Betis - Gent: No era el día para una derrota así ante su gente (0-1)

La primera parte del Betis fue seria, pero de más a menos. El conjunto verdiblanco se fue apagando en ataque poco a poco. No se fue yendo del partido ni relajando, puesto que compitió bien. Quizás viendo que, pese a los cambios en el once respecto al partido de ida, seguía siendo tremendamente superior y que el rival prácticamente ni cruzaba a campo contrario. Antony, que entraba en el once en lugar del tocado Bakambu, empezó bastante activo en ataque, pero fue perdiendo participación. Eso sí, los jugadores del Gent no sabían pararlo si no era a base de faltas Vitor Roque, voluntarioso y participativo, Chimy Ávila combinativo, Mateo superando en sumar al equipo a Altimira… Intentó rematar rápido el trámite el equipo dirigido por Manuel Pellegrini con llegadas peligrosas al área y alguna ocasión clara, pero el gol no terminaba de llegar.

Fue en los primeros 12 minutos de juego en los que el Betis buscó adelantarse en el marcador. Un cabezazo de Vitor Roque, que fue blando a las manos del portero Roef y un remate de Abde dentro del área tras un error en la salida del balón del equipo belga provocado por la alta presión de los verdiblancos, antecedieron a la mejor ocasión para los béticos en los primeros cuarenta y cinco minutos. Chimy Ávila botó un saque de esquina al corazón del área pequeña y Abde cabeceó muy bien abajo con mucha intención, pero el guardameta visitante sacó su mano derecha prácticamente a ras de hierba para evitar el 1 a 0 para el equipo bético.

El Betis mantuvo la seriedad durante todo el duelo, pero fue apareciendo cada vez menos en el primer tiempo en la zona de peligro visitante. Tanto fue así que después del único acercamiento del Gent, con disparo cruzado de Ito desde la frontal del área que se fue fuera tras un contragolpe de los flamencos, se escucharon algunos pitos en el Villamarín. El bético, más contento con su equipo después del triunfo en Gante y la victoria ante la Real Sociedad, 0-3 y 3-0 respectivamente, pobló en 51.510 espectadores las gradas del estadio heliopolitano y quería divertirse y celebrar algún gol.

En el segundo tiempo el guion no cambió demasiado. Sí la producción ofensiva del Betis, que fue menor incluso que en la primera mitad. Jugando con la amplia ventaja que había en el marcador desde el partido de ida, el equipo de Pellegrini contemporizó todavía más, pero cuando el técnico chileno movió el banquillo con un triple cambio antes de que se cumpliera la hora de partido, en el que dio entrada a Isco, Aitor y Cardoso, empezó a verse otra cosa sobre el terreno de juego del Villamarín. Isco hacía llegar a compañeros como Vitor Roque, Abde o el Chimy con ventaja hacia la portería contraria, pero estos no lo aprovechaban para marcar. En el minuto 63, Cardoso llegó con el balón a la línea de fondo y centró al segundo poste, donde el argentino remató de cabeza buscando el palo largo. El balón se marchó fuera. Después, en el 68, en un buen contragolpe verdiblanco liderado por Isco, el malagueño abrió a la derecha para la entrada del Chimy, quien le devolvió el balón en la frontal del área. El capitán bético controló la pelota pero se le quedó en la pierna izquierda y su disparo se fue demasiado alto por encima del larguero.

Pero a partir de esa jugada sí se notó algo de más relajación en general en el equipo bético. Pudo adelantarse el equipo belga en el minuto 76, pero Perraud, en una gran acción defensiva, taponó un disparo de De Vlieger que llevaba muchísimo peligro sobre la portería defendida por Fran Vieites. Luego se quedó con un jugador menos el Betis por la expulsión de Vitor Roque. El brasileño no tuvo su tarde. Muy voluntarioso, sí, y queriendo aportar, también. Pero no encontró el gol y sí una roja directa tras un pisotón a Brown en el minuto 83, una acción que tuvo que ser revisada por el árbitro Sylwestrzak en el VAR. Y para cerrar la tarde, el gol del propio Brown, en una desaplicación defensiva del Betis por la parte derecha. Desbordaron los belgas bien a Aitor y el lateral izquierdo del equipo visitante batió a Vieites, quien le dejó abierto el primer palo de la portería.

No fue la mejor forma de encarar un partido liguero tan importante como el del domingo en el Coliseum ante el Getafe, por la pelea europea en la clasificación de LaLiga, pero al menos el Betis, siguiendo con su irregular caminar en Europa en los últimos tiempos, cumplió y estará, gracias al resultado de la ida, en los octavos de final de la Conference League.