ABC MADRID 12-12-1979 página 99
- EdiciónABC, MADRID
- Página99
- Fecha de publicación12/12/1979
- ID0001304507
Ver también:
Este plano ubica los jardines que deben ser objeto de urgente atención. Frente a la Casita del Príncipe (1) y separados de ella por el paseo de El Pardo (2) tienen en su costado norte unas viviendas (4) y un bar (3) frente a! pabellón, que desentonan con el conjunto. Al final del amplio jardín, en su lado oeste, discutiré el río Manzanares (5) instalo un merendero en esta terraza, frente al pabellón (creo que pronto caduca su contrato) y podría, por tanto, trasladarse a un sitio menos perjudicial para la belleza del lugar. En este caso se podría cerrar la carretera y volver a colocar el estanque formando plazoleta con e ¡pabellón, como estaba primitivamente. Pero queda la parte del jardín bajo, que tiene destrozados los antiguos bojes debido a las personas, sobre todo niños, que frecuentan el merendero en verano y que, inevitablemente, saltan y juegan entre ellos, UNO DE LOS ÚLTIMOS VESTIGIOS DE JARDINES DE BOJ A la derecha y a lo largo del jardín se ha construido una fila de casas que bordean su costado norte, no feas, pero que desentonan por completo con el ambiente, y donde sus moradores cuelgan su ropa a secar y en verano forman gratas tertulias sacando sus sillas al fresco, dándole a la zona un ambiente familiar y doméstico. Debe ser el paraíso para ellos, pero forzoso parece reconocer que no es lo más apropiado para un jardín del Patrimonio Nacional que se exhibe como Museo y que debe cuidar sus obras de arte para ornato e incremento del turismo. Los visitantes deben contemplar desolados el abandono de este viejo y hermoso jardín. Es preciso añadir que, suprimidos desacertadamente los dibujos de boi recortados que existieron en el Parterre del Retiro, y exceptuando la magnífica obra de reconstrucción de los Parterres del Monasterio de El Escorial, llevada a cabo por el Real Patrimonio, este jardín de El Pardo es el único vestigio que nos queda de los jardines de boj recortado que existieron en el siglo XVI 11 en Aranjuez, etcétera, y que tan rigurosamente se cuidan y reparan en Italia, Francia, Portugal y otros países. También aquí podríamos conseguirlo si se colocara un treillage plantado de enredaderas a lo largo de la fachada de casas. Al dársele un estilo correspondiente a la é p o c a del jardín se atenuaría el reflejo de estas casas de vecinos para devolverle su ambienta recoleto y ei empaque necesario a este histórico jardín situado tan cerca de nuestra capital. ¡Bien merece una mirada compasiva y reparadora! ¡Aún estamos a tiempo 1 Marquesa de CASA VALDES La entrada al pabellón ha desaparecido; una carretera innecesaria rompe la perspectiva; un merendero debería ser trasladado a un sitio menos perjudicial para la belleza del lugar