El 2024, año decisivo para la reunificación de los mármoles del Partenón en Atenas

Durante la entrevista, Mendoni afirmó que Grecia está dispuesta a enviar antigüedades al Museo Británico si éste envía a Atenas las obras de arte esculpidas por el maestro Fidias hace más de 2.500 años.

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Tal y como había adelantado ABC el pasado 27 de noviembre, las posturas entre Grecia y el Museo Británico para la reunificación de los mármoles apuntaban a un intercambio cultural a través del cual las esculturas, expoliadas hace más de 200 años por Lord Elgin, regresarían a Atenas, mientras que otras antigüedades griegas viajarían a Londres para exponerse en las salas de la institución británica.

Las salas del Museo Británico «nunca estarán vacías», declaraba Mendoni durante la entrevista al diario británico. «Nuestra posición es clara. En caso de que las esculturas se reúnan en Atenas, Grecia estaría dispuesta a organizar exposiciones periódicas de antigüedades importantes en Londres«, desprendiéndose de algunos de los tesoros arqueológicos que custodian sus museos estatales para «llenar el vacío» que dejarían los mármoles del Partenón, añadía.

Según Mendoni, las antigüedades griegas enviadas a Londres «no solo llenarían el vacío, si no que otorgarían un nuevo atractivo al Británico y que, con toda seguridad, atraerán al público».

En este sentido, cabe destacar que uno de los argumentos que Londres siempre ha esgrimido para no devolver las obras maestras de Fidias a Atenas es la supuesta universalidad del Museo Británico, donde se exponen y custodian piezas que abarcan millones de años y pertenecen a culturas de todo el mundo, mientras que el Museo de la Acrópolis de Atenas cuenta solo la historia del monumento en su contexto histórico y geográfico.

Esta nueva vía para la negociación otorga a Londres dos oportunidades: por un lado, la de demostrar que esta premisa de que el Británico tiene una vocación universal es real y no una simple exclusiva para no devolver los mármoles; mientras que por otro, supondría una ocasión de oro para convertir la institución en un auténtico museo ecuménico donde, periódicamente, se expondrían grandes tesoros de la Antigüedad.

Tan solo 24 horas después de las declaraciones de Mendoni, George Osborne, director del Británico, dijo estar a favor de la propuesta helena y que lo ideal sería llevar a cabo un acuerdo por el que Londres y Atenas compartieran los mármoles porque no desean «devolver, de forma permanente, partes importantes de la colección». «Compartir las obras nos ha llevado a esto que tenemos ahora: una catástrofe que provocó la mutilación del monumento. Lo que hay que hacer es reparar esa tragedia y que los mármoles se vuelvan a reunificar en Atenas.

En su intervención, Osborne lanzó un dardo envenenado a Sunak, recordándole que la decisión final sería tomada por el Museo Británico, con o sin apoyo del Ejecutivo.

Por su parte, el Británico, con ayuda de las nuevas tecnologías, siempre podrá contar con reproducciones exactas de los mármoles», opina la jurista y directora del Organismo de Propiedad Intelectual del ministerio de Cultura de Grecia, Irini Stamatuli. «Nosotros estamos compartiendo ya los mármoles. Una parte está en Atenas y la otra en el Museo Británico», señala Tití, quien es de la opinión que Osborne, con esta propuesta, lo que pretende es que Grecia tome de nuevo la palabra y que no se podría considerar una devolución de las obras maestras de Fidias.

Stamatuli considera que las declaraciones de Osborne suponen un avance relevante en un posible acuerdo. «Hasta ahora Reino Unido se había sentado en la mesa de negociaciones solo porque una resolución de la Unesco le obligaba. Londres se ha quedado acorralado por su propia narrativa, que se ha vuelto contra ellos como un bumerán. Las reclamaciones de Grecia son justas y Osborne lo sabe y ha entendido que el asunto de los mármoles se está enquistando y quiere darle una solución más pronto que tarde», añade Stamatuli.

Durante la entrevista, Mendoni también respondió a la temida pregunta sobre si Grecia llevará el caso de la reunificación de los mármoles ante la Corte Internacional, a lo que la ministra respondió que en este momento Grecia no se plantea esta opción, y afirmó que el Gobierno heleno seguirá aprovechando «plenamente» las posibilidades que ofrecen el diálogo y la diplomacia cultural. «Si no fuera optimista, no estaría trabajando con fervor y fe por la causa nacional de reunir las esculturas del Museo de la Acrópolis de Atenas», añadió Mendoni.

En este sentido, la jurista experta en derecho internacional y de patrimonio histórico, Catherine Tití, coincide con Mendoni en que Grecia debería agotar primero la vía del diálogo antes de elevar el asunto a los tribunales porque, aunque haya jurisprudencia en casos similares, «lo cierto es que en un juicio pueden pasar muchas cosas y no necesariamente favorables para Grecia. Lo mejor para nuestro país en este momento, es continuar con las negociaciones», apunta Tití.

En la primavera de 2022, el Instituto de Arqueología Digital de Reino Unido, escaneó las esculturas del Partenón conservadas en Londres tras conseguir permiso del Británico. En este punto de las negociaciones, la creación de las réplicaspodría ser la clave a la hora de poner fin al rompecabezas de la repatriación de los mármoles, ya que las copias exactas podrían ocupar el lugar de las originales.

«Un museo ecuménico, si realmente tiene vocación de ello, cuenta hoy en día con miles de recursos tecnológicos para poder ejercer dicha función sin necesidad de perpetuar las malas praxis carentes de ética. Las salas del Británico no se quedarán nunca vacías», recalca Stamatuli.