NFL | SUPER BOWL
El bueno, el feo y el malo: New England Patriots y New York Giants se miden en la XLVI Super Bowl
Tom Brady aspira a convertirse en leyenda ante el «hermanísimo» Eli Manning en un partido con tintes de revancha
Se abre el telón en Indianápolis del mayor deportivo del año en Estados Unidos. Llega la Super Bowl (00.00 horas, Canal+) que decide el título de la NFL y aparecen dos equipos que ya se enfrentaron cuatro años atrás: New England Patriots y New York Giants . Un partido con aroma a revancha y tintes de leyenda. [Diez claves de la Super Bowl]
Un gigante amenaza a Nueva York. El bueno de Tom Brady aspira a levantar su tercera Super Bowl y conquistar igualmente su tercer MVP en la mayor fiesta del «football» americano. Un nuevo asalto entre Nueva York y Boston, un duelo eterno que nació a orillas del río Hudson en el siglo XVI. El levantamiento dio paso a la unificación y la batalla se trasladó al terreno deportivo. Primero fueron los Red Sox y Yankees, luego Bruins y Rangers. Ahora, en la guerra del football es New England quien se enfrenta a los dos equipos neoyorquinos: Giants y Jets. [Los mejores anuncios que se emitirán durante el partido]
Apuestas y expertos dan como favoritos a los Patriots, pero los de Boston no las tienen todas consigo. A simple vista, los Giants son más asequibles que los Packers -eliminados en la ronda divisional- pero los neoyorquinos ya fueron su peor pesadilla cuatro años atrás , cuando fueron más gigantes que nunca para derrotarles en idéntica cita. Allí se plantaron los Patriots tras una temporada impoluta que acabó en cenizas. La revancha podría servirse en Indianápolis.
Eli se hace mayor
Ahora, como entonces, el «hermanísimo» Eli comanda a los Giants. Durante años a la sombra de Peyton, su hermano mayor, ahora es él quien acapara portadas y elogios. No ha sido fácil que la gente se tome en serio a Eli, el «niño mimado» de la NFL para muchos. Hermano de Peyton e hijo de Archie Manning, todavía se recuerda su negativa a jugar con los Chargers tras el draft de 2004. Los números tampoco le han acompañado. En 2010 fue interceptado en 25 ocasiones y sus estadísticas han permanecido en las cloacas del campeonato durante varias temporadas.
Eli, aficionado al karaoke y con un gran sentido del humor, ganó el anillo a los Patriots, pero ha sido esta temporada cuando se le ha comenzado a tomar en serio. Se hartó de las críticas , de los chascarrillo y comparaciones. Entonces dio un golpe sobre la mesa en una entrevista con la ESPN. Se incluyó en la lista de los mejores quarterbacks de la NFL, junto a su hermano -cuatro veces MVP de la temporada- y el propio Tom Brady. Tras una temporada irregular, su trabajo ha sido clave para que los Giants se metan en la gran cita del año. Una segunda Super Bowl le metería entre los grandes.
Brady, camino del mito
La historia es distinta para Tom Brady , quarterback de los Patriots. No lucha solo por conquistar su tercera Super Bowl, sino por igualar a su ídolo Joe Montana , un mito de este deporte. Pese a lo que pudiera parecer, su camino tampoco ha sido de rosas. Aterrizó en la NFL como 199 del draft , en sexta ronda, donde abundan los nombres que ni la afición es capaz de recordar.
De cuarto -y último- quarterback de los Patriots pasó a titular en septiembre de 2001 tras la lesión de Drew Bledsoe. Brady tomó las riendas del equipo para plantar al equipo en los «play offs». Se lesionó en la final de conferencia, pero regresó al equipo en una XXXVI Super Bowl donde explotó la estrella. Desde entonces, nadie se atrave a toserle. Dos anillos de campeón , dos MVP de la temporada y otros dos MVP en la gran final. Brady es el tipo perfecto del fútbol americano. Guapo, simpático y casado con la supermodelo Gisele Bundchen . Llama a sus compañeros de forma cariñosa en el vestuario y, sobre todo, odia perder.
Estrategas en la banda
La otra batalla se gestará más allá de la línea de banda, con dos enormes estrategas como Bill Belichick y Tom Coughlin . El primero, entrenador jefe de New England, podría sería como Lee Van Cleef en la cinta de Sergio Leone: el malo. Su talento está fuera de toda duda pero al tipo es dificil sacarle una sonrisa. Fue, además, tachado de tramposo al descubrirse que ordenó grabar los movimientos de los Jets -algo prohibido en la NFL- pero es, sin duda, uno de los mejores técnicos del campeonato. Será su quinta aparición con los Pats en una Super Bowl. Hasta ahora ha ganado tres de cuatro, ya que la de 2008 fue para unos Giants dirigidos -como este domingo- por Tom el «coronel» Coughlin.
Una máxima en el fútbol americano asegura que los equipos ofensivos vencen partidos, pero son las defensas las que ganan los campeonatos . De ser así el favoritismo de los Patriots se vería un tanto mermado, aunque las fuerzas estarán parejas a estas alturas de la temporada. Los Giants cuentan -enter otros- con Jason Pierre-Paul, Tuck y Umenyiora para frenar el ataque de New England, más sólido por aire y por tierra que el neoyorquino.
Las manos de Brady y Manning serán determinantes ante dos equipos con problemas en la línea secundaria . Como lo será Rob Gronkowski -que se recupera de un esguince en el tobillo- si finalmente consigue jugar. Sus gigantes manos serán todo un alivio para el quarterback de los Patriots, que le tiene como principal pareja de baile. Será la mejor baza para que el apuesto Tom Brady se convierta en leyenda. Necesitará el permiso del «ogro» Eli, verdugo cuatro años atrás.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete