ABC MADRID 10-03-1994 página 131

REPORTAJE gráfico f t ti i íí U Está en pantalla. En cuadro. A foco. Aún se le puede ver entrando en el túnel en esa última escena de la película de Armiñán. El más internacional de nuestros actores- una frase ya aceptada por todos los demás- -se ha niuertp en cartel, con las botas puestas, con la frase en la boca y el residuo en el rostro de casi Un centenar de películas. Podríase haber elegido cualquiera otra de sus múltiples personalidades, desde sus primeras- reales interpretaciones, a sus buñuelescos burgueses, sus perfiles americanos o sus frentes cardenalicios. Se queda así, como Quijote, como única y probablemente ya eterna encarnación del alma cervantina, del héroe mesetario, del espíritu caballeresco. Nadie podrá meterse en ese pellejo, calarse la celada, trincarla lanza, espolear los huesos de Rocín mirar molinos y ver gigantes, sin que aparezca a las luces del recuerdo la chispa de su mirada, el apunte de su sonrisa, el filo de su barba. Cinco décadas, nada menos, de nuestro cine, y en cartel. Para siempre Fernando Rey: eran gigantes f i tí H r i