürgen Klopp o Míchel, ahora en el Girona, con una plantilla tan buena como la del Atlético. ¿Jugarían al 'cerocerismo' o más bien siempre al ataque, con Julián Álvarez, Sorloth, Griezmann y Roro como estrellas rutilantes?
A pesar de contar con jugadores excepcionales, el equipo no carbura. Ganó de milagro en Vigo y Bilbao, y en San Sebastián no cayó tan goleado como en Lisboa porque los delanteros de la Real no estuvieron acertados. Ha derrotado de manera agónica en casa al Leganés y el miércoles cayó ante el Lille, rivales en teoría muy inferiores.
El míster parece incapaz de reaccionar. Toma decisiones tácticas incomprensibles. Y ha sembrado la semilla de la división en el estadio. El público es ahora pro o anti-Cholo, en lugar de seguidor rojiblanco por encima de todo. Enrique Cerezo repite una y otra vez que el Cholo se irá cuando quiera. De siempre, los entrenadores dependían de los resultados. Si son ciertas las palabras del presidente, tendremos Cholo hasta que cumpla los 90. ¿Dónde iba a ir que le pagaran más y le exigieran menos? Como decía el Principito (no Antoine, sino el otro) no se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete