LIBROS
Álvaro Pombo, la guerra civil concreta y familiar
NARRATIVA
No relata la contienda como fascismo contra comunismo, la representa como drama entre los Pombo Ybarra y Pombo Caller
Por fin se ha decidido Álvaro Pombo a trazar un retrato de su familia, los Pombo de Santander, y acercarse a ellos buscando una verdad que no estuviera sometida a las exigencias de la novela ficcional. En su larga trayectoria de novelista podría decirse ... que no ha dejado nunca de hablar de su familia a través de personajes en los que podría haberse visto reflejadas casi siempre mujeres de la alta burguesía, su abuela, o amigas de sus tías, metamorfoseadas en otros nombres.
Pero en esta novela el protagonista se llama como él, Álvaro Pombo y fue su tío carnal, y el otro gran protagonista de la novela, su abuelo Cayo Pombo Ybarra, quien quizá sea el que mayor interés tenga como personaje, complejo en su irresoluta dignidad contradictoria, la de quien no está en condiciones de elegir porque los principios morales e ideológicos de su clase se han vuelto inservibles en una España en la que la racionalidad republicana y democrática que abraza y que ve encarnada en Manuel Azaña, dejó de ser una opción posible, sustituida por la doble y pasional irracionalidad de los ideales falangistas y de los milicianos comunistas.
NOVELA
'Santander, 1936'

- Autor Álvaro Pombo
- Editorial Anagrama
- Año 2023
- Páginas 329
- Precio 19,90 euros
Hubo un momento el de Marañón, Ortega, Unamuno, el de Azaña, que pudo haberse construido como regenerador y que no tuvo juventud que lo heredara, pues los jóvenes ardían en pasionales ideales de camorra. Eduardo Mendoza lo mostró también en ‘Riña de gatos’. En la parte final de la novela ‘Santander, 1936’ hay enfrentamiento de El Toste y Alvarito, o cuando el Rubio obliga a Elena a que deje de servir en casa de los Pombo. Los que habían pescado juntos, o los que se respetaron antaño, habían visto perturbada toda posible relación o diálogo.
El Pombo filósofo, reflexivo, comparte territorio con un Pombo apiadado, comprensivo
La Guerra Civil de 1936, eso enseña esta novela, no fue solamente una abstracta lucha de los dos grandes movimientos fascista y comunista, fue cosa de las provincias y de los pueblos, fue cosa de conocidos concretos que dejaron de hablarse. Álvaro Pombo escritor ha abandonado la posibilidad de ofrecer una guerra civil desde arriba, de fascismo contra comunismo, para verla representada en una tragedia familiar, la de los Pombo Ybarra y Pombo Caller.
Poético general
La imagen de la guerra es ofrecida de manera tan directa que la emoción aflora al final como en ninguna otra novela de Pombo, cuando retrata las víctimas inocentes, idealistas jóvenes como Wences y Alvarito conversando en la bodega del barco que era su cárcel y fue la urna del segundo de ellos. A algunos puede parecer exagerado que funda el símbolo de Federico García Lorca y el de su tío Álvaro Pombo, falangista. Pero lo mejor que puede decirse de esta novela es que cuando el lector llega a esa analogía no la siente disparatada; ha sido forzada, sí, pero la acción que la trama de los hechos ha ido construyendo precipita la conclusión de que resulta plausible. Es la condición del verosímil. A la literatura, esa es su grandeza, le corresponde decir lo general a través de lo particular.
Pombo novelista ha sabido urdir una historia en la que lo particular familiar termina siendo representativo y por tanto poético general. Ha construido una novela pedagógicamente impecable para cifrar por qué no fue posible la paz ilustrada y laica, sustituida por el fervor religioso de causas cainitas como la estalinista y fascista.
Pedagógicamente impecable para cifrar por qué no fue posible la paz ilustrada y laica
No resulta casual que sea sobre todo una novela de diálogos, entre Cayo Pombo y su hijo Álvaro, entre los dos hermanos Pombo Ybarra, y a través de las cartas el imposible diálogo de Álvaro con su madre, Ana, que huye a la vida moderna de la moda parisina. Diálogos en que el estilo de Álvaro Pombo muestra su lado mejor: la reflexión, el intento de explicar los movimientos de cada una de las criaturas, diciendo su ser más hondo, incluso el que no conocían y que le muestran sus interlocutores. El Pombo filósofo, reflexivo, comparte territorio con un Pombo apiadado, comprensivo, conmocionado frente a las víctimas jóvenes de la pira cainita.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete