El despertar de Rober González en Países Bajos: «Sólo faltaba encontrar mi sitio»

En los últimos años han sido bastantes lo jugadores que han debutado en el primer equipo bético. Uno de ellos es el extremeño Roberto González (Mérida, 2001). Procedente de la cantera del equipo emeritense, desde que llegó a la ciudad deportiva Luis del Sol fue una de las grandes apuestas del club. En el Betis Deportivo fue líder durante algunas temporadas tanto en Tercera División como en Segunda B, categorías ya extintas.

En 2021 Manuel Pellegrini le hizo debutar en Primera División y Rober empezó a entrar en los planes del primer equipo pero en el mercado invernal tuvo que marcharse cedido en busca de minutos. El verano de 2023 se marchó cedido al NEC Nimega de Países Bajos, donde se ha reencontrado con su mejor versión y está «contento», según relata para ABC de Sevilla.

Allí ha tenido que anteponerse a una barrera tan importante como es la del idioma, dado que nadie de sus actuales compañeros sabe comunicarse en castellano. A pesar de tener ofertas para quedarse en España decidió aceptar el reto de cambiar y probar en otra liga. Se decidió por esta opción porque creía que le podía venir bien para su estilo de juego: «Aquí hay mucho ataque, todo el mundo mira hacia adelante».

Rober es un jugador creativo, de los que no le quema el balón en el pie. En el NEC, y en su última etapa en el Betis, donde más ha jugado ha sido en banda derecha, a pie cambiado, pero él reconoce que se encuentra más cómodo en la zona central, sobre todo en su actual equipo, donde el mediapunta se mueve a banda y le deja ese espacio libre, según explica él mismo. Así, esta temporada ha conseguido anotar diez tantos con los nimegueses, su mejor cifra goleadora en el fútbol profesional.

En Países Bajos, el emeritense ha estado a punto de levantar la Copa del país. Su equipo llegó a la final pero finalmente el Feyenoord se acabó llevando el título. Además, en la Eredivisie se han terminado clasificando para disputar las rondas previas de la Conference League 24-25: «Hemos vivido todo el año con mucha ilusión. Sabemos que somos un grupo joven y que falta experiencia».

En el país centroeuropeo ya sabe lo que es ganar un derbi ante el Vitesse, al que le ganaron 0-3 en su estadio: «Es verdad que creo que al final el derbi de Sevilla es único en cuanto a todo, pero aquí también se vive de una manera espectacular y con una pasión inmensa». Un Vitesse que, por cierto, descenderá a Segunda División por una sanción que le ha restado 18 puntos y que ha abierto una campaña de recaudación de fondos para que empresas de la zona y aficionados le salven de la desaparición.

Cuando se marchó al campeonato neerlandés el pasado verano, amplió su vinculación con el equipo verdiblanco una temporada más, hasta final de la 2025: «Ellos sabían el nivel que podía dar, solo faltaba encontrar mi sitio». Este verano, si nada cambia, volverá a estar a las órdenes del técnico chileno del conjunto bético. Esto, si en las oficinas del NEC Nimega no deciden ejecutar la cláusula de compra que tienen sobre Rober.

El emeritense se ve capaz de competir por un puesto en el ataque verdiblanco: «Me considero una persona exigente y competitiva», confiesa el futbolista. De acabar teniendo la posibilidad de pugnar por una ficha en el Betis tendría que desbancar a Pablo Fornals, que fue importante en el segundo tramo de LaLiga. Además, haría lo propio con su amigo Rodri, con quien mantiene una estrecha relación desde que ambos eran pequeños.

Asegura que ve siempre los compromisos del conjunto de Pellegrini y ha estado al tanto de la actualidad bética desde Nimega, ciudad ubicada al este de Países Bajos, muy cerca de la frontera con Alemania: «Creo que están haciendo un gran año y que sin duda acabarán en Europa». Por último, asegura que desde el club están muy pendientes de él y que el feedback que recibe de Manu Fajardo y Álvaro Ladrón de Guevara es positivo.