ABC SEVILLA 05-10-1998 página 12
- EdiciónABC, SEVILLA
- Página12
- Fecha de publicación05/10/1998
- ID0003935934
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miembros de la Familia del Rey en sumarse a la foto. Por parte de la familia de Jaime de Marichalar, lo hicieron sus tíos, María Teresa de Marichalar, José María, Rafael, Carmen y Matilde Sáenz de Tejada. Los últimos en entrar al salón de audiencias fueron los seis sobrinos de don Jaime. Durante la sesión fotográfica Felipe Juan permaneció dormido, ajeno a lo que allí pasaba. Cuando terminó, Doña Elena comentó que el niño pesaba ya seis kilos y medio y que estaba muy grande, pues medía sesenta y dos centímetros. En otro salón del Palacio de la Zarzuela estaban esperando, para saludar a la Familia Real y a a la De Marichalar, el presidente del Gobierno y su esposa. Én el salón principal del Palacio se había instalado un altar. En perpendicular al mismo y a la izquierda, se situaron los Reyes, los Duques de Lugo, el Príncipe de Asturias y los Duques de Palma. A la derecha, la familia De Marichalar. Eri el primer banco a la izquierda, la Condesa de Barcelona y sus hijas las Infantas Doña Pilar y Doña Margarita, esta última con su esposo; a la derecha, el Infante Don Carlos y suiesposa Doña Ana, y el presidente del Gobierno don José María Aznar y doña Ana Botella. La ceremonia A los pocos minutos comenzó la ceremonia religiosa. Seguramente a Doña María de las Mercedes de Borbón y Orleans le vendría a la memoria aquel 27 de diciembre de 1963, cuando ella y el Infante Don Alfonso de Orleans fueron los pa drinos de su primera nieta, la Infanta Doña Elena. En primer lugar se hizo la presentación del bautizando y el rito de! acogida. El arzobispo castrense, monseñor Estepa, preguntó a los padres: ¿Qué- nombre habéis elegido para este niño? A lo que los Duques de Lugo contestaron: f Felipe Juan Froilán de Todos los Santos. ¿Qué pedís a la Iglesia Felipe para Juan Froilán de Todos los Santos? volvió a preguntar el arzobispo. -El Bautismo, respondieron. El arzobispo dijo: Al pedir al Bautismo para vuestro hijo, ¿sabéis que os; obligáis a educarlo en la fe, para qUe este niño, guardando los mandamientos de Dios, ame al Señor y al prójimo como Cristo nos enseñó en el Evangelio? Los padres contestaron: Sí, lo sabemos. Entonces el arzobispo se dirigió a loS padrinos: ¿Estáis dispuestos a ayudar a loa padres en esta tarea? A lo que ellos contestaron afirmativamente. Tras el Gloria, el Príncipe de Asturias leyó la Primera Lectura del Profeta Ezequiel; la SegundaLectura, de la Carta del Apóstol San LUNES 5- 10- 98