Pedro Marín, transfusión de esperanza en la apertura de Fallas
Comenzó la Feria de Fallas con un ambiente más que saludable en los tendidos, que se llenaron en casi su mitad. A la novillada de Los Chospes, que lució una excelente presentación, le faltó raza y ritmo en sus embestidas. Tercero y cuarto fueron los mejores, mientras que el sexto fue el más peligroso.
El pasado octubre a Pedro Marín le tuvieron que transfundir varios litros de sangre, debido a la grave cornada que sufrió en esta plaza. Aquel percance, que conmovió, le hizo acreedor a ser el primer torero contratado para esta feria. Ayer Marín inyectó una gran transfusión de esperanza a la afición de Valencia y salió a hombros. Muy aplomado y seguro, cuajó muy buenas series con la mano izquierda a su buen primero, mientras que supo sobreponerse a las muchas dificultades que le planteó su segundo. A ambos los despachó de buenas estocadas. Oreja y oreja.
La estancia en México le ha servido a Sergio Cerezos para coger oficio y mostrarse mucho más cuajado. Entendió muy bien a su distraído primero con la derecha, mientras que el fuerte viento no le dejó acoplarse al buen pitón izquierdo del cuarto. Palmas tras aviso y silencio tras aviso.
Sergio Serrano llevó a cabo una actuación seria y firme ante dos ejemplares a contraestilo. Silencio tras aviso y saludos.
Por otra parte, en Alicante, se lidiaron toros de Salvador Domecq. Julio Aparicio, oreja y silencio. Francisco José Palazón, oreja y silencio tras aviso.Rubén Pinar, oreja con petición y oreja.
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