La barbitúrica de la semana
Las piedras perforadas de la literatura
El editor Jorge Herralde rinde homenaje a Roberto Calasso en un libro publicado por Anagrama

Editar libros supone pensarlos, entenderlos. Darles un sitio en el mundo o devolvérselo. Al recibir el premio Formentor, Roberto Calasso se preguntó hasta qué punto todo puede ser considerado literatura. En su discurso de aceptación, que tituló ‘Piedras perforadas de la literatura’, el ... escritor y editor afila el canto de la duda: ¿es todo literatura o es la literatura un todo? Para contestar a esa pregunta cita el ‘Satapatha Brahmana’, y llega a la conclusión de que, como los ladrillos del altar védico del fuego, lo literario se abre paso como el aliento encuentra su camino dentro del cuerpo. «Es la irrupción del vacío en medio de la plenitud uniforme».
Así queda recogido en el texto que ahora la editorial Anagrama incluye en el libro ‘Para Roberto Calasso’ , un homenaje editado por Jorge Herralde y que contiene ensayos de Gustavo Guerrero, Basilio Baltasar, Edgardo Dobry, Yasmina Reza y Carlo Feltrinelli. Aunque laudatorias,e incluso marcadas por el tono ceremonioso de las palabras dichas en público, las páginas de este volumen completan y colocan en contexto, mejor dicho, iluminan, la importancia de Roberto Calasso dentro de la concepción del libro, entendiendo por tal un objeto vivo.
Gustavo Guerrero describe al fundador de Adelphi como pieza modernizadora y fundamental del engranaje literario al que contribuyó como editor. Los autores no escriben libros, escriben textos que los editores convierten en objetos impresos, cita Guerrero. Calasso entiende la edición editorial no como un proceso industrial, sino de creación. Para Calasso, la editorial ha de ser concebida como una obra. «Traten de imaginar una editorial como un único texto formado no sólo por la suma de todos los libros que ha publicado, sino también por todos sus otros elementos consecutivos». Por eso, «un libro equivocado en un catálogo es como un capítulo equivocado de una novela, una mancha en un cuadro». La mirada de Calasso se abre paso como el aliento lo hace en el cuerpo y el fuego perfora las piedras. Las piedras, en este caso, de la literatura.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete