El Betis juega sin red en Moldavia

Es el estadounidense una buena noticia en las previas después de haberse ejercitado con el grupo durante una semana completa. Isco ya volvió pero no está inscrito, al igual que Losada y Vieites. El dato del portero no es baladí en esta ocasión dado que aunque la rotación le pertenece a Adrián, la lesión de Rui Silva hace que los acompañantes del sevillano sean también canteranos pero realmente jóvenes como Germán y Manu González, suplente de Guilherme en el Betis B e integrante del juvenil de División de Honor, respectivamente. En todo caso, el Betis no hará una rotación masiva dadas las bajas forzosas, entre las que también se unen los aún no recuperados Mendy, Bellerín, William Carvalho, Marc Roca, Juanmi y Fornals, así como el sancionado Lo Celso. Un once de ausencias que resta frescura a la rotación habitual en Pellegrini.

Así, y por la trascendencia del duelo y porque mirar al partido del domingo no sirve cuando los jueves te estás desangrando, el Betis afronta el envite de esta tarde ante el Petrocub con el peso de la necesidad y consciente de que ganar no sería más que una consecuencia de la diferencia de potencial. Pero eso hay que demostrarlo en el campo frente a un conjunto plagado de desconocidos en el concierto internacional y con jugadores que tienen una valoración de mercado tan modesta que si se suman todas las cifras apenas llegan a la que solamente tiene Perraud entre los del Betis.

La distancia que va desde el Betis ruinoso en Mlada Boleslav al brillante frente al Barcelona es la que debe ajustar ahora Pellegrini con sus hombres en el camerino, dado que las piernas y la calidad están pero falta esa motivación para superar a estos oponentes de menor nivel pero es que hoy en día cualquiera te puede poner la cara colorada. El factor temperatura también va a influir puesto que si vimos a varios jugadores béticos abrigarse con gorros, bragas y guantes en el entrenamiento en Sevilla hay que esperar a ver cómo les sienta las temperaturas levemente bajo cero que se esperan hoy en Chisinau a la hora del partido.

La calculadora del Betis para pasar no va sólo de números sino de sensaciones y de prestigio de un equipo que estaba en las previas de la competición entre los favoritos y se ve en una posición, vigesimosegundo, que no le corresponde. Observa al Chelsea o Fiorentina, otros de los gallos, en la zona cabecera y no hay más que buscar un defecto en la manera de plantearse la motivación de estos duelos. Por ello deberá meterle intensidad de principio a fin el cuadro bético para superar a unos moldavos que llevan semanas sin competir en su liga, ya finalizada la fase regular, y que su último encuentro fue hace dos semanas para la Conference.

Pitará el belga D'Hondt y en el Petrocub sólo se distingue una amalgama de jugadores internacionales moldavos con escasa valoración de mercado y mucha voluntad para lograr un punto en la Conference al empatar con el Istanbul Basaksehir y perder con el Rapid de Viena, Jagiellonia y Pafos. Cambiar la cara es clave para superar este duelo sin red para los verdiblancos.