Lili y Elsa, un sueño cumplido siete años después

Cuando Lily y Elsa se conocieron desconocían cuál iba a ser su futuro. Pero sí tenían clara una cosa: querían dedicarse juntas a cumplir su sueño: ser jugadoras profesionales de Poley playa. Lily y Elsa, Elsa y Lily son el complemento perfecto de un deporte de esfuerzo extremo , entrega total a cada jugada y pasión desmedida por acariciar el sueño eterno de todo deportista.

La mayor parte de la población desconoce la existencia del voleibol. Por ende, casi nadie conoce a dos chicas que acaban de hacer historia para el voley playa nacional: conseguir una medalla de bronce en un torneo internacional . Ahora mismo, Liliana Fernández Steiner y Elsa Baquerizo son terceras de Europa , con todas las consecuencias: los juegos Olímpicos de Londres están cada vez más cerca para la pareja española.

La historia de estas jóvenes promesas del deporte patrio comenzó hace 7 años en Tenerife. La aventura que ambas emprendieron a los 18 años , una desde Madrid y otra desde Benidorm, tiene su base en la fe ciega que ambas deportistas compartían por el voley playa. Una, estudiante de Pedagogía, la otra estudiante de Turismo, hacen de su pasión su profesión para hacer frente a un reto que está a la vuelta de la esquina. “El esfuerzo viene desde mucho más atrás que desde el año preolímpico. Viene desde que tomamos la decisión con 18 años de dejar nuestras familias , nuestros amigos, una vida que teníamos más o menos encaminada solo por el voley playa ”, comentaba Elsa en declaraciones recientes a ABC. “Desplazarnos a Tenerife, al Centro de Tecnificación Deportiva de Arona supuso entrenar mañana y tarde, tanto en la playa como en el gimnasio, además de compaginarlo con los estudios. Desde entonces nuestras vidas giran en torno al voley playa”.

La poca repercusión que este deporte tiene en España hace que su práctica y dedicación profesional sean tremendamente complicadas. Por ello, los jugadores que quieran construirse un futuro jugando al voley playa han de buscarse los apoyos suficientes que les permitan desarrollar su actividad de forma más o menos tranquila. Es lo que sufrieron en su propia piel Elsa y Lili. Ambas, en declaraciones a ABC, recuerdan cómo fueron sus comienzos. “Ahora que los resultados nos están llegando y está todo más o menos encauzado, no tenemos tantos problemas, pero al principio, que es cuando es más necesaria la ayuda, fue muy duro…un todo o nada. Pero teníamos claro lo que queríamos y cómo conseguirlo”, relatan.

“Los dos primeros años fueron duros, sin ningún tipo de apoyo. A partir del tercer año, conseguimos pequeños patrocinios , como el Hotel Royal, y colaboraciones como la que tenemos de Deporte Canario o de la Federación Española de Voleibol. Aunque el año pasado conseguimos firmar un contrato de patrocinio con Wild Wolf. Con eso, nos cubre el total de los gastos que tenemos a lo largo de la temporada, lo cual supone un gran alivio para nosotras, ya que hasta ahora el groso de los gastos los cubríamos con las ganancias de los premios y prácticamente se nos iba todo en los viajes”.

Aunque cada vez están más claras las opciones de acceder a una plaza en los Juegos Olímpicos de Londres , la lista no se cierra hasta el 21 de junio . Hasta ese día, Lili y Elsa tienen dos torneos puntuables: Moscú y Roma, dentro del circuito World Tour y que supondrán la prueba de fuego para la pareja española. Ellas lo tienen claro: “Si seguimos trabajando así conseguiremos quedar entre las 16 primeras y llevar a España por primera vez a unos Juegos Olímpicos”.