«¿Un Oscar yo? ¿Hay alguno al actor más atractivo?»
Harrison Ford desenfunda aún veloz en «Cowboys & Aliens»

Confirmado: el western vive un momento, si no de gloria, sí de efervescencia y renovación. Los Coen consiguen una de las mejores películas del año con el remake de «Valor de ley», Mateo Gil hace lo propio con «Blackthorn», González Iñárritu prepara otra de vaqueros, «The revenant»... e incluso el jueves que viene el legendario poblado de Tabernas acoge el Almería 2011 Western Film Festival. Pero nada comparado a una del oeste en clave de ciencia-ficción dirigida por Jon Favreau («Iron Man») y con un Harrison Ford que vuelve a coger el sombrero y el fusil como en su juventud (¿alguien recuerda «El rabino y el pistolero», allá por 1979?).
–¿Por qué se aventuró con un western?
–Lo estaba deseando desde hace muchísimo tiempo y este era perfecto, muy a la antigua usanza. A mi estilo.
–¿Qué pensó cuando leyó el título del filme? ¿No le asustó un poco?
–Bueno, al principio no sabía a qué se refería, no tenía idea si se trataba de una comedia, de una película «pegajosa» o de algo más interesante. Hablé con el director, y eventualmente con Daniel Craig, y con la ayuda de unos dibujos me explicaron que iba a ser un filme muy ambicioso. Y acepté.
Abuelito dime tú
–¿Cómo desarrolló su papel de «abuelo gruñón», todo un rol clásico del género?
–¿Abuelo? Vaya, muchas gracias. En fin, no me molesta tu pregunta porque entiendo que estoy envejeciendo y que mi personaje aparece con frecuencia en estos filmes. Solo puedo decir que tengo suerte porque a mi edad puedo seguir trabajando. Con eso respondo a tu pregunta.
–¿...?
–Bueno, también te diré que mi personaje es algo más que un simple viejo gruñón, sino un hombre que evoluciona a lo largo de la historia. No es para nada un estereotipo. Para mí un personaje de estas características, que no es un líder que siempre busca la simpatía del público, es sensacional porque me permite modificar mi sello de interpretación.
–¿Cómo es Jon Favreau?
–Muy inteligente. Sabe cómo dirigir una película de este calibre, venía con los deberes hechos. Es un tipo práctico, simple, pero con la profundidad necesaria para desarrollar este filme, incluso añadiendo ideas filosóficas, creando mitos, dando forma a una historia con vaqueros y extraterrestres, que no es fácil. Como también es actor, conoce los resortes de nuestro oficio, como no volvernos nerviosos hablando de interpretación. Lo peor que un director puede hacer con un actor es decirle cómo debe actuar.
–Sí, es cierto que el vestuario siempre me ha resultado muy útil como modo de expresión de un personaje, y me suelo preocupar mucho de cómo voy a estar vestido dentro de tal o cual papel. Afortunadamente, en mi carrera siempre he trabajado con gente dispuesta a una colaboración mutua. Aquí, he contado con Mary Soupfis, maravillosamente capaz a la hora de diseñar y, al mismo tiempo, desarrollar la imagen del personaje.
–¿Cree que un western puede triunfar en la taquilla hoy por hoy?
–Bueno, no veo por qué no, aun con este clima tormentoso que estamos viviendo. Sin duda tiene que ser un filme con un gran guión, una gran producción, inteligente y visualmente interesante para el público. Hoy en día no se puede ir con una idea genérica porque te estrellas. Pero tampoco es posible predecir el éxito de ninguna película, ni su fracaso solo porque sea de un género determinado. Y por mucho que yo quiera hacer películas que triunfen en taquilla, como nada se puede adivinar, elijo hacer cualquier rareza que me ofrezcan. Se hacen muy pocas películas puras.
Éxitos y no tanto
–Sin embargo, el nombre de Harrison Ford siempre ha sido un seguro de vida en taquilla, ¿no?
–¿Qué puedo decir? Sin duda es útil para mí que algunas de las películas que he hecho, sobre todo las veraniegas, hayan sido muy exitosas y me hayan convertido en un actor muy popular. Pero, ojo, si solo quieres llegar a un sector de la audiencia es el camino más corto para convertirte en un perdedor.
–¿Le asusta el fracaso?
–Hoy en día todos hemos sufrido algún contratiempo en taquilla. La industria del cine no es tan fuerte como solía ser en el pasado, y el público tiene muchos medios para ver una película, ya no necesitan levantar su trasero e ir a una sala. Pero nosotros seguimos necesitando su presencia en las butacas, al menos el fin de semana del estreno. Hace falta arriesgarse, tanto ellos como nosotros.
–¿Y cuál ha sido la decisión más valiente que ha tomado en su carrera?
–No trato de tomar decisiones valientes sino inteligentes. A mí no me mueve el coraje sino mi instinto dentro de este negocio del cine. Me guío por mi juicio, pienso mucho con quién quiero pasar tres o cuatros meses de mi vida trabajando, y también me obsesiona poder representar personajes diferentes a los que he hecho anteriormente. No es necesario ser valiente para ir por el buen camino en este oficio.
Carpintero antes que icono
–¿Alguna vez su buen juicio estuvo a punto de jugarle una mala pasada?
–Sí, con «American Graffiti». Estuve muy cerca de no rodarla, no quería hacerla por nada del mundo. Cuando me la ofrecieron pregunté cuánto pagaban... la vida era muy simple para mí en ese tiempo. Me dijeron que 450 dólares a la semana. Les contesté que si se habían vuelto locos o estaban bromeando, porque por aquel entonces era carpintero y ganaba casi el doble. Así que les colgué el teléfono. Pero me volvieron a llamar una hora después y esta vez era George Lucas, que me dijo que habían reorganizado el presupuesto y habían conseguido más dinero para mí. Le pregunte: «¿Cuánto?». Y me dijo: «500 a la semana». Entonces yo le contesté: «Hecho» (risas). Siempre ha sido muy persuasivo.
–Por cierto, ¿sigue dándole a la carpintería?
–Desde luego, estoy ayudando a construir una nueva casa para mi familia, aunque principalmente lo que hago es supervisar la construcción.
–A pesar de haber intervenido en algunas de las películas más míticas de la historia del cine («Star Wars», la saga «Indiana Jones», «Blade runner»...), la Academia aún no le ha reconocido. Si pudiera ganar un Oscar, ¿en que categoría le gustaría más?
–¿Un Oscar yo? ¿Tienen uno al actor más atractivo? Personalmente no me interesan los premios. Prefiero ganar dinero con lo que hago y tener tiempo libre para pasar con mi familia. Como te he dicho, no me siento por naturaleza inclinado hacia el tipo de interpretaciones por las que se suele conseguir un Óscar. No tengo expectativas de ganarlo, de verdad. En cuanto a esas películas que mencionas, lo más importante siempre era la historia, y no el personaje. Yo me lo encontraba todo hecho.
Cuestión de magia
–Hablando de contar historias, ¿cree que internet puede poner en peligro al cine, igual que ocurrió hace décadas entre la televisión y la literatura?
–Yo pienso que no hay una manera más poderosa de introducirse en la cabeza de alguien que a través de las palabras o las imágenes. Eso nunca cambiará, aunque hay otras formas de diseminar tal contenido, e internet es una de ella. Personalmente creo que no existe nada más mágico que ir al cine. Cuando un grupo de personas comparten las mismas experiencias en una gran habitación oscura es algo único.
–Para terminar, una duda que corroe a muchos fans: ¿hay algún nuevo Indiana Jones en el horizonte?
–No lo sé. Yo lo haría encantado si todos estamos de acuerdo y decidimos que hemos encontrado el guión adecuado. George dice que está trabajando en una idea, pero ya se sabe que es bastante lento y no creo que tenga mucha prisa. Su hipoteca ya está pagada.
«Cowboys & Aliens»
Director: Jon Favreau. Intérpretes: Harrison Ford, Daniel Craig, Olivia Wilde. Nacionalidad: EE.UU., 2011. Duración: 118 minutos. Web: www.cowboysandaliensmovie.com . Hoy viernes 2, estreno.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete