Muere Norman Dilworth, escultor entre la geometría y la naturaleza
Figura relevante de la abstracción geométrica inglesa, de 1982 en adelante eligió el continente (primero Ámsterdam, y luego Lille) como su tierra de residencia, conciliando cada vez más construcción y libertad, y prestando gran atención a la relación arte-naturaleza
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Natural de Orrell, Lancashire, donde sus padres eran profesores, ha fallecido en Lille, a los noventa y dos años, el escultor inglés Norman Dilworth. Fue en su ciudad natal donde nació su vocación, y donde inició, en 1949, sus estudios artísticos, pasando en 1952, a la londinense Slade School of Art. Entre 1956 y 1957, gracias a una beca amplió estudios en París, donde frecuentó aGiacometti. Durante la década siguiente, ya retornado a Londres, evolucionó hacia la abstracción geométrica. Clave para él fueron las visitas a Signals, el peculiar espacio londinese donde exponían Soto, Cruz-Díez, Takis, y sobre todo los brasileños Lygia Clark, Oiticica y Mira Schendel. También la amistad con Kenneth Martin, y el francés Morellet.
La componente lúdica del trabajo de segundo, y en general del GRAV parisiense, impactó al escultor, que siempre buscó un equilibrio similar entre geometría y humor, entre ortogonalidad (sus primeros relieves eran casi minimalistas) y libertad e incluso azar, cultivando a veces un cierto barroquismo, patente en sus dibujos en el espacio en que combina madera y acero, en sus 'wall drawings' o en sus collages. Presente en colectivas tan significativas como 'Constructions' (Axiom Gallery), 'Stucture 66' (Arts Council, Cardiff) o 'Experiment in Form' (Grosvenor Gallery), las tres en 1966, fue compañero de viaje del grupo Systems, con varios de cuyos miembros coincidió en la cuadra de la Lucy Milton Gallery.
Obras más tardías
Entre 1982 y 2002 (año en que expuso en el Stedelijk), Dilworth residió en Ámsterdam, realizando numerosas esculturas monumentales en ciudades holandesas. En 1980, ya se había posicionado con fuerza en la escena artística continental gracias a 'Pier + Ocean: Construction in the Art of the Seventies', colectiva comisariada conjuntamente por él y el cinético alemán Gerhard von Graevenitz para la Hayward Gallery de Londres y el Kroller-Muller Museum de Otterlo, y en la que participaron geómetras de distinto pelaje, incluidos minimals, pero también un pop como Ruscha, poveras, y cultivadores del 'land art'. Precisamente con esta última tendencia cabe relacionar algunas de las obras más tardías del escultor, que con los años se volvió cada vez más proclive al diálogo de sus piezas con la naturaleza.
Desde 2002 ha vivido Dilworth en Lille, ciudad natal de su segunda mujer, la fotógrafa Christine Cadin. En 2007, celebró su mayor retrospectiva hasta la fecha, que tuvo por marco el Musée Matisse de Le Cateau-Cambrésis, la ciudad natal del gran fauve. Siempre en clave francesa, el catálogo de su individual 'Time and Tide', celebrada en 2017 en la Redfern Gallery de Londres, lleva un prólogo de Serge Lemoine. En 2019, obtuvo un premio alemán: el Peter C. Rupper, con el que desde 2008, en que lo obtuvo precisamente Morellet, Würzburg honra a un representante del arte concreto europeo.
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