Hazte premium Hazte premium

Omara Portuondo, reina del bolero, se retira definitivamente de los escenarios por problemas de salud

La cantante cubana, de 94 años, sufrió un episodio de «fatiga y desorientación» durante un concierto de Barcelona y tuvo que ser evacuada después de la primera canción

Omara Portuondo: «A mis 91 años, solo quiero tranquilidad para la humanidad»

Omara Portuondo, duranten la presentación de un documental sobre su vida en el In-Edit de 2022 EFE

D. M.

Barcelona

La cantante cubana Omara Portuondo,reina del son y el bolero y emblema de Buena Vista Social Club, se retira definitivamente de los escenarios. A sus 94 años, Portuondo ha tomado la decisión después de su accidentado concierto en el Palau de la Música de Barcelona el pasado martes, cuando tuvo que abandonar el escenario después de la primera canción. Según algunas crónicas, un miembro de su orquesta se encargó de sacarla en brazos.

«Durante la noche de este dos de octubre, en el Palau de la Música de Barcelona, tras interpretar el clásico 'Quizás quizás' de Osvaldo Farrés, mostró signos de fatiga y desorientación, por lo que consideramos que lo mejor era retirarla del escenario», explicó ayer a través de un comunicado el hijo y representante de la cantante, Ariel Jiménez Portuondo.

«Teniendo en cuenta este hecho, consideramos oportuno anunciar el retiro definitivo de Omara de los escenarios durante la presentación en Budapest el próximo domingo, donde se le hará un homenaje por parte de la orquesta y el público asistente», añadió Jiménez Portuondo.

«Tengo claro que estoy haciendo la gira de despedida, pero es cierto que cantaré hasta que la vida me lo permita, que pueda grabar en un estudio o que algún artista me invite o que alguien me pida concierto privado. Seguiré cantando hasta que me quede sin la voz o yo me tenga que ir. Las giras con mi vida y esta durará tres años para poder recorrer muchos países y ciudades, pero también lo dirá mi salud y mi edad«, aseguró la propia Portuondo en 2022, cuando pasó por el escenario de los Veranos de la Villa a ritmo de bolero y chachachá.

El momento ha llegado y Portuondo se va, por lo menos de los escenarios. En Budapest, matiza su hijo, ya no cantará, sino que recibirá el cariño y el aplauso. «Luego de esto, y por las razones que compartimos antes, seguirá ensayando y grabando desde su estudio en casa o participando en homenajes y encuentros con el público que la quiera agasajar, solo en la medida en que su salud y disposición lo indiquen». En 2023, año en que ganó un Grammy al mejor álbum de música tradicional, la diva cubana ya pasó por el festival de Cruïlla con apenas un hilo de voz y una leyenda aposentada sobre clásicos como 'Drume negrita', 'Dos gardenias' y 'Solamente una vez'.

Anteanoche, después del concierto 'interruptus' de Barcelona, Portuondo quedó bajo los cuidados y supervisión de su médico personal, quien «desde hace más de 20 años la acompaña a cualquier lugar de Cuba y el mundo donde se presente». Ahora, asegura Jiménez Portuondo, «está bien».

Algunos asistentes, como la cantaora Mayte Martín, compartieron a través de las redes sociales su enfado y estupefacción ante lo ocurrido en el Palau de la Música. «Se faltó a la ética y a la dignidad de una persona enferma y vulnerable y se expuso a un ser humano de 93 años a una situación denigrante. Anoche fui testigo de uno de los momentos más tristes de mi vida (...). Omara Portuondo es una Diosa que ha regalado a la música momentos gloriosos, y se le debe un respeto al que anoche se le faltó gravemente», denunció Martin en su cuenta de Instagram.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación