Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 21-07-1942 página 3
ABC MADRID 21-07-1942 página 3
3/22
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 21-07-1942 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página3
Más información

Descripción

DIARIO ILUSTRADO DE INFORMACIÓN G E N E R A L 25 CÉNTIMOS DIARIO ILUSTRA- DO DE INFORMACIÓN G E N E R A L 25 CÉNTIMOSia dar á un excelente amigo, que desde ahora había hecho alegrar de picado jamón de Araverá duplicado el pan en, su casa! Y ¡qué me- cena y hongos fritos y colorear. de yemas y recido lo tiene, por. su hombría de bien; y azafrán la candida morisqueta ultramarina que fue yantar heroico- de los- primeros forsu afición mis obras- E es grata la memoria de D. Patricio hasta por la calle, y á leer siempre: las tinie- j a d o del. Imperio Español, y me sabía, de la de ele da Escosura, aún, más que por el Salió a qu memoria ja minuta del condumio que hubiera mérito de sus obras, porque fue el blas, y la voz del acompañante, que repetía podido poner en versos, Baltasar del Alca ¿ai primer, crítico que juzgó en letra de molde! a formulita acostumbrada: -Acfúí. estoy esperándole, señor Eseosura; ¡Pero no fui al comedor! Me; hurtaban a- la. el primero de mis librejos: una colección á ¡gula y al paisaje los acentos de otro poeta, voy a encender el farolito. candorosas composiciones poéticas sacada a Lo cual. efectuado y antes de echar a andar, Adriano del Valle, que- me tenía prisionero, luz; en Sevilla el año 187, ¡ayer de mañana! dijo D. Patricio sacando del bolsillo la cre- IQS codos en la mesa, las sienes én las manos; En El Imparcial, en efecto, el autor de El los ojos en su libro, Arpa fiel, tras la reja de Patriarca del Valle dio cuenta de aquellas dencial -Amigo mío, esta noche voy a dar a us- sus cuerdas, no sé si las cinco del pentagrainocentes ternezas rimadas del simplecillo ted una. buena noticia. Hemos hecho varios ma, las siete de Guido. D Arezzo, o nueve, primer amor de muchachuelo. A. D. Patricio han de referirse mis cuar- nombramientos y he logrado. obtener uno para una para cada- musa; pero, ciertamente impares como el milagro de su estro. Me resarcía, tillas de hoy, que como verá el- lector, con- usted, premiando así su bien probada, bondad la gracia de un soneto al ristorante napolitana, tendrán uña enseñanza menos amarga, aun para conmigo. Esta es la credencial: son seis de Zi Teresa, en la curva salada del golfo mil realitos al año. siéndolo mucho, que saludable. El acompañante, sin conmoverse demasía- parteñopeo, rojo de. tomates y corales, donde Escosura, que llegó a ser ministro varias cantaban tenores y veces, empezó su carrera política, desempe- do ¡dio a Escosura las gracias, guardó en el guisaban ycon sabor ymarmitones, de aceite y, aire latino marineros, ñando una de las direcciones generales, bolsillo el documento y dijo: -i Qué contentos se van- a poner en ñit áz mandólinalá, y rizaban rizos de macarroabandonadísima por sus antecesores; para ponerla al corriente era preciso trabajar día casa! Voy sin perder tiempo a darles la bue- nes en el- viento amargo; de yodo y. agi- io. de limoneros en flor. Se alegraba en su mármol y noche, por lo cual pasábaselas en su ofi- na noticia. Dicho lo cual, apagó el farolito y desapa- la Venus Calipigia del Museo y sintonizaban cina del ministerio hasta cerca de la madrugada. Era invierno y las calles dé Madrid reció entre las sombras, dejando a oscuras y policromías b s peces del Acuario. de entonces estaban punto menos que. in- estupefacto a su favorecedor, que. como dos Hojeé de arriba a- bajo, con reiteración raotransitables, por lo mal empedradas y sucias, meses antes, volvió a tropezar aquí y allí ca- rosa y deleitosa, la- maravilla- a la vez grave y además, de noche, por lo tenebrosas, salvo mino de. su casa, destripando- charcos, mien- y alegre- de este libro de poemas. El, autor cuando la luna las semialumbraba. Asi, trope- tras pensaba: ¡Si a lo menos me hubiera- -memoria de España, corazón dc España- zando acá y allá y paco menos que a tientas. dejado el farolito al irse... ¡Nada! Comida lo ha abierto con un epitafio a José Antonio, I) Patricio, acabado su trabajo, dirigíase a hecha, compañía deshecha. ¡Caramba con el copa de soneto sin ini- eles de consonantes arte su morada, y- al llegar a ella, daba muchas hombre del farolito, y. qué lección ficaba cb nuevo- primer soneto blanco. -leve, como. un gracias a Dios, como quien ha escapado de darme! ¡Si no le. regalo la credencial, has- sudario, piadoso, y firme- -albo lúpulo- -coms un grave riesgo. ta el fin de sus días, o délos míos, me habría una columna. rememorativa. Después, otros sonetos italianizantes, florecen en rimas de jiv Pero hete aquí, lector mío, que una de acompañado y alumbrado El agradecimiento, con- excepciones cónta- comparable belleza, con su esplendor- de ffláraquellas; noches, al. salir del ministerio, acer. cósele ert la sombra un desconocido, dicten- dísi mas, vive mientras lo alimenta la esperan- moles romanos porque esfe poeta de Sevilla za de lograr, o de seguir- logrando- pero, re- latina y sarracena bebió en pe cho italiano el d o l é -Señor D. Patricio, aguarde usted un ins- cibida la merced, cátalo muerto. Quien: ya a primer licor de su vida, y la sangre eme corrs 1 tante que voy a encender un farolito que llenar su cántaro, se inclina cuanto es preci- por sus venas es zumo de vides... griegas- y so ante, la fuente: ya lleno, sé j- ergue y se caldo de vendimias andaluzas, en rara mézilg. traiga para alumbrarle hasta su casa. -Señor mío- -respondió Escosura, grata- aleja de ella. Así lo decía en 1 siglo- xvi- d de or- os dé Siracusa y de Sanlúcar. P o s t á í íijínte sorprendido- no sabe usted cuánto- le portugués fray Héctor Pinto; pero ama me- toda. las Españas, que cantó en; ftjfasílftei agradezco esta fineza; porque las endiabladas jor salpimentó en el xv ii esto del jarro o gongonnos a las alíay atas de los Reyéá íC- acalles de Madrid están sólo buenas, para IIÜ cántaro el jesuíta Gradan en su Oráculo ma- tólicos, cuando esperaban, al máximo AlrmY nual y ariede prudencia: Más se saca- -dijo- -rante. de la Nueva España de Dios, clásica tener que cruzarlas. Y echó a andar alumbrado por el farolito de la dependencia, qué de la cortesía: vuel- la veste; -nueva la entraña, místico inventor y acompañado de su amable, portador, con el ve luego, las espaldas a la fuente el satisfe- de avemarias, ya en; la arquitectura grave de cual fue hablando, deseoso, de conocerla cau- cho, y la naranja, exprimida cae. del oro al la lira, ora en la travesura elegante de la. esInicio. Acabada la dependencia, acaba la co- pinela, cuando en el redoble del romance; zur- sa a que se. debía este, insólito auxilio. -N a d a hay que agradecerme- -dijo e! rrespondencia, v con ella, la estimación. Don cidor de relaciones lejanas y forjador de imáalumbrante- Yo soy enteramente- un des- Patricio pudo decido en su caso: Hecho e! genes bizarras que son substancia de idea y ocupado; leo con gustó los escritos de- usted, favor, apagado el farol Y, con faro- lito- ó. n. o vano retorcimiento ornamental, este- poeta v. -sabiendo que por ahpra lostrabajos; de su sin él, ¿quién no ha probado cien veces la se creó su arte y su voz. Por eso tañe sqb. re crespas testuces, cuerdas de guitarra. rn la oficina le. obligan ít trasnochar, díjeme: Voy hiél de esta clase de desengaños? a esperar que salga D. Patricio para guiarle FRANCISCO RODRÍGUEZ MARÍN nueva lira que ti- ene brazos retorcidos. de cuernos bravos, cuando evoca al. malogrado con estaMucecita. (Director de la Real Academia Fernando Villalón, precursor de la poesía del El así acompañado, al llegar. a su casa, quicampo andaluz, que le cortó las alas a Ps- so dar al hombre del farolito una- gratificagasci. hoy jaca de José Luis Estrada, señor ción; pero éste la rehusó cortésmenté. de Corte v Cortejo, pedal en trémolo de esr Encantado quedó Escosura del generoso V TINA puelas sobreseí compasillo del galope. Y no proceder de aquel desconocido, y más todavía Para un poeta. llora, porque no es un sentimental, sino un cuando: a la noche siguiente, y otra- y otras ASTA la estancia donde acuño mis sue- fuerte; canta, fiel al, arpa fiel, sin. pánica m á s se, repitió. l a escena de la, primera. ños- -maravedises sin curso de mi po- flauta, ni patas de chivo montuno, sino iriás Como no siempre iban silenciosos- durante breza dorada- -llegaba por el balcón bien con aletas de pez, líricas zalomas le estas nocturnas caminatas, D. Patricio fue sabiendo el nombre v la vida v milagros de la llamada de Véspero, desde un- fondo lejano marinería, v si alguna, vez soplase, por lio su bienhechor, uno de esos hombres que. fra- de. lienzo divisionista: un cielo cálido y br- i- suspirar, sería en cornamusa de caracola, casan en todo aquello que emprenden. Era llant. é. -de cobren rojizos y oros viejos, lleno enamorado de amor y guerra. enamorado casado v- ínantenia pobremente. al matrimonio de livores, golpeado y herido de crepúsculo. del mar, madre de Ánadiom. ena y- camino, una biia, profesora 1 e. piano, aue daba lec- Arriba, adonde no- alcanzaba aún, la ascensión glorioso de su patria: no cabe ser más ínteciones baratas a domicilio. Y añadía tímida- de la noche, en un mar quieto, de naranja y gramente poeta y más totalmente español. sin olas, pintaban su caprichosa- cartografía mente alguna vez: Adriano me hurtaste a la doble gula, cía las nubes, islotes de caramelo, -Si buenamente pudiera usted hacer algo llo. cola de comadreja, dorso giba de came- mis fauces y mis ojos. pero me resartí. ó tii de ballena, en por. mí... ficción de su locura. poesía para los cinco sentidos, aunque tú pre. Llegado el mes de marzo y conviniendo que apoyaba Hamlct la al balcón! Más, tardo, fieras dos, el oído yN la vista. y por eso tú ¡Pero yo- no me asomé ampliar cierta plantilla en su ministerio, don ver? o es siempre pintura y canción. Yo tamdel ocaso Patricio quiso- recompensar con una crederi- cuandoy- las violetos barbas del llenaraíf í Ví: -bién, en nombre de- mi progenie napolitana cinto. las niveas retrato de- mi ciaiita de seis mil reales a su bondadoso padre se ahilaron de humos y deslavaron la y andaluza, te saludo con 1 a voz de- nuestra acompañante nocturno. cosa que obtuvo sin raza. la voz latina, sincera, cordial y antigua en- vaguedad dificultad, y va en el bplsillo el nombramien- figura el comedor unacíe- fantasma, me yllamó de nuestra antigua sangre. desde tufarada caliente aroío, 3- f) uella noche iba r ensando. i bajar, de. mosa de nuez moscada, cebolla y laurel; yol su oficina: ¡Qué agradable sorpresa le: voy a HOMBRE DEL FAROLITO M OF RENÜA V E S P R- H

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.