ABC MADRID 12-07-1942 página 3
- EdiciónABC, MADRID
- Página3
- Fecha de publicación12/07/1942
- ID0000365224
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DIARIO ILUSTRADO DE INFORMACIÓN GENERAL. 25 CÉNTIMOS S ITALIA Inglaterra: el llamado equilibrio e ur o p e q. como Poder temporal, el predominio del CatoSin el camino de Italia, no hubiera podi- licismo, las guerras contra los turcos hasta partir de Fernando e Isabel la estra- do Carlos extravasar ni asociar las dos ma- aniquilar su poder y otras muchas causas ajetegia diplomática, en Europa, se pue- sas territoriales del Imperio: Germania y nas al espíritu exclusivo de dominación, fuede diseñar como una doble tenaza: la España: seccionándole en dos, Francia ga- ron las que sostuvieron aquellas guerras inceque cierra Francia alrededor del Imperio es- naba la partida. Y he aquí las campañas de santes y dieron carácter a los actos de nuestra pañol (desde Francisco I) y otra más amplia Italia, adonde vamos, en el siglo xvi para política y de nuestros soldados con la que Inglaterra envuelve al Imperio evitar el cerco, la asfixia, la destrucción de Idénticamente, en la Cruzada, Italia llego a y a la propia Francia (desde Enrique VIII) nuestra sagrada idea de unidad. Italia era nuestro suelo sin deseo de adquisición de tePor etapas- Isabel, Richelieu, la Masonería para nosotros garantía de independencia y rritorio, ni de dominar, ni con ánimo de lujudeorrepublicana- -las mandíbulas de esas de expansión. Con una Italia afrancesada, o cro; también vinieron aquí a morir sus soldatenazas estratégicas van arrancando bocados en mosaico, la proyección sobre el Norte dos por cuestiones más graves y profundaa la obra idealista de España, restándola te- de África, el rescate del Oriente Próximo, mente políticas: liberar a Europa de la cizaña rritorios y aniquilando su Idea hasta redu- la pureza de la fe religiosa, la libertad del disgregadora, secesionista, regionalista, fran, cir el gigantesco Imperio al pobre solar so- mar- lago y la derrota de la barbarie berberis- co- inglesa; hacer guerra al comunismo hasta bre el que reza un Chamberlain en 1898: ca no hubieran sido posibles. Y, sin asegurar aniquilar su poder aniquilador, la colabora- Hay que repartirse las naciones mori- ese flanco, tampoco la epopeya americana. A ción y solidaridad europeas, la exaltación de la fe católica y el triunfo de esa otra fe en el bundas España le interesaba una Italia completa, ho Carlos, que hereda las ideas de Isabel y mogénea, plena tanto para no perderse en el destino fecundo de las normas nacidas del fasi Fernando, principalmente las de éste incom- dédalo de los localismos, como por afinidades cismo, antimarxista y patriótico. Con una España hostil o en manos de sus iparable Príncipe, procura establecer el Im- espirituales; y a Francia le convenía una Ita. perio por la política de las alianzas, de las lia dividida, subdividida, que no hiciese som- enemigos, Italia estaría encerrada, cercada y tolerancias y de la habilidad. Me parece exac- bra ni a su empresa antiespañola ni a su cul- a su merced. Con la España falangista, una, tísima esta observación de Ballesteros: que tura racionalistía. Maquiavelo, que tanto grande, libre, Italia está asegurada también en Carlos sólo mantuvo guerras defensivas. Pue, s aprendió de Fernando de Aragón, al abogar su unidad, grandeza y libertad. Con una Itadesde Isabel y Fernando hay tendencia a por la Italia única, abogaba por el plan espa- lia débil, manejada por Inglaterra y Francia, EspañaT estaría cercada, amenazada, con amistarse con Inglaterra y Portugal, con per. ñol imperial y por su idea paneuropea. el mar cortado, sin posibilidad de calma inte severante esfuerzo, para neutralizar así, inAhora, en esta guerra, que es la época que cruentamente, a la rival y envidiosa Fran- nos preocupa, encontramos planteado el proble- rior ni de expansión hacia el Sur, Una de cia. El trato de Carlos con Enrique VIII y ma que comenzó con los líos familiares de otra son clave, sus políticas internacionales los episodios amatorio- políticos de Felipe II Habsburgos y Valois y sus sucesiones, en los se perfeccionan y completan. A cada una, con María e Isabel, son actos de ese drama mismos términos que antaño: o la idea de la sola, si se deja de la otra, la pueden rodear y oprimir otra vez, porque son dos naciones histórico que podría titularse: Yo quiero a unidad de Europa, la idea española, ¡a ¡dea víctimas de la estrategia del cerco el equili Inglaterra Mas la fortuna es vaivén, y cae del. Eje, o la pulverización de Eur, o, pa bajo brio europeo desde el quinientos. Juntas, la suspirada Inglaterra en el antiespañolis- el pie de dos paísegifrjerte. s y unjdqs 1 la polícombinando sus políticas: exter Ío? í 4 %i, son inmo, por la vesania erótica de, Enrique VIII, tica del equilibrio europeo la famosa En- cercábles. Y, esó constituye pa rá las dos; el ¡por la atracción; astuta de Francia... y por tenté cordiale de Inglaterra y Francia. esplendor y la paz. 1 su propia inclinación a la piratería Ya las Son dos constantes históricas, son la opPorque España e Italia, conjugándose, ya dos tenazas se han fundido en una, y desde ción; la resolución será, en estos momentos, esa fecha es fácil la explicación del derrum- para siglos. Italia, con el triunfo de la ances- no son naciones emparentadas entre las mebamiento del. edificio que España construyó tral política franco- inglesa hubiera quedado trópolis enemigas y sus colonias (Francia, In sin desmontarle piedra a piedra: la penúlti- cercada. Y por eso vino a luchar a España, glaterra y sus imperios africanos) sino que ma, el Tratado dé 1912 para eliminarnos de en nuestro Alzamiento: para eAatar que una devienen naciones fronterizas o sea inte, 1 a posibilidad de Marruecos; la última, el España partida y un territorio en poder de gradas en Europa, en cuerpo y alma, pero en Comité de No intervención para hundir Rusia, de Inglaterra y de Francia, le cerrase el tránsito hacia el continente negro, cuyas la propia nacionalidad española y, roto en la boca del Mediterráneo, dentro del cual está orillas son postulado de su sistema militar defensivo y prenda de su independencia, y cuyo tres pedazos el territorio nacional, bolcheviinserta totalmente: lo mismo que fuimos nos- hinterland es, por ley natural de crecimiento, izarnos y protegernos. Un finís Hispanice: otros a Insbruck y a Pavía a saltar el clavillo Catalunya, bajo la dependencia de Francia; de la tenaza que pretendía ahogarnos y a sol. y por esa, otra ley biológica de que Norte ¡Éuzcadi, tutelado por Inglaterra y el resto, dar por su ruta la fusión europea de los pue- vence a Sur espacio vital incontestablemen en almoneda, bajo Rusia o quien llegare... blos regidos por la Casa de Austria. Juz- te suyo. El cálido patriotismo y la sagacidad políi El clavillo que debe servirles a los dos gando, en general, la conducta de los españo. Estados, inglés y francés, para unir en giro les en Italia- -copiamos de 1 Picatoste, Estudios tica del Caudillo y del conductor de la diplo, las mandíbulas de sus tenazas es Italia, al sobre la grandeza y decadencia de España- macia, Serrano Súñer, han sentido, como por principio de la maniobra. En Italia se gana, es preciso decir que no llevaron a aquella Pen- su lección lo ven todos los españoles, que Itaprimero, y se. pierde, después, la larguísima ínsula solamente el deseo de una adquisición lia y España son garantía, la una de la otra, batalla por el triunfo de uno de estos dos de territorio y de una dominación productiva, de integridad y grandeza. Y así volvemos a conceptos: O unidad europea, representada como los franceses, ni hicieron aquel rico sue- los ideales de Isabel y Fernando: volvemos a por España, unidad que hace de Europa ca- lo teatro de. aventureros sujetos a una paga y la verdad geográfica y política, después de la neza y señora del mundo y cl. éva su civili- al saqueo, como los suizos y los alemanes, sino distorsión de cuatro siglos con que la rivalización mediante la Jerarquía, el orden y la que consumieron allí los caudales de España, y dad y el odio de Francia e Inglaterra impipaz permanente; o caos de Europa, fragmen- vieron morir a sus soldados por cuestiones dieron iá marcha de Italia y España dentro de tada en mil nacionalidades rivales, con sólo más graves y profundamente políticas. El la lógica de su órbita. dos pueblos compactos y fuertes, Francia e equilibrio europeo, la influencia del papado TOMAS BORRAS ABC DIARIO ILUSTRADO DE INFORMACIÓN GENERAL. 25 CÉNTIMOS M iá? A