ABC MADRID 08-06-1969 página 142
- EdiciónABC, MADRID
- Página142
- Fecha de publicación08/06/1969
- ID0000893977
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Por Manuel GÓMEZ AROSTEGUÍ O se puede reflejar en unas cuantas páginas todos los avatares interesantes, curiosos y anecdóticos ocurridos en la vida de una entidad como es el Club Atlético de Madrid cuando ésta lleva ya existiendo nada mas y nada menos que sesenta y seis años. No es esto, pues, una historia. Es un reportaje a lo largo del cual se Irán recordando hechos ocurridos desde que el Club fue fundado, sucesos que han marcado hitos o etapas, conocidos muchos por la masa de seguidores actuales del fútbol, ignorados u olvidados otros, vividos incluso bastantes de ellos por personas que como nosotros siguen desde hace años el desarrollo del fútbol en España. Está el Atlético de Madrid entre los principales Clubs de fútbol de España de todos los tiempos. Sus equipos, los hombres que han vestido la camisola rojiblanca a lo largo de la existencia de la sociedad han jugado en la mayor parte de los países europeos, en muchos de América y también en algunos de África. Hombres del Atlético han defendido los colores del equipo nacional español; directivos formados en el Club han regido en la más alta escala federativa el fútbol nacional; en sus filas han jugado famosos jugadores mundiales no españolea y notables técnicos extranjeros han dirigido y orientado al equipo en diversas épocas. Fuera del fútbol, la aportación de esta sociedad ha sido muy amplia también en esas especialidades que se dio en llamar deportes modestos y que ya en los años veinte e incluso N antes entusiasmaban a hombres jóvenes, a pesar de que el ambiente general del pais no era precisamente deportivo. Aunque el fútbol por la popularidad; alcanzada, por su mayor atractivo, por su más amplio conocimiento ha sido el eje y la base de la vida de este Club, seria injusto olvidar que al atletismo era practicado por socios del Atlético- -llamado entonces Athletic- -desde los primeros tiempos de su fundación que también el baloncesto tiene en el Club rojiblanco antigüedad de 1913; que el hockey sobre hierba con equipos masculinos- -hagamos mención especial de Joaquín Aguilera- -tuvo su nacimiento en el Athletic en 1915 para ampliarse la cosa a los equipos femeninos después; que el actual béisbol, llamado entonces pelota base, se empezó a practicar en el Athletic en 1922; que también desde 1919 habla equipo rojiblanco en el rugby; que pelotaris del Ahletic jugaban al frontón en 1923; que los hermanos Alonso y el conde de domar, a los que casi se podría denominar pioneros del tenis en España, se formaron en las ¡pistas del Athletic, que hubo en su primitivo campo de fútbol de la calle de O Donnell; que también el baloncesto, el balonmano, el balonvolea, el boxeo, el patinaje y algunos otros deportes han tenido cabida en el seno de esta sociedad, que es una auténtica sociedad deportiva, que aspira a serlo mas todavía cuando disponga de sus instalaciones proyectadas y en vía de realización. Si los años de existencia no hubieran afirmado suficientemente las bases de es- ta entidad, las reacciones ante hechos y circunstancias acaecidas hubieran constituido cimiento firme sobre el que actualmente se mantiene. Porque no hay que olvidar que al Club le han sucedido muchas cosas desagradables, -absurdas, incomprensibles. Sobre todo en los últimos años, lo mismo en el terreno puramente deportivo que en los otros adyacentes, pero ligados a la vida y desarrollo de la sociedad. Pese a todo o quizá por todo ello, el Atlético sigue en pie, forjado, endurecido, acostumbrándose a poner al mal tiempo buena cara, haciendo suyo, diría yo, el lema que en canción se imbuía hace ya muchos años a los exploradores y que decía así: Guarda tus penas en el fondo del morral. Y ríe ya. Ponte contento y así vencerás la dificultad. Porque en muchas ocasiones los directivos del Atlético, los socios y los jugadores han guardado las penas de las contrariedades y han reído, el Club ha salido adelante. Fama tiene la llamada hinchada atlética de crecerse en los momentos difíciles, de unirse cuando las circunstancias se tornan adversas, de seguir con fidelidad siempre la vida del Club lo mismo en los momentos de euforia y triunfo que en los de derrotas y adversidades. Asi es el Atlético de Madrid, así se ha hecho