El desconocido hallazgo de 38 soldados de Napoleón en el castillo de Buitrago del Lozoya
Los arqueólogos relacionan los restos con la Batalla de Somosierra de 1808
Los esqueletos de Atocha proceden de una carga de caballería
![Investigadores desenterrando los restos de soldados napoleónicos en Buitrago del Lozoya](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2024/11/13/02ADSC05370-R3QqYjpVSFXd7b9xmpWKvCL-1200x840@diario_abc.jpg)
«Hermano mío. Hoy hubo un asunto, un cuerpo de 9.000 españoles, con 16 piezas de cañón, defendieron Somosierra». Así comenzaba la carta que Napoleón escribió a José Bonaparte el 30 de noviembre de 1808, contándole la célebre batalla librada en la sierra ... madrileña en su avance hacia Madrid. El emperador francés redactó su misiva en Buitrago del Lozoya, tras vencer a los españoles gracias a la famosa carga de la caballería polaca.
En esta villa fortificada Napoleón pasó al menos dos noches y dejó una guarnición, que comenzó a construir un fuerte para reforzar sus murallas. A unos 80 kilómetros de Madrid, Buitrago era una parada fija en la ruta entre Bayona, París y Madrid en la Guerra de la Independencia. Por la localidad pasaron Carlos IV y Godoy, así como el futuro Fernando VII o el popularmente apodado como Pepe Botella y allí se acantonaron las tropas francesas durante meses, antes de la derrota francesa en Bailén. Y tras su nueva toma por Napoleón.
Las estancias del ejército napoleónico en Buitrago son bien conocidas, no así los vestigios que los arqueólogos hallaron en el castillo de los Mendoza (siglo XIV-XV) durante los últimos trabajos de restauración. Juan José Cano, fundador de Reno Arqueología, cuenta que encontraron 38 esqueletos de soldados napoleónicos en cinco fosas situadas junto a la muralla este.
Aún conservaban los trozos de tela y de cuero de sus vestimentas, algún anillo, hebillas de cinturón y multitud de botones de hueso y de metal, que fueron claves para datar los enterramientos. Los soldados de Napoleón llevaban grabados en los botones de sus casacas el número del regimiento al que pertenecían y en Buitrago «encontramos botones del 63º y del 94º de infantería de línea», explica Cano.
La disposición de los restos -unos caídos sobre otros con posturas forzadas- indicaba que habían sido arrojados a los hoyos, no depositados en la sepultura. Su estudio antropológico reveló que eran «soldados jóvenes, de entre 25 y 30 años y uno de ellos, por ejemplo, tenía huellas de haber muerto por un sablazo asestado desde arriba», continúa el arqueólogo. Entre los cerca de 150 objetos asociados que se recuperaron también figura un arma en mal estado, posiblemente una bayoneta, que como el resto de materiales se depositó en el Museo Arqueológico de la Comunidad de Madrid, en Alcalá de Henares.
Enterrados a la vez
«Sabemos que fueron enterrados todos a la vez», indica Cano, pues las fosas se cavaron «en los mismos rellenos históricos». Dado su número, los investigadores relacionan sus muertes con la batalla de Somosierra, «el hecho de armas más importante que se produce en la zona en ese periodo», aunque no descartan otros escenarios. Quizá fueron víctimas de Juan Martín El Empecinado, muy activo con su partida en la zona en 1812. Con unos 400 hombres, el guerrillero atacó en julio de aquel año a un convoy de 2.400 soldados del general Hugo (padre del escritor Víctor Hugo) y causó numerosas bajas en las filas francesas.
![Imagen principal - El desconocido hallazgo de 38 soldados de Napoleón en el castillo de Buitrago del Lozoya](https://s3.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2024/11/13/DSC01236_20241113122818-U84782671751sHJ-758x470@diario_abc.jpg)
![Imagen secundaria 1 - El desconocido hallazgo de 38 soldados de Napoleón en el castillo de Buitrago del Lozoya](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2024/11/13/CROQUISGENERALINDIVIDUOS-U41201873427irY-464x329@diario_abc.jpg)
![Imagen secundaria 2 - El desconocido hallazgo de 38 soldados de Napoleón en el castillo de Buitrago del Lozoya](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2024/11/13/13I3301DSC06068-U25115067870ZgS-278x329@diario_abc.jpg)
Los restos óseos también podrían pertenecer a soldados caídos durante la retirada definitiva del ejército napoleónico. Quizá los franceses los abandonaran o los enterraran con prisa. No creen, sin embargo, que murieran por enfermedades infecciosas. «Cuando hay algún tipo de epidemia también se entierran así, rápidamente, pero se echa una capa de cal por encima y en la excavación no encontramos restos de cal», explica Cano.
El antiguo Hospital de San Salvador de Buitrago, creado por el marqués de Santillana en 1455 para pobres y transeúntes, fue utilizado por los franceses durante la invasión napoleónica como hospital de sangre y hasta dejaron algunos soldados en él cuando se retiraron.
«Hay una carta curiosa del alcalde de Buitrago de la época que escribe a Madrid quejándose de que los franceses se habían ido, dejando a 30 o 40 personas, y preguntando quién pagaba el mantenimiento y la cura de aquellos hombres», relata el director de Reno. Los sepultados en las fosas no parecen provenir, a juicio del arqueólogo, de este hospital ya que fueron enterrados al mismo tiempo y vestidos con sus uniformes.
«Creo que los restos están más relacionados con la batalla de Somosierra, o con alguna otra escaramuza que hubo después de la batalla», comenta Cano.
![La batalla de Somosierra, por Stanisław Kaczor Batowski (1911)](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/cultura/2024/11/13/Somosierra_1911-U58041753237YpG-760x427@diario_abc.jpg)
Para el arqueólogo Pablo Carrasco, doctorando de la Universidad de Barcelona especializado en este periodo histórico, «tendría sentido que se correspondiera con la campaña que llevó a Napoleón a la conquista de Madrid tras Somosierra», que «sea un enterramiento realizado después de la batalla».
Según explica, «los regimientos de infantería de línea del 63º y 94º llegaron exhaustos» a Somosierra. Ambos pertenecían a la división del general Villatte y se habían enfrentado a los ejércitos españoles en Balmaseda (País Vasco) y en Espinosa de los Monteros (Castilla y León), apenas unas semanas antes. En esta última batalla, las fuentes refieren que el 63º sufrió numerosas bajas (120 soldados y oficiales) y el 94º destacó en la acción, «ergo sufriría también muchas bajas», anota Carrasco.
Sin descanso, la división del general Villatte inició a continuación una larga marcha para unirse al ejército de Napoleón y aunque los regimientos 63º y 94º no llegaron a luchar en la batalla de Somosierra, el investigador cree que quizá los enfermos y heridos murieron en el trayecto o llegaron extenuados a Buitrago, donde fallecieron.
«Godoy es un gilipollas»
En la localidad madrileña se han hallado más restos curiosos de las guerras napoleónicas. En un esquileo adosado al castillo, los arqueólogos de Reno descubrieron una serie de grafitis realizados por soldados franceses. «Tenemos uno con la cara de Fernando VII, otro que dice en francés que 'Godoy es un gilipollas' y dibujos de gallos, símbolo de Francia», relata Juan José Cano. Dado el estado ruinoso del edificio, fueron arrancados de las paredes de esta casa donde se esquilaba a las ovejas para asegurar su conservación.
Cano publicará un artículo sobre estos descubrimientos el año que viene en la revista 'Estudios de Historia y Patrimonio' de Colmenar Viejo.
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