ABC MADRID 22-07-1910 página 4
- EdiciónABC, MADRID
- Página4
- Fecha de publicación22/07/1910
- ID0004372243
Ver también:
C, ViERNES a DE JULIO DE I 9 JO. EDICIÓN f PAG. 4. un cargo importante, dentro ó fuera del imperio, de los jóvenes turcos Viendo que no le hacían caso, se desterró voluntariamente á París, entablando una activísima campaña contra el Comité Unión et Progrés y los gobernantes de la Joven Turquía. Hasta hace poco enviaba su periódico bajo sobres sellados á todos los puntos del imperio; el Gobierno prohibió su entrada, aunque nada podía hacer contra las oficinas de los correos extranjeros establecidas en Oriente, por cuyo conducto llegaba á Turquía. En la puerta de una de dichas oficinas de Correos fueron detenidos dos individuos cargados con paquetes del último número del MecUroutiéte, y esta captura ha facilitado mucho, según se dice, la gestión de las autoridades policíacas para descubrir los miembros de la Asociación secreta. Este relato es confirmación de los temores expresados en crónicas anteriores, y demuestra cuan pesada y ardua es la tarea que incumbe al Gobierno de la Joven Turquía, que ve siempre contrarrestados sus loables esfuerzos para la regeneración del país. JATOIET EFFEKDI BLANCO Y NEGRO 5 2 PAGINAS 30 CÉNTIMOS El número correspondiente al domingo 24 de Julio contendrá: Magníficas fotografías de todas las a c t u a l i d a d e s de la semana. Maravillosas i l u s t r a c i o n e s en color. Artículos y poesías de e m i n e n t e s literatos. LA MUJER Y LA CASA Interesantísima sección femenina Constantinopla, Julio. DE NUESTRO CORRESPONSAL GENTE MENUDA Amenísimos trabajos dedicados á los niños, entre los que se repartirán trescientos premios. B C EN LOS ESTADOS UNIDOS NOTAS DE VIAJE En Nueva York no podíamos vivir. Las personas mueren como moscas, y las moscas viven como los gatos, siendo preciso matarlas siete veces para que se mueran de veras y nos dejen en paz. -Regresar Roosevelt de África, desencadenarse una tempestad cruel, cesar ésta y venir luego un calor asfixiante, del brazo de la muerte, ha sido una misma cosa. Para abrir el periódico y no echarse á llorar deberíamos tener un corazón de acero. La primera página es un epitafio diario en memoria de los fallecidos en la jornada anterior, v el resto, anuncios. Así andamos de noticias; en vista de todo ío cual el que tiene una peseta huye de ía gran metrópoli hasta donde la peseta alcanza. Yo huí también, después de conferenciar un buen rato con mi bolsillo, y decidí, como resultado de la conferencia, realizar la excursión que por mucho tiempo tave en proyecto. Ahora la oportunidad no nudo ser más propicia, y por esto la he aprovechado, toaiando un billete de precio reducido de ida y vuelta para Niágara Falls. Los hay baratísimos, por ser época de vacaciones, y además por caer en lunes la fiesta del 4 de Julio, lo que supone tres días sucesivos de holganza, pues el sábado sólo se trabaja medio día, y aun ni esto en verano en muchas casas de comercio v oficinas públicas, etc. En el tren expreso de la noche salimos mucha gente de Nueva York; pero el caso es que atravesamos eí espacio en un artefacto diabólico, compuesto de tres coches ordinarios y cinco vagones- camas abarrotados de viajeros. Todo el mundo venía alegre, cantando nnos, comiendo otros y adquiriendo los demás posturas tiernas. La libertad de este país permite que los muchachos se lleven de excursión á sus amiguitas, aunque sea por alguna semana, sin menosprecio del decoro femenino, y, claro, en uso de la misma libertad, hay cada escena que tiembla el verbo en esta especie de hoteles ambulantes. LOS TOROS Efemérides y artículos taurinos. Pasan muchas estaciones sin que nos detengamos. El tren corre á una velocidad media de 55 kilómetros por hora, y como la máquina consume antracita, no nos molesta el humo ni los residuos de combustible. Llevamos, por lo tanto, todas las ventanillas abiertas hasta arriba, entrando un airecillo agradable desde que nos hallamos á regular distancia del punto de partida. Me acompaña un amigo con el cual me une el mayor afecto, y luego de haber hecho mil comentarios acerca de cuanto nos rodea, con las comparaciones consabidas propias de todo español que viaja por el extranjero, tomó él una guía y yo un pedazo de papel, en donde voy apuntando estas notas. Estamos sentados en unas butacas del salón de fumar, que, á su- vez, sirve de gabinete de toilette para los caballeros, y al poco rato nos quedamos solos. Al yanqui le gusta acostarse temprano; es un detalle más que le diferencia del español... Son las once, y como á las siete y media de la mañana debíamos llegar á Buffalo, creímos muy práctico ir en busca de nuestras literas; mas ¡ay! los negros empleados del sleeping habían transformado aquello en una sala lúgubre como la de un hospital, y no se oía ni el aleteo de una mosca. Ardía una luz pálida, que sobre el verde de las cortinas daba un tono obscuro, triste, siéndonos difícil encontrar nuestra cama en aquella obscuridad. Por fin pudimos vislumbrar el número, que una mano negra nos indicó: nos des- nudamos más ó menps desembarazadamente, y á dormir, no sin que antes oyéramos algún feviso de un vecino empeñado en que ni las buenas noches habíamos de darnos. A las cinco de la mañana comtmmó át nuevo el movimiento en el sleeping. Yo no tenía maldita la gana de levantarme aún; pero la curiosidad me desveló, y asomé entonces la cabeza por entre las cortinas verdes. Aquello me hizo el efecto de cualquier cosa menos un coche- cama de un tren en el cual viajan personas correctas. Su construcción es sumamente incómoda y hasta inmoral, pues estando las literas corridas á ambos lados del pasillo central, resulta ser éste el único lugar en donde hombres y mujeres deben vestirse. ¡Luego se citan como modelo los trenes americanos! Una vez vestidos y cambiada la decoración del coche, nos sentamos mi compañero y vo junto á la ventanilla para contemplar el paisaje, que por cierto vale bien poco, hasta llegar á Buffalo. Entramos con exactitud matemática en el andén á la hora del itinerario: á las siete cuarenta y cinco. Habíamos formado el plan de quedarnos veinticuatro horas en esta ciudad, y así lo hicimos, aunaue después nos hemos arrepentido. En Buffalo hay muy poco que ver, y mái bien que una ciudad parece un pueblo. Tiene 376.587 habitantes, y está situada en el extremo Este del lago Erie, en el Estado de Nueva York. Báñanla dos ríos: el de su nombre y el Niágara, distando 20 millas de las cataratas. Sus calles son, por lo regular, anchas 5 bien trazadas, con dos hileras de árboles que le dan cierto aspecto agradable. La mayoría están asfaltadas. Main Street es la mas importante y h única que tiene vida de gran centro comercial, pues tiene algunos buenos edificios ¡como la Biblioteca Pública, la Caja de Ahorros, la iglesia católica de San Luis v un par de teatros aceptables. Delaware Avenue es la quinta avenida de Buffalo; pero no puede comparase á esta aristocrática arteria neoyorquina más que por el hecho de vivir en ella las clases adineradas. No hay apenas una casa de piedra, abundando la madera como en los pueblos del campo. Siguiéndola hacia el Norte, conduce ai cementerio llamado Foret Lawn y á un parque contiguo, que, sin duda, es lo mejor de la ciudad. Dos plazas tiene también que valen algo En una está el gran obelisco erigido á la memoria de Mac Kinley, quien fue asesinado en ésta el año 1901, al celebrarse la apertura de la Exposición panamericana, y otra es Lafayette Square. Desde una de las ventanas del hotel del mismo nombre veo bastante animación en la plaza mientras cierro estas cuartillas, esperando comenzar otra mañana con mis impresiones sobre el Niágara. Me han dicho que es hermosísimo el viaje desde aquí en tranvía, y por esto no he ido directamente á las cataratas en tren, aprovechando al mismo tiempo la ocasión de dar un vistazo á esta poco placentera ciudad. KNICKERBOCKER Buffalo, Julio. DE SOCIEDAD El domingo, festividad de Santa Cristina y San Francisco Solano, celebrarán sus días, entre otras señoras, las siguientes: M Duquesa de Mandas; marquesas de Pidal, Campo Sagrado, Toca y viudas de Vistabella y Valdeiglesias; condesa viuda de Villariezo; baronesa de Casa- Davalillo; HrtmimnHiMrifwmimnin!