El abogado Joaquín Moeckel renuncia a asesorar a la Unión de Toreros

La controversia creada con los derechos televisivos de los toreros, algo a lo que se ha sumado también la Unión de Criadores de Toros de Lidia, se encuentra con otro frente abierto, ya que el abogado sevillano Joaquín Moeckel, que desde hace siete años viene asesorando a los matadores de toros en diversas cuestiones de índole jurídica, ha presentado hoy mismo su renuncia a este cargo. El motivo, según ha precisado a ABC el propio letrado, que se muestra en desacuerdo con la forma de gestionarse los derechos de imagen de televisión, algo que ha producido una fractura entre los toreros.

Moeckel ha señalado que «La Unión de Toreros -que nació de la fusión de las asociaciones Protauni y Taura- se configuró con el objetivo de unir a todos los toreros, una unión que no existe hoy en día», toda vez que, ahora mismo, hay dos grupos, «el llamado G-10 -conformado por figuras del toreo- y el resto. No estoy de acuerdo con la forma de gestionar los derechos de imagen televisivos, sobre todo porque en el propio seno del G-10 también hay fracturas y unos van por una parte, según sus intereses, y otros por distinto camino».

Para el abogado sevillano, «tal y como está ahora la Fiesta, atacada desde muchos flancos, no es ni el momento ni el lugar adecuado para estas reivindicaciones», siendo de la opinión de que «no se está gestionando bien la crisis desde el sector de los profesionales del toreo». Señala, asimismo, que en estas negociaciones «no están participando todos los toreros sino sólo unos cuantos. Es por ello que no puedo seguir defendiendo unos intereses que, por lo que se ve, no son los mismos para todo el colectivo».

Joaquín Moeckel, que hace siete años llevaba el asesoramiento de Protauni para luego funsionarse esta asociación con Taura y crearse la Unión de Toreros, ha venido desarrollando una labor jurídica que ha sentado precedentes en cuestiones relacionadas con los contratos de los toreros y su defensa ante determinados abusos, entonces muy extendidos, de determinadas personas relacionadas con la Fiesta Nacional hacia los profesionales del toro.

A la renuncia de Moeckel le antecede la del también abogado y ganadero Javier Arauz de Robles, que igualmente se mostró en su momento en desacuerdo con la forma de actuar de los componentes de la asociación.

Esta dimisión se produce en un momento en el que existen bastantes problemas para conformar los carteles de las primeras ferias de la temporada -caso de Valencia y Castellón- por la cuestión de los derechos de imagen sobre los festejos televisados de las figuras del toreo que conforman el llamado G-10 y que lleva la empresa All Sport Media. Igualmente, esta circunstancia está afectando a las negociaciones de la contratación para la próxima Feria de Abril de Sevilla y ha hecho, por ejemplo, que la Feria francesa de Arles no cuente con la práctica totalidad, a excepción de José María Manzanares, de las figuras del toreo.