«Tenemos una conversación pendiente»: Cómo mejorar la comunicación en la pareja
El psicólogo Tomás Navarro simula una discusión con su mujer, Nuria Pablos, también psicóloga, para explicar cómo abordar temas polémicos o delicados en la pareja
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«Cariño, quiero hablar contigo, pero no quiero que te enfades»... Este podría ser el arranque de una discusión de pareja o de una de esas «conversaciones pendientes» que a veces se tienen en el momento más inoportuno o de la forma menos acertada... Y esto es precisamente lo que os planteo en la simulación de este video-reportaje que he preparado junto a Núria Pablos (@nuriapablos), mi pareja, que también es psicóloga.
En él os hablamos de esos errores que a menudo se tienen en las conversaciones y que pueden llegar a condicionar la comunicación y el bienestar en la pareja.
Una de las claves en las que queremos poner el foco es que a veces esperamos demasiado tiempo para abordar un tema y eso puede hacer que los pensamientos se hagan una bola y que convirtamos en una gran montaña algo que en realidad era pequeño y no tenía tanta importancia.
Otro error que se puede apreciar en esta conversación es ponerse a la defensiva o hablar en modo acusación. Y eso es algo que se suele hacer a menudo cuando forman parte de la charla los temas en los que implicamos a los hijos, por ejemplo. Y aunque sea cierto que aquello que tenga que ver con lo que hacen o dejan de hacer los hijos se trata de una fuente de estrés importante es una gran equivocación acusar a la pareja, bien diciéndole que ha hecho algo muy parecido a lo que ha hecho ella o bien asegurando que no ha sido suficientemente estricto o estricta con ese tema.
El arranque de la conversación también es importante porque, ¿qué ha pasado en esta escena? Que directamente he mostrado mi temor a que se enfade y eso, de alguna manera, ha predispuesto en negativo a Núria. Si digo que va a ser algo que a lo mejor le enfada, ¿no es probable que piense que, efectivamente, será así? Por tanto, yo solito he provocado que ella empiece «sacando las uñas» mostrándose a la defensiva.
También es importante encontrar el momento adecuado para hablar pues ni justamente después de que haya pasado algo es adecuado, pues tenemos las emociones a flor de piel, ni tampoco cuando ya hace más de una semana que ha sucedido pues, como hemos comentado, eso puede hacer que rumiemos todo lo que ha ido pasando y convirtamos en una gran montaña algo que podría haberse resuelto con una conversación tranquila.
Como conclusión, te propongo que encuentres el momento adecuado para tener esa conversación pendiente y que prepares el mensaje. A mí me gusta mucho la técnica del bocadillo (halago-petición-halago). Pero para eso también es fundamental que tanto tú como tu pareja estéis de un ánimo agradable o de buen ánimo, o al menos que no estéis mal, agobiados, muy cansados o incluso enfadados por otras circunstancias.
Y por último quiero destacar una técnica que siempre es útil: echar mano del humor. Hay formas de introducir una conversación relativamente seria con un toque de humor. Y ahí cada uno tiene que encontrar su «punto». El suyo y el de su pareja.
Puedes descubrir otros consejos de Tomás Navarro (@tomasnavarropsi en instagram) para poner límites a aquellas personas que nos hacen daño en su obra 'Tus líneas rojas' . Y además, puedes leer aquí otros artículos de Tomás Navarro en ABC Bienestar.
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