Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC SEVILLA 22-04-1993 página 3
ABC SEVILLA 22-04-1993 página 3
3/120
Ir a detalle de periódico

ABC SEVILLA 22-04-1993 página 3

  • EdiciónABC, SEVILLA
  • Página3
Más información

Descripción

EDITADO PRENSA POR ESPAÑOLA SOCIEDAD ANÓNIMA 22 DE ABRIL DE 1993 ABC CANTINFLAS DOMICILIO SOCIAL CARDENAL ILUNDAIN, 9 41013 SEVILLA DL: SE. -3- 58. -120 PAGS. FUNDADO EN 1905 POR DON TORCUATO LUCA DE TENA C A B A de morir Mario Moreno, universalmente conocido por el nombre Cantinflas Durante muchos años era casi lo único que llegaba de México; y no era poco. Sus películas no eran demasiado buenas, algunas eran muy poca cosa, pero el actor era absolutamente extraordinario. Cuando hizo una película de calidad, La vuelta al mundo en ochenta días resultó la estrella y dio la medida de lo que hubiera podido ser en mejores manos. Representaba Cantinflas varias cosas: la ingenuidad, acompañada del ingenio, la socarronería, la humildad, la bondad, la infinita capacidad de hablar sin decir nada inteligible, hasta el punto de haber creado una mirífica forma de uso del lenguaje. Cantinflas decía lo que quería decir, con una casi total eliminación del elemento significativo. La expresión era lo predominante, y por supuesto la manera de dirigirse al interlocutor. Un análisis riguroso del cantinflismo lingüístico llevaría muy lejos. Mario Moreno lo ejercía desde la inocencia y la buena voluntad, a diferencia de otras versiones- sobre todo políticas- que significan aproximadamente lo contrario. El efecto cómico era insuperable, porque tenía enorme gracia de gesto, entonación, descubrimiento de una personalidad atractiva. Los personajes, por elementales que fueran, adquirían la intensidad que les daba el actor, la persona real que estaba detrás de ellos y los sostenía. Ante una película de Cantinflas se sentía una extraña nostalgia de lo que hubiera podido ser si las ayudas que el cine proporciona al actor- tan incomparables con las del teatro- lo hubieran potenciado adecuadamente. Conocí a Mario Moreno en 1974, en México. En el tomo II de Una vida presente he recordado los detalles de aquel encuentro, comienzo de una amistad. Tenía interés en que conociera ¡a película en que había encarnado a Sancho Panza, y nos brindó una proyección en su casa, con amigos muy queridos. Sobre la película escribí después con el justo elogio; pero lo inolvidable fueron las horas pasadas en compañía de Cantinflas. La despedida que me ofreció, combinando lo serio y afectuoso con la broma, fue una creación que podría haber sido una espléndida secuencia cinematográfica. Tuve que improvisar una respuesta medio narrativa, que no disonara excesivamente. Le hablé también de mi fascinación por la calle Uruguay, con los abarrotes llenos de todos los productos de la tierra y de la pequeña industria elemental- frutas, semillas, cuerdas, sombreros, olores, rumor de voces, charla constante- y Mario Moreno, conmovido, me dijo que se había criado allí y comprendía mi entusiasmo. Esto me hizo pensar en algo que es en cualquier campo- pensadores, novelistas, poetas, dramaturgos, músicos, pintoesencial: Cantinflas era radicalmente mexi- res, directores de cine, actores- -de quiecano. A pesar de su genial histñonismo y de nes se puede decir algo semejante. Los países que disponen de unos cuantos se sus portentosas facultades de actor, hay pueden considerar muy afortunados. Si se que decir que era mexicano sin exageramira la realidad mexicana, si se recuerda lo ción. No era la caricatura, sino la estilización de lo mexicano, quizá de lo mejor de ese que han mostrado de ella sobre todo escritores y pintores, la estimación de Cantinflas país tan complejo y difícil que es México. No sube de punto. es fácil que alguien sea la representación de Probablemente la clave de la figura de un país, menos aún de un gran país bastanMario Moreno era su bondad, bien patente te misterioso. Más que en los políticos, más en la expresión de su rostro, y que en que en la inmensa mayoría de los escritoMéxico era proverbial. Cuanto más avanzo res, encontraba a México en Cantinflas. de la vida más evidente me parece que las También en Agustín Yáñez, sobre todo en raíces de la inteligencia son morales; y al su admirable novela Las vueltas del tiemdecir morales no me refiero a los principo que comenté en un artículo titulado pios a que se ajuste a unos u otros la Historia universal de México En este libro conducta, sino a la bondad intrínseca, a y en Cantinflas me parece ver la más fiel reeso que se llama coloquialmente en espapresentación de ló que profundamente es la ñol buena pasta y que se opone a lo que realidad mexicana. es ser atravesado Hágase un recuento de las personas conocidas, por experiencia De ahí la importancia que Mario Moreno inmediata o por su figura pública, y se verá tuvo para su país. Gracias a él circuló por cómo muchas de ellas van a alojarse en el mundo una imagen de México que tenía una de las dos categorías. Imagínese lo atractivo, simpatía, cordialidad, que eludía que ganaría la política, por ejemplo, si este los tópicos al uso, los aspectos que se han criterio fuese un factor electoral. convertido en la moneda que corre y se asocia al nombre de México. Se dirá que La larga serie de las modestas películas esos aspectos son reales; es cierto, o al de Cantinflas compone un muestrario de menos lo han sido; pero han sido explotabondad personal. Casi siempre sus personajes son humildes, muchas veces unos dos por buena parte de la literatura hasta convertirlos en un símbolo eficaz. Se ha pobrecillos; sin la mejor demagogia, sin halagos, se elevan por encima de su condiconseguido que una parte- l a menos gración, de su posición social, de sus recursos ta, acaso la que tiene menos porvenir- incluidos los intelectuales- para estar a pase por el todo. la altura de las circunstancias Cantinflas hacía lo contrario. Salvaba Y todavía no he nombrado lo que fue la- -ésta me parece la palabra mejor- aqueaportación máxima de Cantinflas: hacer llo que entre lo mexicano merece conserreír. La risa ha llegado a ser tan infrecuenvarse y perpetuarse. Y ni siquiera olvidaba te, salvo cuando es malévola, que apenas lo demás, sino que lo presentaba como nos damos cuenta. En nuestra época se ha trasfondo, con la esperanza de que lo meido reduciendo a reírse de alguien o de jor triunfara y lo peor se replegara y se fuealgo. Se la confunde con el sarcasmo o, lo ra desvaneciendo. Si yo fuese mexicano que es peor, con la alegría por el mal ajesentiría por Cantinflas, además de admirano. Y no hay nada más tonificante y purifición y simpatía, una profunda gratitud. cador que la risa cuando es expresión de la dilatación del alma o gozosa expansión Hágase la cuenta del número de autores de la convivencia cuando nos reímos con los demás. Mario Moreno fue un maestro de ello; sin ninguna acidez, sin malevolencia ni el menor asomo de envidia o de colmillo retorcido nos hizo reír innumerables veces, como Stan Laurel y Oliver Hardy, como Buster Keaton, como- n o siempre- Charles Chaplin. viaje de Es, sin duda, nuestra deuda mayor con está en su agencia de viajes él, y esperamos que habrá sido acogido Consúltela con la mejor risa amorosa del otro mundo, cosecha de la que generosamente sembró en este. El s sueños u ABC TODOS! SEN ABC Julián MARÍAS De la Real Academia Española

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.