ABC MADRID 28-05-1995 página 37
- EdiciónABC, MADRID
- Página37
- Fecha de publicación28/05/1995
- ID0001980618
Ver también:
DOMINGO 28- 5- 95 NACIONAL ABC 127 Me dijeron que les había llegado que yo era un Estuve a punto de morir enuna inexplicable infiltrado. Reaccioné violentamente. Dije que descoordinación. Los policías no sabían de mi dejaba mis pistolas. Luego me rogaron que me existencia y disparaban contra mí. Logré huir. Al quedara. Al día siguiente los detuvieron fínal pude llegar a un coche del Seced les se encontraban José Ignacio Pérez Beotegu Wilson y Félix Eguía Inchaurraga, Papi Yo no estaba dispuesto a conformarme con entregar dos comandos y empecé a hablarles de que tenía muchos conocimientos en España. Entonces, me piden que sea... ¡el jefe de infraestructura en España! lo que me permitiría conocer la localización de todos los comandos Para no aceptar a la primera, me hice de rogar, cosa que más adelante también me vendría muy bien y me salvaria la vida incluso, y por fin me dejé convencer En junio de 1975, pasamos a España y un mes después, gracias a los datos que proporciono, se desarrolla la primera gran operación en la que son detenidas unas 150 personas en toda España, no sólo de ETA, sino también de organizaciones de extrema izquierda, como el FRAP y la UPGA, que tenían relaciones con ETA. Entre los detenidos están Wilson Papi Juan Paredes Manot, Txiki que después sería fusilado, y Jesús Múgica Ayestarán, que resultó muerto mientras trataba de huir en las proximidades del estadio Santiago Bernabeu, en Madrid portera se puso a gritar que yo era uno de los etarras. Menos mal que el portero del inmueble donde me había escondido me confundió con un practicante y pude llegar hasta un coche del Seced y esconderme en un piso seguro. Aquella noche me la pasé metida en la bañera, con la pistola en la mano, por si alguien venía a matarme. Nunca olvidaré esa noche hablando de los de ETA, que había que matarlos a todos y otras cosas por el estilo. Ezquerra que iba conmigo en la parte de detrás me decía lo mato, lo mato Al llegar a 30 kilómetros de Madrid, había un control de la Guardia Civil y, milagrosamente, no nos pararon, tal vez porque era un taxi, ya que los etarras estaban dispuestos a matar a los agentes Antes de las detenciones, con la información que yo proporcioné, y en el transcurso de las cuales murió Montxo al suicidarse cuando iba a ser detenido, ocurrió algo que nunca olvidaré. Yon y Ezquerra me dijeron que querían hablar conmigo y nos fuimos en coche por las afueras de Madrid. Fuimos por la Ciudad Universitaria y terminamos sentados en unos bancos del paseo del Pintor Rosales. Allí, Ezquerra empezó a decir que a él le habían acusado en una ocasión de ser de la CÍA. Me puso alerta porque imaginé por donde iban las cosas. Al final, me comentó que les había llegado, por informaciones de independentistas catalanes, que yo era un infiltrado y que lo había dicho la emisora BBC En taxi a Madrid Cuando pasan unos días, llamo a Francia, a ETA, y me pongo en contacto con un tal Erreka Me voy al País Vasco para marcar algunos caseríos donde se escondían etarras y después a Barcelona, donde organizo una nueva infraestructura. Era agosto de 1975. Establezco una cita en el bar la Oca de la ciudad condal con los nuevos etarras que iban a entrar en España, entre ellos Ezquerra Juan Cruz Unzurrunzaga, Yon y José Ramón Martínez Andía, Montxo Por orden del Seced y para saber si ETA tenía infraestructura en Valencia, organizo el viaje en tren por Valencia hasta Madrid. En el trayecto entre Barcelona y Valencia los del Seced no dejaban de pasar junto al compartimento que ocupábamos hasta el punto de que pensé que los etarras se iban a mosquear Al llegar a Valencia, por la noche, Yon fue a buscar un piso de unos amigos pero no había nadie, porque estaban de vacaciones. Los del Seced dormían, mientras tanto, plácidamente en un hotel. Entonces, Ezquerra se agarra un mosqueo tremendo y dice que hay que salir para Madrid inmediatamente Cogemos un taxi y resulta que el conductor era primo de un guardia civil. Al reconocer nuestro acento vasco, se paso todo el viaje Salvar vidas Reaccioné violentamente diciendo que si pensaban eso de mí, que me marchaba en ese mismo momento a casa, que allí mismo dejaba mis pistolas y que se acababa todo. No sabía si me iban a matar allí mismo. Ezquerra y Yon me rogaron que continuara en ETA y que, como medida de seguridad, iría con ellos a los atentados Al día siguiente, fueron detenidos. Así acabó mi tiempo de infiltrado en en la banda terrorista ETA y lo que ha sido mi mejor servicio a España. No sé cuantas vidas he salvado concluye Mikel Lejarza. A punto de morir Por cierto, que en esa huida, yo también estuve a punto de morir en una inexplicable descoordinación. Los policías no s. abían de mi existencia y disparaban contra mí. Conseguí esconderme en un domicilio próximo a ese estadio, propiedad de un subdirector del Instituto Nacional de la Vivienda. A esa familia le di un susto de muerte. Llamé al Seced y me encontré con que había un contestador. Hasta las dos horas no vino nadie a buscarme y en la calle, por poco me mata la Policía cuando una He dedicado mi vida asalvar otras y me he convertido enun proscrito Mikel Lejarza entregó a ABC esta carta dirigida a ETA: No les quedaba otra salida. El golpe fue tan grande que tuvieron que limpiar su imagen, aquella imagen de organización fuerte (ellos mismos admitieron que el golpe que habían sufrido fue terrible, pero que tenían que sacar fuerzas para salir adelante, según comunicado de la organización) Y para lavar esa imagen había que derramar la mierda por alguna alcantarilla. Así, sembraron Euzkadi de pasquines del Lobo; necesitaban cazarlo como fuera; quien no piense como ellos o no esté con ellos es una traidor, ese era su lema. El Lobo (agente del Seced) nos ha traicionado No, no lo penséis ni por un momento, el Lobo no ha traicionado a nadie, porque el Lobo nunca ha estado en vuestra línea, nunca ha comulgado con vuestras ideas, siempre ha estado en contra de lo que hacéis. El Lobo ha cumplido con una misión, y es cierto que os ha espiado, sabiendo que en ello le iba la vida, y no lo hacía ni por dinero ni por gloria, sino porque creía que era su deber, y creía que hacía lo mejor para su país; el Lobo no cobró ni una peseta aparte de su sueldo por sus trabajos. Vosotros, los de ETA, luchabais por vuestros ideales, decíais. Pues el Lobo, por los suyos. Además, vosotros también espiabais, y si hubierais podido infiltrar algún elemento en las líneas contrarias, no lo hubierais dudado ni por un momento. Vosotros declarasteis la guerra al pueblo español. Pero hay una ligera diferencia, vosotros os manchasteis las manos de sagre, y yo no, y no precisamente porque no tuviera ocasiones, pues las tuve todas, en realidad. Os pude borrar del mapa a todos y varias veces, pero mi misión y mi conciencia estaban dentro de esa ligera diferencia, y mi meta siempre ha sido y será la información. Y vosotros gudaris héroes del pueblo vasco, nombrados así y ascendidos por vosotros mismos a través de vuestros brazos políticos. Ahora la mayoría sois unos burgueses capitalistas, y algunos incluso estáis amparados desde unos puestos políticos importantes. Y os atrevéis a reprochar el trabajo de otros, y os laváis las manos como Pilatos, criticando a los que hacen los que vosotros hacíais, como santos varones. Ya, ya sé lo que vais a decir, el momento político era otro, a ver si es que yo no lo entiendo, y resulta que hay momentos o circunstancias políticas que permiten asesinar impunemente como si de una necesidad se tratara. Creo que esto habría que preguntárselo a los que asesinasteis, o bien a los que pudisteis asesinar A lo mejor resulta que el gran equivocado soy yo, y como España está muy mal y los políticos no se ponen de acuerdo, pues nada, cogemos las metralletas y a pegar tiros; ¡hala! a arreglar las cosas por ia tremenda. Pobre país este nuestro, si todos pensáramos asi; ¿por qué en vez de perder el tiempo de esta manera incomprensible, en destruir nuestra patria, no unimos nuestras fuerzas para levantarla? ¿es que nosotros somos más burros que todos los demás, o resulta que estamos hechos de otra piel, y hemos cogido complejo de Caín y Abel? Pues mirad qué legado vamos a dejar a nuestros hijos. Pero claro, pasado un tiempo, os podéis arrepentir, y así se arreglata todo, y aquellos cientos de asesinados y sus familias, que más da, al fin y al cabo es otra página de la historia a pasar Vosotros, antiguos gudaris vosotros sabéis muy bien que quien mejor acaba con el terrorista es la edad, y como desde vuestros cómodos puestos podéis ayudar a que la barbarie termine de una vez. Lo siento mucho pero tendréis que demostrarlo para decir que estáis de verdad en contra de toda esa atrocidad. Yo, como bien dice el nombrecito que me pusieron como fatídico vaticinio, seguiré errante en solitario el resto de mis días. Vosotros matasteis y ahora podéis ser honrados ciudadanos e incluso honorables políticos