Una recepción sin grandes sorpresas de estilismo

Los Reyes han congregado a la sociedad palmesana esta tarde noche del jueves 7 de agosto en el Palacio de Marivent. En su primera recepción desde la Proclamación de Don Felipe, han organizado un acto sencillo con el que han mostrado su apoyo al turismo balear. Han asistido personajes clave de la cultura, el deporte, la política y la economía de las islas. Con una reunión informal, en el que los asistentes han permanecido de pié en todo momento, se ha desarrollado una velada en la que fomentaba la comunicación entre todos los asistentes.

Don Felipe y Doña Letizia, acompañados de la Reina Sofía, han recibido a los invitados en el patio central. La Reina Sofía ha tomado un segundo plano al saludar tras los Reyes. Doña Letizia ha repetido el vestido blanco ceñido con escote asimétrico de Felipe Varela que ya lució en la visita a Palma de Mallorca de Michelle Obama en 2010. Al no utilizar el collar redondo de piezas nacaradas que llevó en aquella ocasión, le ha dado a su estilismo un toque aún más sencillo.

Sin joyas, excepto unos pendientes de piedra de luna de Tous que ya utilizó en su visita oficial a París, la Reina llevaba el pelo muy liso con la raya al lado y calzado color nude. La Reina Sofía iba de sport, quizás evitando restar importancia y sobriedad a Doña Letizia. Llevaba un conjunto floral de pantalón y camisola que recordaban a lo que llevó en Marivent cuando les visitó Michelle Obama hace cuatro años. Don Felipe llevaba traje oscuro y corbata rosa oscuro. En un entorno estival, con una etiqueta relajada sin cena formal, la Familia Real ha elegido de nuevo la extrema sencillez que parece presidir el nuevo Reinado.